Otro puto día más. Un sábado del mes de Julio. Perfecto. Me levanté de la cama bastante rápido la verdad, y dejé mi móvil cargando en mi cuarto. Decidí bajar a desayunar pero, antes de todo esto, decidí ver la hora en el reloj de mi baño. Las 9:07. ¿Qué cojones hago despierta a estas horas? Suspiré, pero tuve que bajar a desayunar.
Tanto mi madre ni mi hermano estaban. Era raro. ¿Qué harían fuera a las 9:00 de la mañana? No lo entendí, pero rápidamente ví en un lado de la encimera de mi cocina una nota escrita por mi hermano, que ponía lo siguiente:
"Nos hemos ido a comprar comida y luego a ver a la yaya, volveremos un poco tarde. Besos"
Bueno, por lo menos tranquilidad por la mañana. Lo que me preocupa es que mi madre desde que murió mi padre nunca ha estado muy bien de la cabeza. Va bastante al psicólogo, pero nada; sigue igual. Pero bueno, mejor no pensemos en estas cosas.
Cuando terminé de desayunar, subí a mi cuarto y miré los Whatsapps, no había nada interesante, sólo grupos y más grupos que no paraban de hablar, con que volví a dejar el móvil en mi mesa y me fuí preparando la ropa para cambiarme. Me cojí una camiseta de manga corta con rayas blancas y azules, y unos pantalones vaqueros cortos.
Cuando terminé, empecé a oír que alguien me estaba llamando al móvil. Sonaba la canción de Disconnected, de Pegboards Nerds. Esa canción que me gusta tanto.
Cuando cogí el móvil ví que era mi mejor amiga Alba (sí, las dos nos llamamos Alba, es una coincidencia). Lo cogí rápidamente.
-¿Sí?
-¡Alba! ¡Hola!
-¡Hola Albichu!
-¿Puedes quedar?
-¿Ahora?
-Sí.
-No sé, se lo tengo que preguntar a mi madre, pero no está mi madre. Ahora la llamo y te digo.
-Vale.
Y colgé. Llamé rápidamente al teléfono de mi madre. Tardó un poco en cogerlo pero bueno.
-¿Sí?
-Mamá.
-¿Qué?
-¿Puedo quedar un poco con Albichu?
-No.
-¿Por qué mamá? ¡Tengo 18 años!
-Me da igual tu maldita edad. Siempre igual. Te quedas en casa.
-¡Es injusto! ¡Mamá, no soy una cría! Soy mayor de edad, ¡me tendrías que dejar ir a donde quiera!
-Si he dicho que no es que no.
-Vete a la mierda.
Y le colgé. Estoy harta de que mi madre me tratase como si tuviera 10 años o algo así. HARTA.
Volví a llamar a mi mejor amiga.
-Albichu.
-Dime, ¿te deja?
-No estoy harta de ella tía. Me trata como una cría.
-Bueno tranquila, seguimos hablando por WhatsApp, o si quieres por teléfono. Como quieras.
-Vale, te quiero.
-Y yo.
Colgó ella. Suspiré. Me fuí a mi cuarto y me tumbé. Miraba al techo todo el rato. Estuve pensando como un cuarto de hora.
No sabía qué hacer con mi vida. Estaba harta...
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¡Hola, chiquis!
Bueno bueno, esta es la 1ª novela que hago y bueno... espero que os guste, porque yo no soy muy buena en escribir novelas xD. Esto no creo que trate sobre Rubius, pero si queréis que trate, ¡escribirlo en los comentarios! Muchos besos a todos y gracias a los que estáis leyendo. CORASÓN GAY <3 xd.
