La lluvia del Trueno ⛈

02

Iara

Después de que colgué la bolsa me puse las vendas, mis auriculares y empecé a pegarle, la sonrisa del pibe de ayer seguía en mi cabeza y no entiendo el porqué

-Iara.- escuche a mi viejo cuando me saque los auriculares

-¿qué pasó?

-a la noche vienen a comer los vecinos, no te cuelgues con la bolsa.- asentí

Me acerqué al balcón y vi que el día estaba hermoso para meterse a la piscina así que busque un bikini negro y me lo puse con un short, agarre mi celular con mis auriculares y los guarde en el bolsillo del short

Mientras bajaba mi papá me llamó desde el comedor así que fui a ver que quería

-¿qué onda?

-anda a comprar pan ¿querés?- me pasó la plata

-por más que no quiera ya me diste la plata.

-gracias.- me sonrió y yo negué para salir de casa

Cuando veníamos en el auto vi un veinticuatro cerca así que me puse los auriculares y fui hasta la esquina, donde estaba situado el kiosco y para mi mala suerte también habían unos pibes tomando cerveza

Como no me quedaba de otra más que pasar por al lado de ellos para comprar lo hice

-Hola, ¿me das un kilo de pan?- la señora asintió

-¿sos nueva en el barrio morocha?- no respondí -¿sabes lo que le hacemos a las chetitas como vos acá?- Me corrió el pelo de la cara

-eh Tucu- hablo alguien más -es mi wacha, toca.

-¿qué pasa rayo, ya cambiaste de puta?

-es cosa mía gato, déjala- se puso al lado mío -Hola, Juli.- me saludó

-Hola.- se la seguí, no quería bancar al pelotudo que estaba borracho

Después de que la señora me de el pan y yo haya pagado volví por donde había venido con el morocho atrás mío

-gracias.- dije antes de llegar a mi casa

-no pasa una, -¿cómo te llamas?

-Iara ¿vos?

-Mateo.

-bueno, un gusto Mateo, gracias de nuevo por sacarme al pesado ese de encima.

-nos vemos turra.

Entre a mi casa y dejé el pan arriba de la mesa para ir de una buena vez al patio

Mateo

-eh wacho ¿tenés vecina nueva?- dijo Cami, mi mejor amigo, mirando por la ventana y prendiendo un porro

-fuma afuera gato, después le dejas todo el olor a la ropa limpia - lo rete haciendo que salga al balcón -Iara se llama.

-está re buena.- dijo mirando para la casa de Iara -¿ya le hablaste?- asentí

-el Tucu se le estaba haciendo el gato a la pobre piba.

-esta re atrevido el cheto ese, se cree turro el gil.- negó con la cabeza -alta burra tiene tu vecina wacho.

-deja de mirarla y vení para adentro, quedas re pajero boludo.- entró cerrando la ventana y se tiró en mi cama

-¿qué 'tas haciendo?

-escribiendo una canción.- levante los hombros

-vamos a boludear, estoy aburrido.

-dale, vamos gede -me aleje del escritorio

Bajamos y mi papá me dijo que vuelva temprano, ya que íbamos a ir a la casa de Iara a no se que

Nos dimos un par de vueltas por el barrio hasta que se nos ocurrió ir a la plaza y una hora después ya estaba volviendo a mi casa

-Hola, Héctor- saludó mi viejo al vecino

-Hola, pasen- entramos y nos sentamos con él, en la sala -voy a ver que está haciendo Iara que todavía no bajo.- asentimos

-¿a qué vinimos?

-a conocerlos, no es cosa de todos los días ver a alguien nuevo en el barrio.- en eso tenía razón, es raro que alguien venga a vivir acá por lo peligroso que es

-se colgó entrenando, ahora se baña y baja -deje de prestar atención cuando mi celular vibró, conteste los mensajes de mis amigos y me puse a ver Instagram

-Mateo también ¿no Mateo?

-¿el qué?- Pregunte sacando la vista de mi celular

-que vos haces boxeo.

-ah si, pero lo hago por hobby.

-ya estoy.

-él es Pedro y su hijo Mateo.- nos presentó su papá

-un gusto señor- saludó a mi papá -Hola- me saludó a mí totalmente sería

-Hola Iara- sonreí

-¿se conocen?

-lo vi hoy cuando fui a comprar pan.- respondió ella

Estuvimos un rato ahí, yo con mi celular, a veces mirando a la morocha que tenía en frente, mientras ellos hablaban de cosas a las que no les prestaba atención

-Mateo te puede hacer el favor ¿o no?

-¿el que de qué?- pregunte re distraído

-¿qué te pasa hoy boludo?

-estoy en otra viejo ¿qué decías?

-que vos le podés hacerle el favor a Héctor de ir a buscar a Iara al colegio.

-no hace falta, igual, gracias por la opción señor Pedro, pero lo que menos quiero es molestar a su hijo.

-decime Pedro y no pasa nada ¿o no Mateo?

-yo no tengo problema, no tengo nada para hacer

-entonces gracias.- vi como Iara rodaba los ojos

Después de comer volvimos a mi casa, yo me encerré en mi cuarto y salí a fumar al balcón, mire al balcón de Iara y ella estaba ahí sentada con los auriculares puestos mirando al frente re perdida en su mundo

¿Vas a ser la piba que haga que deje de sentirme tan sólo o vas a ser pasajera?