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Pov Jimin



Salí temprano de casa ya que tenía qué pasar antes a por Lia, Le había prometido acompañarla hoy al parque y debía aprovechar que era fin de semana. Pase las diferentes calles, bastante tranquilo y pensando en algunas cosas que debía hacer el lunes.

Al llegar a la casa de la ya nombrada, toque el timbre de forma leve y luego de unos minutos está abrió con una sonrisa.

—Hola Minnie —Su voz resonó en mi cabeza y simplemente suspire, últimamente no había tenido tiempo de estar con ella.

Lía y yo éramos mejores amigos, en algún punto de nuestra amistad, nos gustamos y nos volvimos novios, pero aveces era como si siguiésemos siendo mejores amigos y listo. Cosa que no me desagrada, ya que se vuelve más cómodo a la hora de hablar con ella.

—Hola enana ¿ya nos vemos?- esta asintió y salió de su casa, cerrando la puerta y comenzando a caminar junto a mi.

—¿Que tal estás? Me tienes olvidada ridiculo— solté una risa divertido y lleve mi cabello hacia atrás.

—Nada fuera de lo normal, estoy dando tutoría a algunos chicos y chicas...pero es cómodo, me caen bien.

—Sabes jimin, últimamente me han estado llegando rumores sobre ti y pues, quería hablarlo antes de sacar cualquier conclusión —La mire extrañado pero sabiendo, por donde va el tema de la conversación.

—¿Que rumores?

—Sobre una chica, pálida, cabello rizado ¿Te suena? —Claro que me sonaba, estaba hablando de cerezita...emmm...de sheila.

—Solo es una de las chicas a las que le doy tutoría, nos llevamos bien y listo, no entiendo por qué las personas arman tanto problema la verdad.

—Se como eres y seguro te llevas bien con ella, sabes que no tengo problema con eso, pero sólo quería comentártelo...Ya que ese secreto a voces puede causar problemas—Aveces adoraba muchísimo lo comprensiva que Lia podía llegar a ser, pero otras veces era realmente extraño, que no tuviera ni una pizca de celos, por ciertos temas.

—Lo se—Murmuré, cortando la conversación y continuando con la caminata.

Habíamos llegado en corto tiempo al sitio y rápidamente nos adentramos a este, buscando algo que hacer. El lugar estaba repleto, personas paseando a sus mascotas, amigos en grupos, parejas paseando...un fin de semana de admirar.

Conseguimos un puesto de helados y luego nos sentamos en una de las bancas a charlar...todo iba perfecto, hasta que mi mirada se desvió a un grupo en concreto. Las reconocía perfectamente, eran compañeras del instituto, pero entre ellas estaba la rizada, con aquella sonrisa característica, parecía divertirse mucho con sus amigas, transmitía una buena vibra admirable. Sin siquiera darme cuando me había perdido completamente en aquella vista, analizando sus movimientos y diferentes expresiones, soltando pequeñas risas cuando hacia algunas de sus ocurrencias y olvidandome del exterior...bueno hasta que Lia volvió a llamar mi atención.

-Wow, estabas lejos ¿qué miras? —Parpadee repetidas veces y negué de forma constante con la cabeza.

—Nada, nada...Solo pensaba ¿que me decías?

—Estás raro—

Y cómo negarlo, me sentía raro...y lo peor es que no sabía qué diablos me pasaba.

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