Special Abilities.

Capítulo 16.

Caminaba sin prisa por la orilla del mar, mis pies sentían las asperezas de la arena, levante mi vista para ver un edificio alto, quizás tendría unos 6 pisos, se veía bastante antiguo, su fachada estaba cubierta solo por ladrillos oscuros. En el último piso, se podía ver un gran cartel con manchas de pintura, y una frase que no se distingue del todo bien. Me encaminé a la entrada y sin mayor problema comencé a adentrarme en él.

Mismas paredes, mismos pasillos, mismas luces brillantes, y mismas sombras con apariencia humana que recordaba sin saber muy bien de dónde. Caminaba por blancos pasillos admirando las habitaciones que se encontraban a mis costados, cada habitación tenía una ventana pequeña en la cual se podía ver su interior y en cada puerta un pequeño letrero con datos. Camine unos metros más, hasta toparme con una puerta que llamo mi atención, acerqué mi vista y comencé a leer.

"Sujeto de prueba número 26
Edad: 3 años, 10 meses, 13 días.
Estado: Activo
Rendimiento: 19% aún sin respuesta esperada"

Al mirar al interior de la habitación había una niña saltando mientras veía en las paredes diversas fotos de personas, cuando dejó de saltar se acercó a un imagen y la tocó, pensé que iba suceder algo, pero la pequeña solo siguió saltando, seguí recorriendo el frío pasillo en busca de alguna otra puerta que llamara mi atención.

"Sujeto de prueba número 32
Edad: 4 años, 1 mes, 14 días.
Estado: Activo
Rendimiento: 20% aún sin respuesta esperada"

En esta habitación había una niña de cabellos largos, de un color castaño claro, no podía ver su rostro porque estaba sentada de espaldas a la ventana, golpeé dos veces el vidrio que nos separaba, pero luego vi que tenía una clase de audífonos de color blanco por lo cual era imposible que llegara a escucharme realmente. A unos metros de distancia de esa puerta, me detuve a leer.

"Sujeto de prueba número 48
Edad: 3 años, 2 meses, 17 días.
Estado: Activo
Rendimiento: 18% aún sin respuesta esperada"

Luego de terminar de leer, me acerqué a la ventana para ver que al interior había una pequeña niña sentada en el piso, mientras frente a ella había varios objetos, algunos pequeños y otros un poco más grandes, al fondo del pequeño cuarto, se encontraba una cama y una mesa con una silla, y nada más. Esta pequeña llamó mucho mi atención por lo que me quedé mucho tiempo observándola, ella veía fijamente una moneda que se encontraba en el piso y no apartaba la mirada, hasta que alzo la vista rápidamente mirando al frente, lucía algo asustada, y de un segundo a otro, su mirada se topó con la mía.

−Cam− Asustada abrí mis ojos y me encontré con Teo a un lado de mi cama.

−¿Que sucede?− Pregunté con calma.

−Es hora de entrenar− me sonrió.

−Claro, ya bajo.− El asintió y salió del cuarto, al mirar a mi lado, las chicas no estaban por lo que supuse ya estaban entrenando, toqué mi cabeza y froté mi frente, lentamente me puse de pie y me dirigí al baño para comenzar mi día.

Bajé las escaleras mientras estiraba mis brazos, me dirigí al patio para comenzar con mi rutina de siempre, saludé a todos con un "buenos días" para luego acercarme a donde estaban los sacos de box y comenzar a golpearlos, luego de unos 20 minutos mi mirada se fue a parar a Will el cual formaba sus raras masas, pero estas ya no eran de color negro, sino de un color algo anaranjado suave, caminé en su dirección.

−Hey, chico nuevo− este giró su vista hacia mí y comenzó a reír− No te rías, es tu apodo, acéptalo.

−Lo sé, pero aún se me hace gracioso.