Este amor no pesa

Capítulo 7

-Te dije que no iba a querer wey- camino de lado a lado desesperado por no saber qué hacer- Ahora tengo a mi hermana en mi contra y no dudes que va a advertir a Julieta.

-Tranquilo Santi, ¿tú la amas de verdad, no? – pregunta mi mejor amigo como si no supiera la respuesta.

-Más de lo que me gustaría admitir- le doy una media sonrisa y caigo rendido en el sillón.

-Entonces todo se va a resolver, ¿qué tan difícil puede ser encontrarla?

-Pues hasta ahorita parece que se la tragó la tierra.

-Yo puedo ayudarte a encontrarla con una condición Santiago- Renata se asoma por el pasillo y se sienta enfrente de mí con cara seria.

-Lo que me pidas- de repente tengo esperanza de nuevo.

-Si vuelves a lastimar a mi amiga, olvídate del hecho de que tienes una hermana- hace una pequeña pausa y me mira fijamente a los ojos- Lo digo en serio Santi, quiero lo mejor para mi amiga y se que en el fondo eres una buena persona, más te vale que tengas buenas intensiones y la hagas demasiado feliz.

-Te prometo que la voy a hacer la mujer más feliz del mundo, neta no sabes cuánto tiempo llevo esperando esto – Abrazo a mi hermana y creo que la estoy apretando demasiado porque intenta escapar de mí.

- ¡Abrazo familiar! - grita Mateo y se une a nosotros, los tres soltamos una risa y nos separamos – A ver Renata, suelta la sopa, ¿dónde está Julieta?- de verdad Mateo no tiene sentido de la prudencia.

-De hecho, vamos a estudiar juntas finanzas...- no la dejo terminar la frase.

-Me estas diciendo que Julieta va a estudiar en la misma universidad a la que voy todos los días.

-No, Santi, va a ir a la universidad a la que solo vas los lunes. Neta tu inteligencia no da para más hermanito

-Ja ja ja, qué chistosa Renata- no se cómo explicarles la emoción que siento en estos momentos. Voy a tener la oportunidad de verla todos los días.

- No te enojes conmigo, pero te lo iba a decir aunque no me lo pidieras, solo que en forma de advertencia nivel no te acerques a mi amiga o te corto las bolas.

-Así que solamente hiciste a tu hermano poner cara de pendejo por mera diversión- Mateo se ríe de mí y voltea hacia Renata- Eres mala mujer.

-Y puedo ser peor si me entero que le rompes el corazón a mi amiga, Santiago.

-Te juro que no va a pasar- intento poner mi mejor cara para convencerla, pero creo que no tengo que forzarla mucho, estoy demasiado feliz.

- Vamos haciendo una cosa- dice Renata manteniendo un ambiente serio- Julieta sabe que estás aquí, de hecho, se la pensó mil veces antes de inscribirse a esta universidad porque no quería que un estúpido, palabras de mi amiga, le arruinara la carrera.

- ¿Sabe que estoy aquí? - mi alegría se multiplica de nuevo, no ha dejado de pensar en mí.

-Pero ni te hagas emociones, no creas que te sigue stalkeando como antes, yo lo mencioné sin querer y bueno, ahora viene con la mentalidad de ignorarte por completo y vivir su vida- hace una pequeña pausa- Es una persona completamente diferente, ¿sabes? No queda nada de esa Julieta a la que le rompiste en corazón.

- Uyy, eso suena interesante – Mateo me da una palmada en la espalda y se que nada bueno está pasando por su mente.

-Sigo sin entender por qué eres amigo de mi hermano

-Mejor amigo cariño y yo tampoco entiendo de donde viene el parentesco entre ustedes dos – mi mejor amigo y mi hermana siempre han tenido una pequeña rivalidad sobre a quién quiero más, es divertido.

- Bájenle a su pedo los dos, esta conversación era sobre Julieta y yo

-No te sientas el centro del universo hermanito que toda esta "relación"- hace una seña con las manos- depende mucho de mí.

- Pues como vas Renata, ¿cuál es el plan?...