Llegamos a mi casa, Inés se quedó a dormir y los chicos se fueron por ahí.
Cenamos una pizza y mientras decidíamos que peli ver...
-Bueno, y que tal te ha parecido el día de hoy?- le pregunté a Inés.
-Pues muy bien, sin tener en cuenta que Dani se ha puesto muy borde conmigo.- comentó un tanto afectada.
-Es verdad, pero tu también estabas un poco de mal humor, no?
-Si! Pero si él no hubiera empezado, yo hubiera estado más calmada. Ya sabes que si alguien se pone borde conmigo, lo paga caro.- me soltó muy enfadada.
-Si, pero tranquila, te digo yo que le importas...- dije sonriente intentando animarla.
-Y tu que sabes? Desde luego esta tarde, no es que me lo haya demostrado.
-Como que no? Eso es porque no te fijas. ¿No has visto cuando ese chico tan mono te a ayudado a levantar cuando te habías caído? ¿Acaso has visto su cara? ¿Y como te ha interrumpido cuando contabas lo sucedido? Por favor Inés, no me digas que eso no era estar celoso.
-Ahora que lo dices... Un poco si, pero tampoco te pases.- me contestó más clamada.
-Ves? Si es que ese chico es perfecto. Le importas tía, le importas. No muchos chicos a nuestra edad son como él, solo van a lo que les interesa, ya me entiendes.
-Bueno yo sé de uno que también es como Dani... Su nombre empieza por 'Pa' y acaba por 'blo'.- me dijo riéndose de su propia "broma".
-Jajajajja, eres idiota, a ti la pizza te ha afectado y mucho...
-Ya esta!! La tengo!!- gritó Inés de repente.
-Que esta y que tienes?- dije un tanto confundida.
-La peli, inútil!!
-Bueno deja de insultarme y dime cual has escogido.
-El corredor del laberinto.
-Oooh perfecta!- dije súper contenta.
MIENTRAS LOS CHICOS...
-Y ahora que hacemos?- pregunta Pablo.
-Nose tu, pero yo me voy a dormir que estoy agotado.- dijo Dani bostezando.
-Pues buenas noches Danielito que sueñes con los angelitos.- respondió Pablo riéndose.
-Hasta mañana Pablo!
De camino a casa, Dani no paraba de pensar en todo lo que había sucedido aquella tarde.
Él esperaba una tarde magnífica, de esas que uno no olvida fácilmente.
Pero lo único que ha conseguido a sido tener a Inés enfadada.
No podía parar de darle vueltas al tema y sin que se diese cuenta ya había llegado a su casa.
Abrió la puerta, gritó un "Hola ya estoy aquí" y subió directo a su cuarto.
Se tumbó en la cama y decidió llamar a Inés.
Ésta, no cogia. Dani llamó unas siete veces hasta que optó por mandarle un mensaje e irse a dormir.
EN CASA DE MARÍA...
-Inés cógelo ya o apágalo, pero no te quedes mirando la pantalla sin saber que hacer. Nos estamos perdiendo toda la peli por culpa de tu movil.- dije yo mirando a Inés seriamente y poniendo la peli en pausa por quinta vez.
-Pues lo apago, antes que tener que hablar con este...
No pudo acabar la frase cuando el movil volvió a sonar, pero esta vez era debido a un mensaje.
Yo centré mi mirada en la tele y seguí viendo la película, mientras que Inés entraba en whatsapp para ver el mensaje que le acababa de llegar.
*Concersación Whastapp*
Dani: Hola Inés, sé que hoy he estado borde contigo y eso... Como no me cojias las llamadas, he decidido dejarte un mensaje. De veras que lo siento. Mañana en la plaza a las 11:30 y hablamos? Buenas noches chiquilla.
*Fin de la conversación*
-Inés que te pasa?- pregunté interesadamente.
-Emm... No, nada- respondió un poco confusa.
-Nooo que va, estas como siempre, claro que sii. Y voy yo y me lo creo.
Sin decir una palabra me pasó su movil y leí el mensaje que mostraba.
-Tía, porfavor que mono que es!! Ya le puedes responder, eeh
-Esque no se Mer...- dijo mirando al suelo.
-Claro que si! Si quieres lo hago yo por ti...- la miré con cara de pilla.
-No hace falta, ya lo hago yo- dijo cogiéndome su movil.
*Narra Inés*
Y ahora que le respondo? Voy a la plaza o no? Total solo vamos a hablar un rato...
Al final decidí bloquear el mobil y ya más tarde vería que hacer.
Estuvimos viendo la película, hasta la una de la mañana.
Después nos fuimos las dos a la habitación de María a dormir.
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Mi historia de Amor
RomanceSoy María Fernández, una chica de 14 años, morena, ojos verdes, pelo castaño con mechas californianas por la cintura y mido un metro sesenta y siete. Me considero una persona cariñosa, muy abierta, sensible, con sentido del humor y afectiva. Vivo en...