- Una vez que firmes no puedes abandonar estas arenas a menos que sea muerta –Sherap le tendió una hoja de color café claro, se lograba apreciar una marca de agua con la forma del glotón rabioso y un delicado punto rojo en lo que serían los ojos – firmas con tu nombre y el momento en que mueras esto será quemado junto con tu cadáver
- ¿Queman lo cadáveres? –Parpadeó sorprendida, aunque claro su rostro no se veía
- ¡No somos animales noxianos, niña, tenemos decencia! – Le tendió una pluma ya sumergida en tinta negra - aunque que sabes tú de decencia si no muestras ni siquiera tu rostro al hablar con el jefe
- Ustedes creían que perdería el primer encuentro, ahora crees que no aguantaré más peleas ¿por qué habría de mostrarte un rostro fugas? – Tomó la pluma y firmó con su nombre, pero utilizó la antigua caligrafía shurimana – nos vemos en la noche
- ¡Insolente! –Sherap le increpó indignado viéndola retirarse. Dejó la pluma en el tintero y guardó el contrato de la arena en un sobre con el mismo dibujo del glotón, calentó con una vela el lacre bermellón y lo cerró con un sello que marcaba los ojos del mismo animal.
Cuando el cielo comenzó a tornarse anaranjado las antorchas de los fosos se prendieron iluminado tenue el lugar, el vastaya le dio un mordisco a la manzana que sostenía mientras los silbidos y conversaciones del público que comenzaban a llenar las gradas inundaban su salón personal, se asomó entre las cortinas de seda roja sólo para encontrarse con el cuerpo de Maku sentada cómodamente en su podio. Los músculos de su rostro se tensaron de la sorpresa dándole tiempo a la joven para que estirando su brazo le quitara la manzana mordida – ¡gracias, se ve jugosa! – levantó leve la máscara liberando su boca, comparada con la mordida de Sett la manzana quedó casi idéntica después de probarla, se la devolvió
- ¿Cómo lle...? ¡¿Qué haces aquí?! – Sett ignoró por completo la mano que le tendía la fruta, le dio un golpe haciéndola rodar por las losas de piedra
- ¡Eh! Si no querías más me la hubiera terminado – Maku se incorporó levantándose del lugar, caminó al frente deleitándose con la vista que el palco le propinaba – tienes una excelente postal del lugar, debes sentirte orgulloso de que todo esto sea tuyo, aunque admito que debes tener una excelente vista para aprecia cada detalle –se giró hacia él – eres un vastaya, ¿verdad?
- Lárgate –Enojado alcanzó a tomarle de la muñeca antes que la joven reaccionara, se indignó con él mismo al fijarse que pese a que usara los muñones y peleara tenía la piel suave y cálida, recordó el tacto de su madre
- Auch, me pregunto cómo me sujetarías si quisieras –La imaginación de Maku trabajó, con ese toque se ideó una completa fantasía, Sett soltó el agarre al instante
- Ya te dije que no jugaras conmigo –por qué, por qué esa maldita desconocida le enervaba tanto pero no le provocaba darle un puñetazo para callarla
- No estoy jugando, y-... –Los tambores de la arena espantaron a los dos – es hora del espectáculo, procure no perderse nada, 'Jefe' – la sangre de Sett se heló al escuchar su rol de manera completamente diferente a la que estaba acostumbrado. Sus orejas se levantaron en alerta al verla dar un salto hacia abajo del palco
Cuando saltó, Sett luchó consigo mismo para no seguirla con sorpresa, se quedó en la misma posición hasta que su fino oído escuchó cuando Maku llego a la planta principal de la arena. Se echó pesado en su lugar para frotar su rostro con frustración, se sentía en una estúpida novela cliché, desde que era 'el Jefe de los fosos' se le habían acercado varias mujeres, cada una más hermosa que la otra ¿pero una aparecida de la nada que usaba máscara? Trató de auto calmarse culpando que esa reciente atracción sólo fue por haberla visto pelear, que sólo era por su rol de luchadora, el misterio de su rostro o quizá por cómo le había tocado su autoridad de manera tan natural. Los tambores volvieron a retumbar haciéndole levantar la cabeza.
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Dentro de las arenas de Jonia | Sett x OC
FanficLas aclamadas arenas noxianas de pelea se llenan cada noche para saciar la sed de sangre de los diferentes asistentes, Sett, el jefe indiscutido vigila con atención a sus luchadores más implacables y cuenta sus ganancias. ... - No creo tener algo...