ᵉⁿᵗᵉ | ᵏᵒᵒᵏᵛ

↢5↣

La silla giratoria era dominada por el movimiento de mis pies contra el suelo, mi pensar estaba perdido entre el cúmulo de opciones por escoger. En mi vida me había sentido tan agobiado por no saber elegir algo, acostumbraba a ser alguien bastante seguro en cuanto mis decisiones, pero al caer en cuenta, de que tenía una gran decisión sobre mis hombros para futuro, me hizo perder la cabeza en cuestión de segundos.

La puerta de mi oficina volvió a ser abierta. Jimin ingresó con su pequeño gatito entre sus brazos, la sonrisa en su rostro denotaba lo incrédulo que se encontraba.

-Jungkook, han pasado tres horas. ¿Aún no puedes escoger la temática en la que se centrará la boda?, fue la única misión que te dejó Tae.

-Si y la más complicada, no sé en qué estaba pensando al dejarme a cargo. -dije en mortificación.

-Confía en ti, sabe que eres el indicado para elegirla. El prácticamente se está encargando de todo lo demás, tu solo debes pensar y poner a tu equipo a la obra. -dijo sentándose en una de las sillas frente al escritorio.

-Ojala fuera tan fácil como suena.

-Sabes que creo, creo que tienes miedo. ¿De qué?, sea lo que sea que escogas estará bien.

-¿Por qué tienen tanta fe en mí?, en la mañana se me olvidó ponerme los zapatos, me di cuenta hasta que me subí al auto, no pueden confiar en una persona así. He estado muy idiota últimamente.

-Eso es normal, la boda se acerca y tu cerebro es consciente cada vez más de ello.

-Creo que me comí mis neuronas, seguro se me calleron al plato del cereal por la mañana.

-Que dramático, Jeon.

-Claro cómo las tuyas están intactas.

-Jungkook tu mismo te encargaste de la logística de mi boda, ¿eres consciente de la increíble fiesta que fue?. ¡La pista de baile era de cristal y había peces bajo ella!

-Esa fue una buena inversión. -sonreí orgulloso.

-El punto es, que si pudiste hacer de mi fiesta algo increíble, ¿qué te impide hacer de la tuya lo doble de increíble?

-Quiero que sea inolvidable. -suspiré. -Quiero que sea la noche que Taehyung no pueda borrar de su cabeza, nunca. Que todo sea especial para el, que todo valga la pena.

Jimin me miró con ternura, dejó a Atún en el suelo, jugando con la oscura alfombra, y recargó sus codos en el escritorio. Al parecer logró caer en mi punto.

-¿Qué necesitas tu para qué sea una noche inolvidable, Jungkook? -preguntó apacible.

El movimiento en mis pies paró, dejándome inmóvil y analítico ante la fácil pregunta, vaya que la respuesta era certera.

-A Taehyung, el único hecho de saber que será Kim Taehyung el que esté a mi lado, dispuesto a entregarnos en una de las pruebas más puras, con eso me es más que suficiente para que sea una noche inolvidable.

-Así es justo como se siente Tae, Jungkook. Con el simple saber que serás tú, es suficiente. No necesita una fiesta en una mansión gigante, o un laberinto de rosas, mucho menos un camino de piedras y fuego. Solo con que seas tú el que le prometa amor eterno, con eso le basta.

-Pero el también se está esforzando mucho en todo lo demás, le tomó una semana entera decidir los platillos que servirán.

-Pero eso es porque es Taehyung, sabes que le gusta que todo vaya a la perfección, que todo se ajuste a lo que a ambos les gusta. -dijo obvio.

Un pequeño jalón en mi pantalón me hizo mirar hacia abajo del escritorio, encontrándome con el pequeño gatito pidiendo atención. Y en ese momento, su blanco pelaje me pareció tan relajante, que no pude evitar tomarlo entre mis brazos y acariciar constantemente este, calmando mi pensar.