Avatar: "El Regreso"

Prólogo

- Mi señora.

Al ser nombrada, tan solo movió levemente la cabeza mientras sus ojos se posaban en en las dos figuras masculinas. El que la nombró, llevaba el uniforme militar de la nación del fuego, mientras que el otro llevaba túnicas negras mientras se bajaba la tela de su rostro, revelando.

- Encontramos información valiosa -informó ansioso.

- ¿En serio? ¿Cual? ¿Que zuzu es el señor del fuego? ¿Que el avatar está vivo? -pregunto con ironía. Siempre que decían venir con algo curioso o incluso interesante, era solo chismes. Bueno, los que podía recalcar es la relación del avatar con la campesina del sur. Podría jugar cartas en el asunto.

- N-no, mucho mejor -dijo rápidamente. No querían que ella se enojara.- En realidad son dos -se corrigió. La joven solamente levantó una ceja- Primero, hoy es mi cumpleaños -dijo emocionado. De un momento a otro se empezó a escuchar aplausos y felicitaciones de sus compañeros.

La maestra fuego fruncio el ceño. A veces eran tan estupidos. Tendría que dar rápidos sus movimientos, no sabía cuánto durarían sus hombres. O los atrapaban, o ella los mataba.

Ambas le daría igual.

- Disculpa -tosio acabando el barullo que se armó, llamando la atención de su Jefa.- Como decía, la segunda; es sobre la información de los prisioneros que nos había pedido. Como sabe, luego de que terminó la guerra, el 99,9% de los prisioneros fueron liberados -la otra solo asintio.- Los que quedaron todavía presos son por actos justificados, ya que se evaluó sus delitos. Robo, asesinato, violación contra la gente del reino. Algunos son maestros fuego, no maestros... Excepto uno, que es maestro agua.

- ¿Maestro agua?

- Si, según sus antecedentes era una maestra agua del sur, paso años encarcelada y logró escapar. Estuvo viviendo en nuestras tierras tranquilamente, mientras en las noches de luna llena secuestraba a nuestra gente. Según los dichos, los controlaba con la sangre, algo así.

- Interesante... -fruncio el ceño pensante. Podría usarla, para llamar la atención de cierta campesina.- ¿Algo más? ¿Que más saben? ¿Dice o dijo algo?

- Según averigüé, ella habla con las ratas... -dijo.- Y nombra todo el tiempo a la novia del avatar...

- Katara... -sonrio con malicia. Tal vez se conocían, tal vez sabía que técnica usaba esta mujer.

Se subió arriba de la gran mesa, con una gran sonrisa, haciendo que rápidamente todas las personas la miren.

- ¡A partir de ahora, cambiaremos de rumbo! -grito.- ¡Mostraremos violencia, sangre, muerte, para que nos tengan miedo! Les mostraremos que soy la verdadera señora del fuego, que nuestra sangre es pura, ¡Que el fuego es destrucción!

De los manos salieron fuego azul, iluminando más el lugar. Los demás, motivados levantaron sus armas mientras otros también lanzaron fuego.

"Nos veremos de vuelta....

Mamá".