Tipos de Novios Beyblade -PAUSADA-

-Kitt Lopez-

Kitt seria el tipo de novio que. . .

Sería muy cariñoso contigo sin importar la circunstancia en la que se encuentre.

Un peli-naranja de apellido López caminaba cabizbajo por las calles de España. ¿Por qué dicha actitud? Bueno, hace poco había tenido una batalla muy importante en el que decidiría si pasaba a las finales del torneo nacional; pero al último segundo, su rival logró sacarle un final explosivo.

Y no solo eso, sino que su Bey estalló en varios pedazos por toda la arena.

Quedó devastado. Arruinado. Triste.

Jamás había sufrido eso.

Claro. Había oído que Free, Shu o Valt habían tenido que pasar por momentos como esos durante sus carreras como bladers profesionales; sin embargo, era su primera vez presenciando eso y era algo doloroso para él.

Y a unas cuadras alejadas de él, se encontraba una chica de hermosos cabellos _______________ y bellos orbes _______________ buscando a su novio, Kitt.

Vio todo lo qué pasó desde las gradas junto con unas lágrimas amenazando con salir de sus ojos. Mantuvo su visita al estadio en secreto, para sorprender a su novio al final de su batalla. Aunque las cosas no fueron como estaban planeadas, y al final terminaron de una manera terrible para el chico español.

—¡Kitt! —lo llamaste en voz alta viendo a tus alrededores, sin respuesta—. ¡Kitt! —intentaste de nuevo recibiendo el mismo resultado.

Tus ojos mostraban el miedo y la preocupación que sentías.

No por la idea de no encontrarlo; sino por el hecho de qué tal vez no pueda salir adelante y liberarse de esta larga derrota...

¡NO!

Claro que lo hará. Lo conoces perfectamente para saber que esto no es nada que él no pudiera manejar. Kitt se recuperaría y volvería mejor que nuevo.

Y como si fuera arte de magia, viste a Kitt sentado en el pasto con vista a el río corriendo frente a él. Sonreíste y procediste a ir y sentarte junto a él, recargando tu cabeza en su hombro.

Kitt, que no había reparado en tu presencia, se mostró sorprendido cuando sintió un peso en su hombro, pero relajó su cuerpo al ver que solo eras tú. Se sentía seguro y feliz contigo. Y tú no podías decir lo contrario.

—¿Cómo te sientes? —preguntaste sin quitar la vista del río ante sus ojos y en la misma posición con tu cabeza.

—Bien solo... algo decaído. No pensé que fuera a perder el duelo... y mucho menos a mi compañero... —dijo con dolor en la voz.

Te partía el alma verlo de esa forma, y no pudiste evitar que unas lágrimas traicioneras escaparan de tus ojos. Sollozaste bajo para no preocuparlo, pero en este caso, la suerte no estaba de tu lado. Kitt se volvió hacia ti y abrió los ojos al verte.

—¡_______________! No llores. Por favor. Sabes que no me gusta ver a mi novia llorar, ¿verdad? —empatizó envolviéndote entre sus brazos cálidos y seguros para ti.

—Lo lamento Kitt —dijiste entre sollozos.

—No te disculpes por nada. No has hecho nada malo —dijo limpiando tus lágrimas con sus pulgares delicadamente.

—No —negaste con la cabeza, y las lágrimas secadas por tu novio hace poco fueron reemplazadas por nuevas—. Lamento no poder ser la novia fuerte para ayudarte a salir adelante. Lamento no poder ser de apoyo. En cambio, estoy aquí llorando —reíste sin gracia—. Lo lamento mucho Kitt —bajaste la mirada.

A Kitt no le agradaba verte de esa manera, y decidió ser fuerte. Por él y por ti. Por ambos. Así que dejo toda su tristeza de lado y sonrió, a lo que lo viste confundida.

—¿Eh?

—_______________-chan, no llores. Te ves más bonita sin tus ojos rojos y con una sonrisa en tus labios —dijo limpiando de nuevo los residuos del agua salada de tus ojos y mejillas y luego tomando los extremos de tus labios para curvar los hacia arriba, en el intento de plasmar una sonrisa, aunque en cambio tuvieras una mueca rara—. ¡¿Ves?! ¡Estás hermosa! —dijo alegre.

Reíste por lo tierno que puede llegar a ser tu pareja.

—Gracias Kitt —dijiste siendo sincera.

—No hay por qué agradecer —dijo poniendo otra sonrisa.

Lo analizaste por unos segundos antes de preguntar— ¡Cómo le haces? —cuestionaste viéndolo.

—¿Eh? ¿Hacer qué? —dijo totalmente confundido.

—Ser fuerte y poner una actitud alegre —le aclaraste interesada en su repuesta.

El vio al río de nuevo y te abrazo por la cintura, atrayéndote más hacia él.

—Supongo que si es para verte feliz, lo haría todas las veces que pueda —sonrió y te besó apasionadamente.

—Te amo Kitt —dijiste sonriendo.

—Te amo _______________ —dijo antes de juntarte en otro beso esta vez tierno y dulce, expresando todo el amor que se sentían el uno hacia el otro y lo que harían con el fin de verse felices.

¡He actualizado! ¡Viva! Hace tiempo que no lo hacía (aunque fue menos de un mes creo, ¿o un mes? ¡Da igual! Me pareció mucho). Sin mas, me voy a dormir que son las 3:50 am, jsjsjs. Nos leemos pronto mis queridos y queridas lectoras.

Sam fuera. ;)