Kim Kyu Jong parte 4

108 22 28
                                    


El tan esperado día llegó, uno a uno fuimos pasando al estrado para recibir de mano del director nuestro anhelado título, todo el cuerpo directivo nos sonreía cuándo hacíamos el recorrido saludando y recibiendo la felicitación de cada uno de ellos.

Tenía en mis manos el papel que me ayudaría a lograr lo que me había propuesto, la emoción me abrazaba y envolvía casi hasta la tortura, estaba cada vez más cerca de poder escupir y tirar a los pies del sr.kim su lastima y opresión.

Mi bello novio lucía espectacular, ese conjunto blanco de satín y encajé se amoldaba perfectamente bien en su hermoso y torneado cuerpo, sus labios carnosos de un rojo natural hacían juego con sus ojos negros y profundos, se le notaba la alegría en cada movimiento, en cada gesto, su risa llenaba el lugar, no podía dejar de mirarlo, me tenía impactado, los recuerdos de cuando lo ví por primera vez llegaron a mi mente, esa indiferencia con la que me trataba, pero ya era tiempo pasado, ya era mi novio, un triunfo más a mi lista, porque eso era yo, un triunfador capaz de lograr obtener todo lo que yo quisiera fuera como fuera yo jamás iba a perder.

Mis pensamientos fueron interrumpidos por los aplausos y gritos emocionados de mis compañeros, quería saber que los había provocado, mi mira se centro en el estrado, ahí de pie con el micrófono en mano Kiki daba el discurso de fin de cierre escolar, mi quijada se cayó hasta el piso, se veía en verdad hermoso, que digo hermoso, su belleza eclipsaba a todos los presentes, su voz como linda sinfonía lleno el lugar convirtiéndolo en un mundo mágico de ensueño, sentí el deseo anhelante de acercarme a él y...

_¿¿¿Que tanto miras???
_¿¿!!!!! Qué!!!!!??

Saeng me miraba fijamente, su cara evidenciaba lo molesto que estaba conmigo.

Cómo pude salí de mi letargo, nervioso me acerque a él y lo besé, a partir de ese momento no se alejo de mi ni un solo momentos, lo que me impidió ir con Kiki y felicitarlo.

Kiki me miraba de lejos y yo solo pude sonreír y mandarle un beso, claro sin que mi novio se diera cuenta, Kiki a su vez también me sonrió y con sus manos rodeó su cuerpo como si se abrazara y me señaló, en seguida supe que me enviaba ese lindo abrazo y mi corazón brinco de emoción.

La fiesta de graduación por fin termino, cada uno de nosotros nos fuimos a casa en compañía de nuestros familiares después de darnos el abrazo correspondiente.

En cuanto llegamos a casa el sr. Kim me dijo que teníamos un asunto urgente que tratar y que fuera a su oficina.

Eso no me tomo de sorpresa para nada, me imaginaba que íbamos a hablar de la empresa y mi próxima presentación ante los socios e inversionistas como sucesor de mi "padre querido". Así que sin ningún ánimo fui a dónde se me había indicado.

_Ya es tiempo que se haga formal tu compromiso con tu futuro esposo. -- él sr. Kim soltó sin más una vez que me senté en una de las sillas frente su escritorio.

_¿De que hablas? ¿Formalizar? ¿Compromiso? ¿Futuro esposo? --la confusión era muy evidente en mi, -- yo ni siquiera he hablado con mi novio al respecto, mucho menos con sus padres, apenas acabo de obtener mi título profesional no es como si ya estuviera pensando en el matrimonio, además mi novio...

_Creo no me has entendido hijo, --el sr. Kim de miraba de una forma muy extraña,-- tu compromiso ya está más que asegurado desde hace años, he dado mi palabra que esa unión se llevará a cabo, ahora solo falta que tú y tu futuro esposo se conozcan y lo hagan oficial ante la sociedad y los medios.  Así que ya puedes ir olvidándote de ese noviecito tuyo.

_¿QUE MIERDA ESTAS HABLANDO?, --mi cuerpo está temblando, pero no era de miedo, era por la adrenalina y la furia que estaba surgiendo en mi.

_Te aconsejo cuides tu vocabulario cuando estés frente a mi, en realidad no veo el porque de tu enojo, has crecido conociéndo todas las tradiciones de la familia, es obvio que tendrías que estar consiente que  nosotros como tus padres ya teníamos dada nuestra palabra de unir a nuestro  único heredero con el hijo de una familia de nuestro nivel. Así que no hagas de esto un drama, el compromiso ya está hecho y no hay vuelta atrás.

Te amó porque te odio, te odio porque te amó.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora