Al final Victoria había convencido a su marido para que las acompañe a la cena. Se aburrió soberanamente debido a que el hombre no le hablaba en lo más mínimo y la madre lo miraba como si él fuera a mostrar sus colmillos de vampiro en cualquier momento. Se esforzó lo suficiente para hablar y contestar las preguntas y comentarios que hacía Svetlana. Victoria lo miró con una sonrisa cuando se sentaron uno frente a otro y le habló en lenguaje de señas.
— Haz de cuenta que estamos en casa.
— Probé el dulce de jengibre. — Dijo Svetlana mirando a Alice. — No había probado ese dulce.
— No me gusta ese dulce. — Murmuró él. — Me desagrada la textura en mis manos. Mi favorito es el Ptichie molokó.
— ¡Oh! Me encanta ese postre. ¿Usted lo probó señora Alice?
Mikhail corto toda su carne en pequeños trozos y cambio el plato de su hermana mientras ella se ponía a explicar cómo era el postre.
— La verdad es que no. — Murmuró mirando como él cambiaba los platos.
— El Smokva también me gusta. — Dijo Svetlana dándole toquecitos a su hermano en el brazo. — ¿Tú lo probaste Mikha?
— No. Es una pasta de bayas. — Explicó Mikhail mirando a Alice. — Es un dulce entre la gelatina de fruta y la pasta de fruta. Se elabora con las manzanas, membrillos y ciruelas.
— ¿Tomas Vodka? — Preguntó su suegro.
Él lo miró sorprendido.
— Si. — Dijo dubitativo sin saber si era algo bueno o malo para ellos.
— Un ruso que no tome vodka no es ruso. — Murmuró su hermana como si predicará la palabra de Dios.
— ¿Tú también tomas jovencita? — Preguntó él hombre serio.
— No. — Dijo el.
— Si. — Dijo ella.
Ambos respondieron a la vez y se miraron sorprendidos. Victoria se rió tapándose los labios divertida al ver que ellos se quedaban sin saber qué responder.
— No tomo, claro que no tomo. — Murmuró Svetlana ruborizándose. — Solo quería molestar a mi hermano.
Alice sonrió al verlos.
— ¿Tienes hermanas?
Mikhail se tenso.
— No. — Contestó rápidamente. — No tengo más familia más que Mikhail.
— Mikhail. — Repitió la mujer. — Lo pronuncias diferente que nosotros.
— Es por el acento señora. Ustedes pronuncian la K del medio y es más con jota en realidad para nosotros. — Explicó Svetlana.
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Entre Orquídeas y Secretos ✓
RomanceLa vida para Mikhail Gurevich había perdido el encanto hacía muchos años, cuando había sido desprovisto de alma, familia, tierra y nacionalidad. Pero conocerla a ella le había impactado, con sus suaves ademanes, sus ojos azules y sus flores. El...