Capítulo VIII

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Como acostumbraban una vez mas salieron de paseo con los niños, pero esta vez, todos llevaban ropa extra ya que Terry les había prometido que ingresarían al río.

—Yo no sé nadar señor Grantchester.

—Descuida Anthony yo te enseñaré.

—¿Lo has escuchado Tia Candy, el señor Grantchester me enseñará a nadar?

Candy sonrió. Anthony sin duda disfrutaba de aquellas salidas.

—Terry, prometiste que me enseñarías a nadar —la pequeña Sofía le recordó.

—Sofia mientras Terrence le enseña a nadar a Anthony yo puedo hacerlo contigo —propuso Nick

—No quiero morir ahogada —la reacción de Sofia hizo que Terry estallara en carcajadas.

—Nick es un buen nadador Sofía —agregó Terry tras reponerse

—Como desees —dijo Nick encogiéndose de hombros —te quedarás en la orilla del río esperando tu turno —se introdujo al agua y comenzó a nadar como pez.

Candy se mordió el labio inferior al ver como Terry comenzaba a desabrochar su camisa. Abrió ampliamente los ojos al ver la mitad de su cuerpo expuesta a su escrutinio. Se hizo la ciega y apartó su mirada cuando Terry alzó el rostro. Se moriría de vergüenza que él la descubriera observándolo de aquella manera tan descarada

—¿Todo bien? —Le preguntó él acercándose a ella —tu rostro está enrojecido.

—Ah si, si —respondió —debe ser por el efecto de los rayos solares. —se mordió la lengua por su tonta excusa. Estaba debajo de un gran árbol que la cubría del sol. Afortunadamente para ella, unos cuantos rayos se filtraban entre las ramas

—¿Deseas tu sombrilla?

—Si, te lo agradezco —dijo abanicando su rostro para controlar el calor que sentía por tenerlo tan cerca.

Candy lo observó detenidamente. Sus hombros eran anchos y sus brazos... —apartó una vez la mirada —aquello no era correcto y ella se estaba aprovechando de la ventaja que tenía que él la creía ciega, pero en realidad no era así.

—Aquí tiene Milady —Terry le entregó la sombrilla y luego se encaminó junto a Anthony en dirección al río.

Una vez más Candy tuvo la sensación que eran una hermosa familia disfrutando de un paseo juntos. —Suspiró —<<Terry sería un excelente padre>> —se dijo para si misma al ver la manera como le daba indicaciones a Anthony y sonreía cuando el niño le respondía algo.

—Se va ahogar —musitó la pequeña Sofia quien se encontraba sentada en el suelo junto a ella al ver como Anthony zambullía la cabeza en el agua.

—Todo estará bien Sofía —Candy la tranquilizó —Terry está con él.

Minutos mas tarde Terry salió del agua trayendo consigo a Anthony.

—Tu turno Sofia.

—No me lanzarás al agua como lo has hecho con Anthony ¿verdad?

—Es parte de las clases de natación Sofia —le respondió Terry divertido —pero no lo haré si no le deseas.

—Es divertido Sofia —la animó Anthony.

—No se me apetece morir bajo el agua —dijo con exageración.

Mientras aquel trio discutían, Candy luchaba con todas sus fuerzas por no mirar a Terry. De manera muy natural, Terry removía las gotas de agua que bajaban desde su cabello hasta su pecho sin darse cuenta siquiera de los estragos que aquellos normales movimientos estaban perturbando a Candy.

Recuperando El PasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora