Capítulo 14

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Me sorprendió mucho que quisiera hacerme una pregunta en ese momento, porque ya somos novios, ¿Qué más podría preguntar?

- ¿Qué es?

- ¿Crees que voy muy rápido?

- ¿Tú? ¿Tú vas rápido? ¡Parece que se te olvida que quién te besó primero, fui yo!

- Entonces… ¿Estás de acuerdo con todo esto?

- Deja de pensar tanto. No creo que vayamos rápido, solamente estamos dejando que nuestros sentimientos guíen nuestras acciones.

En ese momento, volví a besarlo, dándole la seguridad de que yo también lo quería, empezamos a movernos de la puerta y las cosas se pusieron tan intensas que no pudimos controlar ninguna parte de nuestro cuerpo, nos quitamos las camisas y él me acostó suavemente en la cama, se vino sobre mí y con esa acción ambos nos pusimos muy duros.

La excitación había invadido nuestros cuerpos, abrí mis piernas para que él tuviera mejor acceso a mi entrepierna, mientras se rozaban entre sí, ya no quería esperar, desde la vez en su auto sé que él me desea y le voy a dar el gusto.

Sus labios empezaron a tocar otras partes de mi cuerpo y eso solo me encendía más.

Su mano comenzó a masajear mi parte sensible y yo hice lo mismo.

Después de la cuarta vez que pasé mi mano suavemente sobre su ropa, abrí sus pantalones y bajé su ropa interior, él hizo lo mismo conmigo, nuestros gemidos solo iban en aumento.

Esta vez fue diferente de su oficina, porque ahora estábamos en un lugar donde nadie nos escucharía, así que pudimos gemir con toda libertad.

Me pasaba su lengua en diferentes partes de mi cuerpo, mientras nos dábamos placer con nuestras manos, y me dijo cosas que al parecer se guardó la primera vez.

- Aahg… Saint… Soy tan… Mmmm… Sensible… Ahh… A tus manos…

- Aahhh… Zee… Y yo a las tuyas… Mmmm…

Después de besar mi cuello y meter su lengua en mi boca una y otra vez me dijo:

- Saint… Te deseo… Ahhg… Quiero hacerte mío…

No le contesté, solo continué tocando y gimiendo como loco. Zee es Mi Hombre, es el único que me hace sentir así y desearlo de esta manera…

Hasta que llegamos a nuestro clímax y ambos respirábamos muy pesado, tratando de recuperar el aire en nuestros pulmones.

Él se recostó en mi hombro y después de unos minutos de estar así, volví a besarlo con pasión, suavidad, lujuria, deseo y toda la intención de que esta vez si lo hiciéramos, pero él interrumpió el beso y me dijo:

- Saint, no podemos hacerlo hoy.

- ¿Por qué?

- Porque esta noche, necesito que puedas caminar…

- ¿Te estás burlando de mí? – Mi pregunta le causó gracia, porque sonrió.

- No. Es cierto, Ann me ayudó con algo.

- Yo sabía que ustedes andaban en algo raro. ¿Qué es?

- Es una sorpresa para ti.

- Por eso gritó el otro día.

- Ya deja de sacar conclusiones. Ve a bañarte y ponte ropa cómoda, pero elegante, nos vemos abajo. – Lo agarré de los hombros para decirle:

- Te dejaré ir hoy. Pero, la próxima vez no permitiré que te vayas… - Me miró atónito, pero se cambió de ropa mientras me bañé y cuando salí ya no estaba.

Me arreglé siguiendo sus instrucciones y cuando ya estaba listo, tocaron la puerta de la habitación.

Rápidamente pregunté quién era y respondió Ann, me hubiese sorprendido mucho, pero Zee dijo que ella le había ayudado a ejecutar su plan malévolo.

- Hola, Saint. Ven conmigo y cuando lleguemos al lugar, te pondré esto.

- ¿Me vendarás los ojos?

- Bueno, así son las sorpresas.

Me parecía tan sospechoso, pero acepté cada cosa que Ann me pidió, una limosina estaba esperándonos en la entrada y eso me pareció exceso de lujo, así que le pregunté:

- ¿Adónde me llevas? - Pero ella no respondió, solo se subió, así que la seguí.

Finalmente la limosina nos llevó a un jardín muy hermoso cerca del hotel, cuando nos bajamos, Ann dijo que era momento de colocar la venda y después me llevó adentro del lugar.

Ella me dejó ahí y se retiró, me sentí un poco asustado hasta que me rodearon sus brazos, sé que es Zee, porque me ha abrazado muchas veces.

- ¡Al fin llegaste!

- ¡Quítame la venda!

- Primero te daré vuelta, porque me verás a mí y después verás tu sorpresa.

Él giró mi cuerpo en su dirección y me quitó la venda, se veía increíblemente sexy con su traje casual, casi me vuelvo loco cuando lo vi vestido de esa manera, pero traté de controlarme, después me dijo:

- Ahora tu sorpresa…

- ¿Qué es?

Entonces me dio vuelta y me mostró una mesa en medio de aquel jardín hermoso.

Eso fue tan increíble, hermoso e impactante, nadie había hecho algo así por mí en toda mi vida. Este hombre es una caja de sorpresas:

- ¡Bienvenido a nuestra primera cita!

- ¿Preparaste esto para mí?

- En realidad fue Ann… Creo que le aumentaré el salario después de esto.

El celular de Zee vibró y aunque pregunté quién era, me dijo que no era importante, que era un asunto que podía esperar, que solo estaba pensando en dedicar esa noche a mí.

Cenamos comida italiana en ese lugar y todo fue asombroso, después de todo eso, puso música romántica y bailamos un poco.

Regresamos a nuestra habitación, y ahí, Ann había dejado otra sorpresa, una nota que decía lo siguiente:

- “Joven Saint Sup, por favor acepte una cordial invitación de su novio Zee Pruk, para visitar su preciosa Villa en el Lago, el próximo fin de semana” …




*Sé que ha Sido difícil para ustedes esperar, como para su servidora actualizar...
Pero aquí les dejo ya el capítulo 14 💖🔥...
Muchas gracias por la espera*

45 Días "SaintZee"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora