*Soobin's POV*
No sé a dónde me llevan, pero me preocupa el bienestar de Beomgyu. Tuve que dejarlo atrás y no me gusta la idea de tener que abandonarlo por obligación. No sé qué harán conmigo, pero presiento que no será algo bueno.
El escenario ha cambiado por completo. De ser una cueva asquerosa y mugrosa, pasa a ser un lugar totalmente limpio y reluciente. Las paredes ya no son rojas, sino blancas. Ya no hay poca iluminación, ahora hay demasiada luz. Este nuevo lugar tiene pintas de ser un laboratorio o algo relacionado a eso.
"¿A dónde me llevan?", observo a mi alrededor.
Él sólo me observa de reojo y no emite ningún tipo de respuesta. Lo único que me queda por hacer es continuar caminando hasta que la respuesta llegue a mi.
A medida que nos acercamos a nuestro destino, pude notar que hay varias personas en el lugar. Varias personas con batas blancas y con máscaras de oxígeno caminan por el lugar; algunas con carritos llenos de medicamentos y otras con expedientes en sus manos. Esas personas entran de puerta en puerta, como si estuvieran inspeccionando todo el lugar. No creo que estas personas sean una simple mafia, creo que esto va más allá.
Giro mi cabeza hacia la derecha y veo una larga vitrina, la cual dejaba al expuesto la labor que están realizando esas personas. Se puede ver a un joven de cabellera castaña, desnudo, pálido y con sus labios de color violeta. Su aspecto se ve fatal, como el de un moribundo. Varias personas con batas blancas están experimentando con el pobre chico. Uno de ellos le inyecta un líquido verdoso a través de su antebrazo izquierdo.
Luego de unos segundos, el chico comienza a convulsionar y ellos se quedan observando lo que sucedía. Mientras convulsiona, espuma comienza a salir de su boca.
"¡Lo están matando!", grito lleno de impotencia.
"No es tu problema.", gruñe.
"¡Todos ustedes son unos monstruos!", me detengo. "¡No tienen corazón con personas como nosotros!", la ira comienza a adueñarse de mi.
"Camina.", el hombre encapuchado hala la soga, pero me resisto.
"Tuve suficiente de ustedes.", dejo que mis garras salgan al descubierto y corto la soga con ellas.
Me deshago de la soga que me mantenía restringido y comienzo a mostrar el puma que llevo dentro. Mis ojos se tornaron más azules, mis colmillos crecieron, pelaje empieza a aparecer y la ropa se rompe debido al crecimiento de mis músculos.
"Voy a asesinarte.", el tono de mi voz se profundiza.
"Calma, solo calmate.", posiciona sus manos frente a él mientras retrocede lentamente.
Sin pensarlo, me avalancho sobre él y comienzo a atacarlo. Con mis garras, despellejo su piel, dejando cortaduras profundas en su cuerpo.
"¡AYUDA!", grita con todas sus fuerzas.
Nadie puede escucharlo. Los que están dentro de la habitación no lo pueden oír, porque las paredes amortiguan el sonido exterior. Así que, solo le resta morir en mis brazos.
"¿Te gusta lo que estoy haciendo?", corto su rostro con mis garras. "¿Te gusta que te esté matando?", comienza a ahogarse con su propia sangre.
Lamo mis labios antes de clavar mis colmillos en su cuello. El delicioso sabor de la sangre humana endulza mi paladar. Deboro cada pedazo de carne proviniente de su cuello hasta su último aliento.
El sonido de una puerta abrirse interrumpe mi devoración. Me giro y mi mirada choca con una persona con bata blanca. Un grito ahogado retumba en mis oídos y una gran sonrisa se forma en mi rostro.
"Eres una de ellos y debes morir.", corro hacia ella y le destrozo el abdomen con mis garras.
Ella coloca sus manos sobre su abdomen y, a pesar de tener una máscara de oxígeno puesta, pude notar el miedo en sus ojos. El mismo temor que he visto, durante toda mi vida, en cada una de las personas que se enteraban de mi genética.
Entierro mi mano derecha dentro de la herida, agarro los intestinos y los halo hacia el exterior. Dirijo parte del intestino a mi boca y le doy una mordida. Observar como esa mujer agoniza con lentitud, provoca dentro de mi una sensación satisfactoria.
El cadáver cae contra el suelo y decido entrar a la habitación. Veo a dos científicos aún experimentando con el chico. A mi lado izquierdo, hay un carrito de medicamentos con varias jeringuillas llenas del líquido verde (el mismo que se le había inyectado al chico). Aprovecho que ellos están de espaldas a mi; agarro dos jeringuillas y las inyecto, al mismo tiempo, en los hombros de los hombres. Ambos comienzan a convulsionar en el suelo, lo que me permite acercarme al chico.
"Te sacaré de aquí.", desconecto los cables que están conectados sobre el chico y lo agarro entre mis brazos.
El chico se encuentra inconsciente, pero tiene pulso. No sé a dónde ir, ya que no conozco el lugar, pero debo encontrar una salida pronto. Es tanta la adrenalina que siento, que ni me he dado cuenta de lo que he hecho ni que estoy empapado en sangre.
Corro por los diferentes pasillos en busca de una salida. Todos los pasillos son iguales, por lo tanto, me siento confundido y con la sensación de que estoy dando vueltas. Al final de uno de los pasillos, veo la palabra "exit" en color verde junto a dos puertas blancas. Con mi espalda, empujo las puertas para abrirlas y continúo corriendo.
Esas puertas me permitieron llegar a las afueras de un inmenso y solitario campo. A parte del edificio del cuál había escapado, no hay nada a su alrededor. Sigo corriendo hacia la dirección del sol, para alejarme lo más que pueda de aquel asqueroso lugar. Sin embargo, una flecha queda clavada en el centro de mi espalda, provocando que me desplome en un instante.
Mi vista comienza a nublarse, mi respiración disminuye. Siento como mi cuerpo vuelve a la normalidad y ya no siento la misma fuerza que sentía hace un minuto atrás.
"Nadie escapa de la mafia Sirok tan fácil.", un par de hombres enmascarados se paran frente a nosotros. "Y mucho menos con vida.", ambos comienzan a reírse a carcajadas.
Luego de eso, cierro mis ojos y todo se convierte en oscuridad. He perdido la consciencia.
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Sangre de Felino (Soobin x Beomgyu, TXT)
Fiksi PenggemarSoobin vivía una vida normal antes de que la mafia de Sirok descubriera su mayor secreto: el de ser un híbrido con descendencia de puma. Su vida da un giro de 360 grados al darse cuenta de que será traficado a otro país como un híbrido exótico. En m...