Capitulo 21 - El final es solo el comienzo

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Primero que nada quisiera aclarar que esta historia no me pertenece, si no que es una historia que me encanto y he querido compartirla con los demas, esta es:
Una historia de Lilith Rose Malfoy

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"Cada quién es dueño de su propia muerte."

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El despacho del profesor de pociones tenía un aspecto más lúgubre de lo normal... o por lo menos eso le parecía al joven matrimonio Malfoy, al estar rodeados por Albus Dumbledore, Minerva McGonagall y, por supuesto, Severus Snape.

- Y bien?.- preguntó Hermione, sin paciencia suficiente para soportar la incertidumbre.

Y cómo hacerlo! Si ya llevaban más de veinte minutos ahí y los tres adultos continuaban leyendo atentamente los informes de los chicos; quisiera Merlín que la suerte fuera menos trágica con ellos de lo que había sido con los Nott.

- Es que acaso a usted le parece divertido ver pornografía acompañado de sus hijos?.- bramó Snape, restregándo en la enrojecida cara de Theo una borrosa fotografía donde se apreciaba la candente escena de cierta leona con una conocida serpiente de Slytherin.

- Pornografía?.- preguntó el pasmado chico, más para sí mismo que para alguien más.

- Si Nott, pornografía, indudablemente sacada del PlayWizard.- acotó el profesor, observando con atención la foto.- Aunque por el vestuario, parecería un poco como RedMagic...

- Y usted cómo sabe eso?.- preguntó luna inocentemente, con auténtica curiosidad.

Snape carraspeó incómodamente, para después instaurar de nuevo la cara de molestia.

- Eso no importa Lovegood.- dijo el hombre, ignorando la mirada acusatoria de Theo.- El punto aquí es que el señor Nott ha violado toda la moral de este ejercicio.

Theo ya no sabía ni qué decir, por un lado, si dijese la verdad acabaría perjudicando a sus amigos, pero si no los desmentía quedaría como un desviado mental.

- Yo... lo siento.- dijo el castaño, resignándose a ser acreedor a una pésima reputación; por lo menos las caras de ambos chicos estaban tan borrosas que jamás hubieran podido identificarlos.

- Profesor... puedo decir algo?

- Ya lo ha hecho, Lovegood.- respondió Snape cortantemente.

- Pero me refiero a algo más.- dijo la chica, y el profesor asintió con fastidio.- Yo creo que como padre, el mejor ejemplo que se le puede dar a un hijo es actuar siempre de la forma correcta aunque no sea lo más fácil; si Theo se está responsabilizando por sus elecciones, me parece que está dandole un valioso ejemplo a nuestros niños. Por favor, profesor, no sea muy severo con él.

Snape se paseó de un lado a otro pro el despacho, lanzando airadas miradas de hastío hacia su alumno y la chica Lovegood. Finalmente su ceño se suavizó un poco, resignándose a no rebatir los argumentos de la rubia.

- Tres semanas limpiando los retretes de la conserjería.- dijo Snape, dejando de lado el expediente.- Y agradézcale a su novia que no indagaré más sobre sus faltas a la moral.

Casi EmbarazadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora