Una antigua profecía Narniana dice que cuando el hijo de Adán y la hija del león y del dragón en carne y hueso en el trono de Cair Paravel este sentado los malos tiempos se habrán ido.
Sabrina Cadogan siempre vivió una vida normal hasta que comenzó...
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Estoy durmiendo y siento que me mueven yo gruño frustrada juro que matare a Susan o la Sra Macready por levantarme, abro los ojos frustrada y veo a Susan poniéndose su bata y me lanza la mía
—levántate hay una situación con Lucy
Yo asiento extrañada para ponerme mi bata de dormir y cubrir el camison de pijama, si Macready se entera que estamos despiertos a estas horas nos matara pero nos matara con mas ganas si despertamos al profesor salgo del cuarto con Susan para caminar a la habitación de los chicos, cuando llegamos al pasillo de su habitación veo a Lucy saltar encima de Peter emocionada
—¿Lucy de que estás hablando?—le pregunta Peter adormilado, se ve tan lindo
—¡Narnia!—dice feliz Lu—¡está en el ropero yo se los dije!—me mira—¡volví a entrar Brina! ¡el Señor Tumnus está bien!
—¿de que estamos hablando?—digo adormilada acostándome a un lado de Peter—a si Narnia
—fue un sueño solamente—dice Susan mientras yo cierro los ojos
—¡pero no lo fue!—dice Lucy subiéndose encima de mí para despertarme—¡vi al señor Tumnus Susan! ¡Y esta vez Edmund entró!
Me siento en la cama para poder ver a Edmund al igual que los demas voy a matar a Edmund si no dice la verdad por que me despertaron en medio de la noche y eso no es my agradable y mucho menos para mi por que odio que me despierten a mitad de la noche, miro al pelinegro que niega nervioso esta ocultando algo estoy segura.
—bueno en realidad no entro conmigo—dice Lu y mira a Edmund—El... ¿Qué hacías ahí Edmund?
—yo... solo fingí contigo—dice Edmund y lo miro molesta—discúlpame Peter sé que no debí alentarla, pero... así son la niñas pequeñas ellas no saben cuándo dejar de fingir
Lucy sale llorando y me paro de la cama para ir detrás de ella, Susan me sigue al igual que Peter, corro y la veo abrazada a un caballero con pelo blanco, lo miro extrañada estoy segura que lo he visto antes.
—¿Cassie?—dice mirándome y yo niego con la cabeza
—soy Sabrina Cadogan profesor
El profesor me mira sin poder creerlo, me mira como si hubiera visto un fantasma pero antes de que me responda se escucha alguien subiendo por las escaleras maldigo por lo bajo al saber que despertamos a Macready
—¡niños traviesos si no se comportan los voy a mandar a dormir al establo!—dice Macready llegando y mira sorprendida al profesor— profesor, lo lamento les dije que no lo molestaran jamás
—descuide Señora Macready habrá alguna explicación—dice el profesor—pero primero, creo que ella necesita una taza de chocolate
