El Regreso del Alfa

♕ CAPITULO 7 ♕

POV.AKELA

Amón se sentó en el sillón mirando el piso decaído, sus manos tomaron el vaso que había dejado antes sirviendo un poco de tequila en este, tomo aquel contenido como si fuera agua, para luego tomar de la botella igual.


-por favor, Amón te lo imploro vete- mi voz aunque había regresado a su estado normal estaba muerta de miedo en el interior - sabes que ella puede darle una pena de muerte a mi cachorro si así lo quiere- su mirada se dirigió a mí inmediatamente.

-¿Crees que dejaría que matar a mi cachorro, a nuestro pequeño? - sus ojos miraban los míos fijamente -claro que no Akela, jamás permitiría tal cosa -


Amón se levantó caminando hacia mí lentamente, retrocedí involuntariamente hasta sentir la pared en mi espalda, una de sus manos se dirigió a mi cintura mientras la otra se apoyaba cerca de mi cabeza.


-maldición Akela...- su vista cae a mis labios y luego vuelve a mis ojos - no tengo otro hijo, solo nuestro cachorro - mis ojos se abren a toda mi capacidad.


-Que?- pregunto atónita, tratando de asimilar aquellas palabras.


- lo que oíste- siento su respiración en mi cuello - puede que me acostara con ella meses antes de conocerte pero ese niño no es mío - las lágrimas se acumulan en mis ojos.


-¿cómo?- pregunto con voz débil.


-luego de que nació hice unas pruebas de paternidad y los análisis arrojaron negativo al cien por ciento, ese niño y yo no tenemos ningún tipo de laso sanguíneo - las manos de Amón acarician mi mejilla quitando algunas lagrimas que pasaron desapercibidas por mí.


-pero ¿y los besos? ¿y el afecto?- cuestione mientras mi cabeza pasaba todos los momentos en que los vi juntos haciendo una demostración de cariño.


-todo era un teatro - sus labios se dirigieron a mi cuello dando leves besos en este -un teatro para que Casandra no matara a ese pobre bebe, mi supuesto cachorro- moví mi cabeza levemente hacia el lado contrario de donde se distribuían sus besos dejando este a su disposición.


-¿y por qué no me lo dijiste?- interrogo mientas la mano que se encontraba en mi cintura empieza a moverse suavemente.


- porque al más mínimo acercamiento que tuviera contigo ella clavaria una estaca en su abdomen -sus labios pasaron por donde antes se podía ver la marca, paso su lengua esta zona haciéndome soltar un jadeo.


-¿cómo quitaste la marca?- sus ojos conectan con los míos inmediatamente.


-un brujo me ayudo - sus ojos rápidamente cambiaron a rojo, mostrando lo molesto qué sé encuentra.


- Erick- aquello en vez de sonar como una pregunta era una afirmación por su parte.


-no fue él - aseguré yo rápidamente - un brujo me ayudo a crear una ilusión -me mira detenidamente.


- ¿y como se revierte la ilusión? - pregunta mirándome a los ojos esperando por obtener aquella respuesta.


-tienes... - las palabras se quedaron ahogadas en mi garganta al soltar un bajo gemido.


-tengo?- pregunto sonriendo mientras pasaba su lengua en el lugar donde antes se encontraba su marca.


-tienes que... Marcarme de nuevo - terminé de hablar reprimiendo un gemido.


-me aseguraré de ver esa hermosa marca otra ves en tu delicada y hermosa piel - deja algunos besos en mi cuello subiendo poco a poco.


-Amón... Creo que sería mejor que aún no pasará - su boca ataca la mía con total desesperación, su lengua juega con la mía, nuestros labios se mueven a la par.


-yo sé que lo deseas tanto como yo - sus manos están en mi cintura aferrándose como si en cualquier momento saldría corriendo - tu cuerpo me lo dice - susurra en mi oído, estaría loca si no dijera que con solo su voz mi cuerpo lo reclama.


Sus labios reclaman los míos y mi cuerpo pide más, solo con una caricia puedo sentir el cielo, sus manos se mueven por mis curvas, su lengua es toda una experta y mi cuerpo está totalmente entregado a él.


- ¿nos das una oportunidad? -muerdo mi labio, él suspira - quiero ser un padre para nuestro hijo y los que vienen. Y para ti quiero ser un esposo, amante, amigo, consejero, novio, y todo lo que te puedas imaginar -

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¡HOLIS! SOLO VENGO A DECIRLES QUE LOS AMO MUCHO