5 El cumpleaños de Kaname

547 64 3
                                    

El cumpleaños de Kaname sería dentro de seis días, por lo que Zero terminó de desayunar y fue a comprar el regalo para su amigo. Estaba dudoso en qué regalarle esta vez, pero estaba seguro que se le ocurriría algo. Estacionó su pequeño City-Card, ese sin sello verde, el mismo que no podía usar los días de pre-emergencia ambiental, porque no estaba interesado en cambiarlo, su confiable Suzuki aún andaba. Zero era de gustos sencillos, además lo usaba solo los fines de semana y aveces, porque normalmente usaba el metro.

Recorrió el centro comercial, a esa hora estaba prácticamente vacío, pensó en un reloj de pulsera, pero seguramente pasaria a formar parte de la colección de Kaname y no quería darle algo especial. Pasó por una librería, pero más que un regalo para Kaname parecería un regalo para él, puesto que el castaño no era un ávido lector y normalmente los libros que tenía Kaname terminaban formando parte de su propia biblioteca, después pasó por una tienda de vestuario, vio mucha, pero mucha ropa, pero no sabía que elegir, Kaname tenía buen gusto al vestir no como él que era bastante soso al elegir vestimenta. Finalmente optó por un regalo práctico un fin de semana para dos personas en un conocido y exclusivo hotel, con cena, piscina temperada y spa.

El día del cumpleaños Zero llegó temprano a casa de Yagari y Cross, Si bien no los conocía hace mucho, desde el día de la primera cita con Akatsuki, habían congeniado muy bien con el Omega.

Unas horas después todos los amigos de Zero estaban celebrando el cumpleaños número cuarenta y seis de Kaname Kuran. Ruka obviamente no se separaba del homenajeado, y las cosas ya estaban prendidas. Zero más que nada había ido a saludar y ayudar  con las cosas más bien domésticas, estaba en la cocina lavando vasos cuando Takuma se acercó a él.

- ¿Qué haces aquí? Deberías ir a divertirte como los demás -

- Sí, iré pronto. Solo quería ayudar un poco -

- Si quieres yo también puedo ayudar -

Zero lo miro nuevamente, ese hombre era muy guapo y su ropa se veía muy linda, como para que se manejará con trastes sucios.

- No, está bien yo termino - dice Zero

- Entonces te haré compañía - insiste Takuma

- Ve a divertirte - responde Zero medio ruborizado

- Te aseguro que me estoy divirtiendo ¿Cuál es tu nombre? -

- Kiryu Zero -

- Zero, lindo nombre - sonríe Takuma bebiendo de su vaso de cerveza

- Gracias -

- ¿Y no vas a preguntar por mi nombre? -

- Verdad, lo siento ¿Cuál es tu nombre? -

- Soy Takuma, soy amigo de Kaname -

- Lo sé, su abogado en su segundo divorcio - respondió naturalmente Zero

- Sí, como lo sabes -

- Me citaron a declarar esa vez, de hecho fue usted quién me hizo unas preguntas en el estrado -

Takuma lo miro con más detalle, pero le costó reconocerlo y no era para culparlo, cuando Kaname se divorcio por segunda vez, Zero estaba sumido en una depresión tras la muerte de su madre y no lucía muy bien, llevaba veinte kilos más que ahora y su aspecto no era el mejor.

- Lamento mi mala memoria - sonrió el abogado

- No hay problema - Zero le devolvió la sonrisa

Desde ese instante Takuma no se despegó del lado de Zero, fue tanto que al terminar la fiesta el rubio se ofreció a llevar a Zero hasta su casa.

Desde ese día Takuma comenzó a frecuentar a Zero, lo que tenía más que preocupado a Kaname.

- ¿Qué pasa? Kaname - pregunta el peliplateado en su jueves de amigos

- Takuma está viniendo seguido por aquí -

- Sí, creo que me estoy enamorando de él -

Kaname casi muere atragantado con su cerveza.

- ¿Como que enamorado? -

- Bueno, Takuma es tan lindo conmigo, que es imposible no estar pensando a cada momento en él, además quizás él sea el indicado -

- ¿Indicado? -

- Sí, para padre de mi bebé -

- Para eso no necesitas enamorarte -

- Es verdad, pero sería linda una familia para mi bebé - dice Zero tocando su plano vientre

- ¿Ya estás embarazado? -

- No, cómo crees Takuma es un caballero, ni siquiera nos hemos besado - responde Zero

Kaname soltó un suspiro, no era que no quisiera que su amigo cumpliera su sueño, pero en algún momento la idea de que Zero se acostara con otros hombres para lograr ese tan ansiado embarazo le estaba quitando horas de sueño. Zero notó que algo no estaba bien con su amigo.

- Kaname, que está pasando. Te notó extraño, distante -

- No es eso. Pero siento que ya no soy necesario -

- Para mí siempre lo serás -

- Para qué si tienes a Takuma a tu lado -

- Porque eres mi mejor amigo -

- Zero, no me hagas caso, estoy más viejo y más sentimental - responde Kaname levantándose del sillón para ir por otra cerveza.

Esa noche tanto Zero como Kaname se quedaron dormidos en el sofá, habían abusado de las cervezas y ninguno se dio cuanta que durmieron toda la noche abrazados como dos amantes. A la mañana siguiente Kaname fue el primero en despertar, Zero tenía su cabeza sobre su pecho y se veía tan hermoso que no pudo evitar que su cabeza tuviera la loca idea de besarlo, pero a centímetro de sus labios, se detuvo; uno porque desde esa incómoda posición no alcanzaba a acercarse más y dos, Zero era su mejor amigo y no quería ni pensar que pasaría si cruzaba la línea.

Desayunaron juntos y a las siete en punto salieron cada uno a su trabajo.

Zero siguió su pequeño romance con Takuma, el alfa ya lo había invitado a cinco citas, todas muy románticas e inocentes, habían ido al cine, a comer, al lago, a admirar los plantas al jardín botánico y finalmente al departamento del abogado. Esa tarde Zero esperaba que pasara algo más entre ellos y no se equivocó, en ese lugar Takuma le daría el primer beso. Las cosas iban bien encaminadas.

SEREMOS PADRESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora