❁ ⸙͎۪۫ ⁱᵗ'ˢ ⁿᵒᵗ ᵉᵃˢʸ ⸽ ʳᵉⁿᵐⁱⁿ ۰ ʲᵃᵉʲᵘⁿ

Diez | No delante de mi

—¿Amor, quieres que te prepare café?.

Renjun asomó su cabeza por el umbral de la puerta para poner atención a Jaemin, este asintió lanzándole un beso volador.

El chino negó y se encaminó nuevamente a la cafetera para encenderla y preparar el café de su esposo, sonrió un poco y miró la hora del reloj, ese día estaba de buen humor.

Su hijo iba a pasar el rato en casa de Chenle y tendría rato a solas con Jaemin.

Quizás verían una película y ordenarían pizza con nuggets de pollo para comer, los antojos últimamente le traían loco.

Su vientre se notaba más abultado y ya estaba cerca para ir a la consulta con el obstetra, estaba feliz por el bebé en su interior.

Solo tenía que esperar un poco más para que comenzará lo peor del embarazo, los dolores de espalda, las náuseas más concurrentes, los antojos más fuertes y ser un desastre de hormonas. Su ánimo también estaba cambiando con frecuencia.

Y aún recuerda que para su primer embarazo en un ataque de ira, producto de su embarazo con Yangyang, tomó un zapato y comenzó a golpear a Jaemin.

Rió con un poco de arrepentimiento y sirvió el café en la taza de Jaemin, obsequio de Yangyang, el cual claramente Renjun tuvo que pagar.

Tenía grabado una frase en alemán, su pequeño hijo tenía una ligera obsesión con ese idioma y repetidas veces le pidió que lo inscribiese en una academia de idiomas.

—¿Por qué sonríes tanto?— Jaemin se acercó a su esposo, había estado observando al más bajo por unos minutos mientras tenía una sonrisa dibujada en el rostro— ¿En qué piensas?.

—En nuestro bebé, en Yangyang, en nosotros— contestó dejándose rodear por los brazos del más alto.

Mezcló en el café seis cucharadas de azúcar— lo cual era una exageración, pero a Jaemin le gustaba— y dejo la taza de café a un lado para girar sobre sus talones y abrazar a su esposo de la misma manera.

—¿Ya sabes que nombre le podemos poner?— cuestionó con voz suave.

—Todavía no estoy seguro, pero aún quedan varios meses para que podamos elegirlos.

—Ew, dejen de ser románticos delante de mí— una voz hizo que ambos adultos rieran y se abrazaran más fuerte con el fin de molestar a su hijo.

—Amor, ¿me das un beso?— enunció, se acercó a dejarle un pequeño pico al pelirosa cuando resolvió un asentimiento por parte de este.

—Que asco— rechistó Yangyang tapándose los ojos con sus manos y haciendo una mueca con su boca.

—Ya quiero verte a ti diciendo “que asco” cuando el chico o la chica que te guste te bese— objetó Jaemin enfatizando las anteriores palabras dichas por su hijo.

—Yo jamás voy a besar a alguien, es asqueroso— el niño decretó poniendo una mano en su pecho como símbolo de juramento.

Los esposos rieron a carcajadas y separaron sus cuerpos del otro, Jaemin tomó su taza de café y llevó un trago a su boca una vez había controlado su risa.

El Na menor abrió los ojos con frustración y pataleó con una mirada de reproche a sus padres.

—Cariño, ve a alistar tus cosas, te voy a llevar a donde Chenle— anunció Renjun.

—¿Hendery también irá?.

Yangyang jamás iría a casa del tío Lele y pasársela con Dejun, si Kunhang no se encontraba, estaba en su código de mejores amigos.

Si uno de ellos se encontraban en casa de alguno de los tres, los tres tenían que estar allí.

—Claro, él también estará en casa de Lele.

—La casa de Chenle y Jisung es como una guardería, no entiendo porque no quieren pasarla aquí— cuestionó Na tomando su taza de café.

—Por que el tío Lele y el tío Jisung no actúan melosos y parecen más mejores amigos que una pareja de esposos cursis y que perecen que van a dar diabetes.

Bien, buen punto.

Chenle y Jisung no estaban enamorados cuando el mayor quedó embarazado de Dejun, inclusive Lele lo había hecho un año antes que Renjun.

Renjun se había embarazo a los diecinueve años, para ese entonces Lele ya estaba acabando su embarazo.

Zhong apenas tenía diecisiete cuando se dio cuenta que Jisung lo había embarazado, mientras que Park era aún más joven, con la edad de dieciséis años.

Al menos ambos jóvenes terminaron sus estudios, tanto secundarios como universitarios mientras hacían de estudiantes y padres.

Al igual que Jaemin y Renjun, quienes hacían el trabajo de padres y estudiantes universitarios.

Zhong y Park con el tiempo se fueron enamorando pero su espíritu de mejores amigos aún persistía entre ellos.

—¡Bien, entonces puedes ir a vivir con tus tíos!— Exclamó Jaemin haciéndose el ofendido delante de su hijo.

—Créeme que si pudriera lo haría.

—Yang, no retes a tu padre— mientras subían al auto Renjun le hizo un llamado de atención.

Les vengo a informar que acá el Chensung anduvieron de traviesos desde bien chiquitos.

Ayer que escribí el capítulo uno de los gatos se me durmió en las piernas y yo estaba entumida.