Capítulo 8

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*Soobin's POV*

Siento como mi cabeza da vueltas y vueltas; tengo demasiado dolor. Me siento débil y sin fuerzas para levantarme. No sé cuánto tiempo ha pasado, pero siento que llevo una eternidad inconsciente. Trato de moverme, pero estoy atrapado; tengo el cuerpo restringido, mis manos, mis piernas, mi cabeza y mi boca. Mi ropa se encuentra desgarrada y rota. Estoy cubierto de sangre y apenas recuerdo fragmentos de lo sucedido.

Abro mis ojos con lentitud, parpadeando un par de veces para aclarar mi visión. Hay poca iluminación en la habitación; la única luz es la lámpara que está encendida sobre mi. Estoy amarrado a una especie de camilla de lo que parece ser una sala quirúrgica. No sé qué hago aquí, pero esto no pinta bien.

La puerta se abre y alguien vestido con uniforme médico azul entra. Tiene una mascarilla puesta, guantes y un gorro azul, sin embargo, mechones de color amarillo se dejan ver en los lados. Se acerca a mi y comienza a tocar mi rostro con sus manos.

"Tu piel tiene bastante elasticidad.", con sus dedos abre más mis ojos. "El color de tus ojos es un azul cristalino.", comienza a examinar mi cabello. "Veo que el color de tu cabello no es natural, pero el color morado te luce muy bien.", retira sus manos de mi cabello.

Observa cada centímetro de mi cuerpo con detenimiento. Puedo notar la lujuría en sus ojos, como si estuviese saboreandome con la mirada.

"Tenía un cliente que viajó hasta acá para comprarte.", saca unas tijeras del bolsillo de la bata. "Es una pena que haya tenido que rechazar la oferta por el desastre que causaste en mi laboratorio."

Con las tijeras, corta un mechón de mi cabello y lo guarda en un pequeña bolsa plástica. Mi respiración comienza a agitarse a medida que mi cuerpo se tensa.

"Me gusta siempre cortar un mechón del cabello de los diferentes híbridos que han pasado por mis manos; no eres excepción.", aprieta una de mis mejillas con sus dedos.

Deja de apretar mi mejilla y se acerca a mis piernas. Tengo los pantalones desgarrados, por lo que, parte de mis piernas están al descubierto. El chico retira los zapatos y las medias de mis pies, dejándolos al descubierto. 

Comienza a acariciar cada uno de mis dedos, examinándolos. Luego, suavemente, comienza a examinar cada una de mis piernas. Así estuvo hasta llegar a mi rostro nuevamente.

"No tienes heridas. La sangre que tienes sobre tu pecho es po haber asesinado a varios de mis empleados.", con su mano derecha agarra mi cuello.

Lentamente, comienza a apretar su agarre y esto provoca que me cueste respirar. Mi rostro comienza a sonrojarse por la falta de aire y siento una fuerte presión en mi cuello. Trato de moverme en busca de oxígeno, pero es imposible; los amarres me lo impiden.

"Solo quiero que aprendas la lección y dejes de estar asesinando a mi gente.", nuestras miradas chocan. "Porque, creeme, que ganas de matarte no me faltan.", suelta su agarre, permitiéndome respirar. 

Él retira el cinturón de cuero que tapa mi boca para que pueda recuperar el oxígeno perdido. Comienzo a toser con fuerza mientras trato de respirar profundamente.

"¿Q-quién... eres?", toso varias veces.

"Soy el líder de la mafia Sirok.", se quita los guantes. "Solo los miembros más cercanos a mi conocen mi identidad.", vuelve a colocarme el cinturón sobre mi boca. "Tristemente, no tienes ese privilegio aún.", me lanza una guiñada. "Tampoco puedo dejarte con la boca destapada, podrías hacer de las tuyas."

Acaricia mi cabello una vez más antes de alejarse de mí. Tenía tantas preguntas para él, pero ya veo que no podré hacerlas ahora.

"Tengo un invitado que viene pronto.", voltea a verme. "Era tu antiguo comprador.", aclara su garganta. "Ahora viene a buscar a... ¿Cómo es que se llama? ¿Beomgyu?", suelta una gran carcajada mientras sale del lugar.

No, no se pueden llevar a Beomgyu, ese pensamiento invade mi mente. Siento impotencia dentro de mi corazón al saber que no puedo hacer nada por él; que no puedo evitar que se lo lleven lejos de mí. Intenté salvar a un chico indefenso de estos bastardos y no pude cumplir la meta. No pude salvarlo a él ni mucho menos podré salvar a Beomgyu.

Lágrimas recorren mi rostro de solo pensar en cada uno de ellos. Me siento como un total fracaso.

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*Jungkook's POV*

Estuve toda la noche hablando con Nam sobre lo que haría con ese tal Mark Tuan. Quedamos en un acuerdo que me encargaría de él durante la noche de hoy, ya que tengo que recoger a nuestro cliente en la mañana. Además, que en la noche es el tiempo perfecto para hacerlo discreto.

No sería la primera vez que asesino a una persona y tampoco sería la última. Mi trabajo es bastante arriesgado, y mucho más que los diferentes compradores de la mafia ven mi rostro. Como somos una mafia que vende todo tipo de mercancía alrededor del mundo, el jefe me escogió a mí para trasmitirle confianza a cada uno de los compradores. 

Sinceramente, me importa muy poco que vean mi rostro, porque soy un tipo que no se deja de nadie. Son muy pocas las personas que salen con vida después de amenazarme. Por esta razón, fue que Sirok confió en mí para este trabajo y, hasta ahora, no lo he defraudado.

Llego al lugar acordado con el cliente; el cuál es el puente del río de Nassim. Estaciono el vehículo frente a la acera y me bajo de él a esperar. Agarro de mi bolsillo una cajetilla de cigarrillos y un encendedor. Coloco uno de los cigarrillos en mi boca, guardo la cajetilla y enciendo el cigarrillo con el encendedor.

Inhalo una bocanada de humo y sujeto el cigarrillo con mis dedos. Segundos después, exhalo el humo inhalado. La sensación de nicotina en mi cuerpo me relaja de una manera ancestral; me encanta.

"Fumar es malo para su salud.", una voz poco familiar interrumpe mis pensamientos.

"Nadie le preguntó.", contesto indiferente, sin girar mi vista hacia él.

"¿Usted es quién nos va a llevar hacia la mercancía?", otra voz poco familiar entra por mis oídos.

Coloco mi cigarrillo en mi boca e inhalo, nuevamente, una bocanada de humo. Me giro a verlos y, para mi sorpresa, uno de ellos es quién, se supone, sea mi nueva víctima.

"Señor Wang.", aclaro mi garganta mientras exhalo el humo inhalado. "Usted no nos notificó que tendría a un acompañante.", los observo a ambos con seriedad.

"Fue de último momento.", lame sus labios. "Espero que no haya ningún tipo de problema en que, mi amigo Mark...", lo señala. "...Me acompañe, ya que está interesado en comprar mercancía por igual."

Mierda, es lo único que se me vino a la mente. No esperaba esta situación ni mucho menos de esta magnitud. Lo que me queda es respirar profundo y fingir que nada está pasando. Es lo mejor que puedo hacer en estos momentos.

"Suban al vehículo, le notificaré al jefe que alguien más viene con nosotros.", coloco el cigarrillo en mi boca y me monto en el vehículo

Luego, ambos se sentaron en la parte de atrás del vehículo, esperando a que arrancara. Una vez dentro, enciendo el vehículo y procedo a conducir hacia nuestro destino.

Esto apenas comienza y tengo una mala espina al respecto. Solo espero equivocarme...


Sangre de Felino (Soobin x Beomgyu, TXT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora