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Lucas estaba viendo el paisaje, estaba muy concentrado que se fue a sus propios pensamientos, pensaba en ir a su casa, establecer a su omega con el y presentárselo a su padre y madre.

Un pequeño pero muy hermoso cuerpo le salto encima, lo alcanzó a tomar para que no cayera, sonrió, su omega era un poco infantil, le dio un beso en la frente y el menor beso sus labios al instante, el mayor apretó al omega de los glúteos ligeramente.

—Tenemos que ir a casa —dijo el mayor al separarse, haciendo que Daniel pusiera cara de disgusto.

—No quiero volver ahí, siempre estoy solo —dijo haciendo un lindo puchero que el mayor no dudo en besar.

—Tu vas a  vivir conmigo, no puedo estar un día mas lejos de ti —hablo Lucas bruscamente , el ojiazul sonrió, el alfa estaba siendo posesivo.

—No los quiero dejar solos, ellos viven aquí por que nadie tiene un hogar, esta es casa de Gabriel, pero el se encarga de cuidarlos ya que varios son acosados —dijo el menor triste.

Lucas pensó, sabía que el menor no quería irse ya que estarían desprotegidos, y sabía que sí se lo llevaba a la fuerza, el pequeño lo odiaría, suspiró , sabía que hacer para tenerlo feliz.

Lucas bajó a su omega ya que vio los intentos del menor para zafarse de los braozs del alfa, Daniel sonrió y beso rápidamente al mayor para posteriormente salir corriendo, suspiro y entró a la casa, vio al alfa hablando con su madre, se acercó y suspiró.

—Daniel se tiene que ir conmigo, pero el no quiere dejarlos 6 yo no me puedo quedar aquí ya que tengo empresas que manejar —dijo pensando lo siguiente que diría.

—Estaba pensando, ya que el me contó la situación que tienen, eres solo tu, y dos betas para cuidar a todos, así que pensé en que se vinieran para mi residencia, esta aun costado de mi casa en donde viviría con Daniel, antes de que te niegues piénsalo bien Gabriel, es por el bien de todos, ustedes necesitan protección o al menos los demás, aquí en medio del bosque es peligroso, tienen a una omega embarazada y necesita cuidados, la comida se acabará, necesitan mejor lugares para dormir, yo se los ofrezco —dijo  con esperanza de que el alfa de piel morena aceptará.

—Bueno, pero tenermos que ayudarte con los gastos —dijo el alfa como orden, su tan conocida voz de alfa.

—Me alegra que aceptaras, aunque realmente no lo necesito, si quieres puedes trabajar en mi empresa o si te sientes incómodo conmigo puedo acomodarte en la de un amigo —dijo pensando en su amigo Emilio.

—Esta bien —dijo y se fue a ver los alrededores dejándolo solo con su madre, la beta que ayudó a su omega.

4/5
Especial de Dani y Lucas, les gustó?
Lxs Amo ♥️
May🌈

Marqué | Emiliaco | AdaptaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora