Las ruedas de la moto rodaban a toda velocidad por la carretera. El aire frio chocaba contra nuestros cuerpos. Las calles pasaban a toda velocidad, ni siquiera te daba tiempo a pararse apreciar las calles.Justin tenía mucha prisa por llegar a casa, bueno yo también. En cada semáforo Justin se paraba a acariciar mis piernas, mientras yo metía mis manos dentro de la camiseta de Justin y acariciaba su pecho. Justin aparco la moto frente a nuestro portal, tiro de mí y me apoyo en la puerta. Sus labios estaban sobre los míos, mis manos dentro de su camiseta, una de sus manos estaba en mis piernas mientras la otra intentaba abrir la puerta.
-Vaya Justin, pareces un adolescente borracho que se quiere tirar a su noviecita.
Justin apoyo su frente sobre la mía y dejo de intentar abrir la puerta. Al instante los dos habíamos reconocido esa voz. Mire a los ojos a Justin, estaba hecho una furia. Su mano aun seguía en mi pierna.
-Puedes dejar de meterle mano a tu novia delante de tu hijo – Justin se aparto de mi y miro hacia la magnífica persona (notar la ironía en mi voz) que nos hablaba.
-¡Papa! Te he echado de menos… - El pequeño Jackson se tiro a los brazos de su padre.
-Y yo enano
Me fije en Justin, miraba a Lisa de pies a cabeza, llevaba una falda verde demasiado ajustada. Justin miraba su cuerpo y sus piernas y Lisa sonreía divertida y supongo que orgullosa de que Justin le estuviera clavando la mirada en su cuerpo.
-Hola princesita – el pequeño Jackson se tiro a mis brazos.
-¡Pequeño! – lo abrace bien fuerte
-¿No me lo traías mañana? – pregunto Justin mientras Lisa le pasaba una maleta y ahora Justin le miraba el escote
-Es que el niño tenía ganas de verte, así que te lo he traído y así aprovecho para salir con unas amigas Just – con cada palabra se acercaba mas a Justin****as… – pensé. Sabía que Justin era un enfermo sexual, por llamarlo de alguna manera. ¿Pero como podía mirar a Lisa así después de decirme que me quería enamorar? Le quite las llaves de la mano y subí al departamento.Me encerré en mi habitación, ya sentía las lágrimas en mis mejillas, la escena que acababa de pasar abajo había sido humillante para mí. Me puse frente al espejo. No podía competir contra Lisa, sus pechos eran más grandes, era más delgada, más alta, joder más guapa. Me puse cómoda y me tire a la cama a llorar. Y es que no podía parar de reproducir las imágenes de Justin mirando las piernas y el cuerpo de Lisa, se repetían una y otra vez en mi cabeza, y siendo sincera me estaban torturando. Me gire mirando al techo calmando un poco mi respiración. Mi móvil comenzó a vibrar, dos mensajes nuevos, uno era de Justin, no tenia llaves y quería que le abriera y el otro era de Isa, quería que le llamara. Mientras caminaba hacia la puerta envié un mensaje a Isa “¿Estas despierta? Te necesito amiga”. Abrí la puerta sin mirar a la cara a Justin, seguía mirando mi móvil, escuche como Justin me llamaba, pero lo ignore. Volví a meterme en mi habitación.
-¿Isa?
-¡Por fin se algo de ti! Pensaba que Justin te había secuestrado
-Amiga… - las lágrimas aparecieron en mis ojos. Isa y yo estuvimos horas hablando, de la boda, de Justin, de mis padres, de Bratt su prometido. Desde que estaba prometida con Bratt no le veía mucho el pelo, la echaba tanto de menos…
