Esos Ojos Preciosos

Capítulo-5

CASIOPEA

Me levanté gracias a mi alarma, la verdad quería seguir durmiendo pero me acorde de la cita con mi psicóloga y me levanté de golpe.

Me bañe y elegí algo sencillo para ponerme, cuando salí note que mi gata no estaba por ningún lado, así que abrí la puerta para ver si se quedo toda la noche fuera, pero para mi suerte no, no había rastros de ella por ningún lado.

-Pelusa, ven gatita gatita-dije con un tono agudo para ver si se aparecía.
-¿Que haces?-dice Daniel entrando al departamento.
-Estoy buscando a mi gata, no aparece y ella siempre duerme aquí-dije preocupada, Daniel se me quedo mirando con los ojos abiertos.
-Emmm, ¿Como es tú gata?- pregunto nervioso.
-Blanca y con ojos azules- le dije.
-Mierda, creo que accidentalmente saque a tú gata del departamento.-dijo.
- No lo puedo creer, ahora te mueves a buscar hasta debajo de las piedras si es necesario a Pelusa o te juro que te mató con mis manos-dije con tono amenazante, el me miró asustado y empezó a buscar.

En el departamento no esta, buscamos por las calles y tampoco aparece.

DANIEL 

Yo no tenía idea de que era su gata, ahora le tengo miedo a Casiopea, se ve muy molesta. Decidimos volver al departamento para ver si la gata ya apareció, y para mi suerte aparecio, sucia pero apareció.

-¡Mi bebé!,¿como esta la gatita más hermosa del mundo?-dijo Casiopea cargandola como a un bebé.
-Será la gata más sucia del mundo- dije en tono de burla pero Casiopea me mira con una mirada asesina.
-Perdón, ¿Dónde esta la gatita MÁS hermosa del mundo?-dije imitando a Casiopea.
-Será mejor que te calles si quieres recibir regalo en el día del padre- dijo Casiopea entrando al departamento.

Después de que Casiopea bañara a el animal ese, decidimos ir a desayunar para luego ir al psicólogo, en el camino le pregunté a Casiopea porqué iba al psicólogo pero ella no me respondió así que no insistí más.