Porque la mirada azul vibrante de la chica Ravenclaw ilumina los días de Remus Lupin.
Pero, hay alguien que no está dispuesto a compartir las miradas de la Ravenclaw.
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Podría decirse que la relación entre Hailey Ross y Remus Lupin se había fortalecido aún más después de su castigo, ese día Hailey y Remus habían hablado de diferentes temas, si bien no se conocían a la perfección estaban comenzando a hacerlo, y eso aunque Remus no quisiera admitirlo lo hacía sentir feliz.
Remus ya no era un simple chico para Hailey ahora era algo como un amigo cada vez que ella veía a Remus le sonreía y lo saludaba.
Pero todo eso no hacía más que aumentar las inseguridades de Remus. Él ya no podía permitirse acercarse más a Hailey.
—Vamos Remus admite que ella te gusta — Una vez más Sirius insistía a Remus
—No me gusta, es solo una compañera
—No somos idiotas, bueno no tanto, así que podemos darnos cuenta de que ella te gusta, si no es que estás enamorado
—Tal vez sólo me atrae, pero solo eso, no me gusta, solo me atrae.
—Deberías hablarle más, tal vez sólo necesitas conocerla y..
—Y tal vez te deje de gustar — afirmó Sirius —Como me pasó a mi con Amanda, creí que me gustaba hasta que la escuché a hablar y me di cuenta que no era mi tipo
Sirius parecía tener razón.
—Para ustedes es muy fácil decirlo
—Remus tiene razón, para ustedes es fácil hablar con chicas.
—Puff, que dicen, es muy fácil
Remus rodó los ojos y salió se la sala común para ir a la biblioteca.
—Tú, Lupin
Remus giro para encontrarse con el dueño de la voz
—¿Se te ofrece algo Fawley?
Remus intento ser amable, él era un caballero e iba a demostrarlo.