The Legend's Creed

Matando la elegancia.

A la mañana siguiente, la nueva pareja estaba despertando. La primera en levantarse fue Dawn, quien se dirigió a la ventana de la habitación para contemplar el día. Segundos después, Ash abrió los ojos, observando a su nueva novia. Esta notó que se había despertado...

-Buenos días, Ash- Saludó la peliazul- ¿No es un día hermoso?

-Buenos días- Devolvió el saludo Ketchum- Sí que lo...es.

Mientras hablaba, el azabache bajó su mirada hacia el gran y redondo trasero de Dawn; no podía dejar de verlo. Ella, por su parte, notó esto...

-¿Te gusta lo que ves?- Preguntó sensualmente la chica de Sinnoh.

-Oh, lo siento- Se disculpó Ash.

-No te disculpes- Dijo ella- Después de todo, mi cuerpo es todo tuyo y puedes verlo cuando quieras, Ashy.

-Que bueno- Habló el joven de tez morena- Aguarda, ¿Me dijiste Ashy?

-Sí- Respondió Berlitz- ¿No te gusta?

-No, no, me encanta- Contestó.

-De acuerdo. Deberíamos prepararnos para cuando vayamos por Cilan- Mencionó la de ojos azules.

-No, quedémonos recostados un rato más- Habló Ketchum- Tenemos todo el día para ir por Cilan.

-Está bien- Aceptó.

Dawn volvió a acostarse junto con Ash. Ambos se estaban abrazando; ella lo abrazaba por el torso, mientras que él rodeaba su cuello con uno de sus brazos. Permanecieron así unas horas más. Más tarde, se levantaron y vistieron...

-Voy a bañarme- Dijo la peliazul- ¿Me acompañas?

-Dawn, ya hicimos eso anoche- Bromeó el azabache- ¿Tan rápido te dan ganas?

-No para hacer eso- Habló la chica de Hojas Gemelas- Aunque me gustaría. Solo quiero que nos bañemos juntos.

-Bien, ahí voy- Dijo Ash.

-Te espero- Dijo ella mientras entraba a la ducha.

Ash se le unió unos minutos después. Más tarde, salieron del baño para alistarse. Acto seguido, Ketchum se estaba yendo del lugar...

-¿A dónde vas?- Preguntó la peliazul.

-Debo encontrar a Cilan- Respondió el chico de Z en las mejillas.

-Pero ya sabemos en dónde está- Mencionó extrañada.

-Sí, pero no sabemos en dónde exactamente- Habló Ash- Me enteré que hay una cámara de reuniones de los intendentes de cada ciudad aquí, iré allí para saber en dónde estará hoy.

-De acuerdo- Afirmó la de ojos azules- No tardes.

El azabache se acercó a su novia y la besó. Esta correspondió el beso...

-Volveré lo antes posible- Mencionó Ketchum para después salir de la habitación.

Cómo dijo nuestro protagonista, hay una cámara de reuniones de los intendentes de cada ciudad en Ciudad Castelia. El primero caminó hasta un gran edificio en el centro de la ciudad. Cuando llegó, se aproximó a la recepción...