Manzanas por doquier, algunas
ácidas, tóxicas y repugnantes,
otras tan sólo dulces, también están las que saben a arena, manzanas arenozas,
raspan la lengua de tanto hablar.
Te han declarado enemiga de los humanos, fruta del pecado original, ignorante e incrédulo es pensar aquello de ti,
belleza maligna.
Verde cómo los rubíes,
es el color que identifica
a esa vecina tuya, en cambio tú
eres roja como el alma, llena de pasión y llamas ardientes.
Un mordisco a ese cuerpo perfecto, podría causarme el envenenamiento y tal vez,
la muerte, pero correré el riesgo, necesito del sabor de las manzanas.
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Aires de Primavera (Poemario)
PoesíaEs una obra poética, situada en la estación primaveral. Para alguien, un amor o tal vez para la misma primavera. La estación primaveral nos oculta sus grandes misterios, la prosa y el verso nos revelarán grandes historias de amor y romance en sus di...
