El pesar de este sentimiento.

5-La diferencia entre tu y yo.

Disclaimer: Los personajes ni las imágenes me pertenecen, créditos a sus respectivos autores y a Masashi Kishimoto
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Quería esperarme un poco más a publicar este capítulo pero la verdad es que me gustó mucho como quedó (A pesar de que esta corto) así que decidí publicarlo ya, espero les guste tanto como a mi.
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Ella era la única que poseía un Byakugan, pese a que sus compañeros de igual forma tenían habilidades sorprendentes no pudieron detectar que varios papeles bomba habían sido activados aún cuando había varios más que aún no explotarían, pero si lo hacían era el fin para ellos, para el pueblo, sin pensarlo 2 veces sacó a sus compañeros de las cuevas subterráneas que se hallaban bajo el poblado, ¡boooom! Se escuchó la primera bomba y antes de que ellos pudieran hacer algo la entrada había sido bloqueda por el escombro, Hinata comenzó a desactivar todos los pepeles que estaban a su alcance sin poder evitar los impactos de otros, había terminado con la mayoría, solo faltaban 2 que no eran una gran amenza y aun que quisiera su cuerpo no daba para más, las quemaduras eran graves, podía sentir y ver que el daño a sus organos internos así como algunos huesos rotos eran graves, intento caminar, sus piernas fallaron, impacto en el frío suelo resignandose a esperar que los explosivos se activaran "¿Voy a morir? ¿Este es el final?" Su niñez no había sido buena, con el pasar del tiempo pudo hacer amigos, volverse más fuerte, incluso se le había declarado a Naruto a pesar de que este nunca le dijo nada

-Naruto-Kun...- pronunció débilmente para si misma, queriendo que su último recuerdo fuera la deslumbrante sonrisa de aquel rubio que nunca la amó, aquella imagen fija en su mente se vio destruida por un recuerdo donde ella y cierto azabache no habían terminando bien
-Sasuke-Kun...- Con sus últimas fuerzas sonrió a la muerte sabiendo que ella había visto la parte más humana de aquel que todos decían era un monstruo pero con ella era como un niño, un niño caprichoso, arrogante pero también vulnerable y tan roto que hasta a ella le dolía, la sonrisa del hiperactivo rubio fue reemplazada por la de un hombre que Hinata nunca había visto sonreír y cuando lo hizo fue gracias a ella...

(.......)
"No de nuevo" seguía corriendo lo más rápido que podía "¡No de nuevo, maldición!" Aquella repugnante sensación en su pecho era incontrolable, el miedo, la ira e importancia estaban tomando de nuevo el control de Naruto como siempre cada vez que algo le pasaba a Hinata, desde la batalla de Neji, varias misiones como con el hombre que controlaba el metal, los ninjas de las abejas, la batalla con Pain, en la guerra, en todos esos escenarios los sentimientos de ese instante eran los mismos, así se sentía cada que pensaba la perdería, cada vez que se imaginaba como sería su vida sin ella...

Sin querer perder tiempo en la recepción con ayuda de su modo ermitaño la localizó, solo que.... no estaba sola "Es imposible ¿Que hace aquí? ¿Como llegó?" Ignorando aquella presencia corrió a la habitación donde se encontraba Hinata sin poder evitar azotar la puerta

-¡Hinata!- El único hombre en la sala se sorprendió de la reacción de Naruto aún cuándo sabía que el había llegado y estaría pronto ahí, por su parte Naruto le propinó una mirada furtiva que se volvió más amenazante cuando la imagen de lo que vio en la celda surgió
-Teme ¿Que haces aquí?-
-También me da gusto verte- Sasuke volvió su mirada a la mujer que llacía frente a el en una camilla, su piel estaba más blanca de lo normal, su respiración era débil pero su pulso estable, una débil ráfaga de aire entro por la ventana haciendo que un mechón de cabello se posara sobre el bello y fino rostro de la ojiluna, Sasuke movió su único brazo con la intención de quitárselo de encima, sin embargo, se vio detenido al instante por Naruto que tomó con fuerza su muñeca desde el otro borde de la cama.

-¿Que crees que haces?- reclamo Sasuke cuando su mejor amigo dio mas fuerza al agarre
-¿Que relación tienes con ella? Nunca los vi juntos en la academia, ni en los exámenes, mucho menos en la guerra, y de la nada te apareces aquí como si la conocieras de toda la vida- Naruto estaba dejando que su ego hablara, que la parte más posesiva se apoderara de él como si tuviera derecho alguno, Sasuke se safó de su agarre de forma bruzca sin entender el comportamiento de Naruto, tal vez se equivocaba y el sentimiento por Hinata superaba a lo que su amigo sentía por Sakura
-No la conozco de toda la vida como tú, pero te puedo apostar que la conozco mejor y más que tú Naruto-
-Pero como puedes decir eso teme, tu ni...-
-Dime cuantos años tiene- Naruto se sorprendió del repentino cambió de tema y más aún de que no sabía la respuesta, Sasuke dio una sonrisa ladina por el silencio que indicaba no tenía idea