Habían pasado algunos días, afortunadamente nadie se había enterado lo que Mack le había hecho a Rachel, pero supo de otras mujeres que desafortunadamente habían caído en las garras de él, ahora tenía una sentencia sin libertad.
Rachel se sintió más tranquila, pero a la vez notaba bastante nervioso a su jefe, cada vez que entraba lo notaba desconcentrado, la miraba extraño, quiso preguntarle en esas ocasiones pero simplemente no podía hacerlo para no incomodarlo aparte de que su relación empleada-jefe había estado normal, pero había algo raro que la dejaba pensando.
Después de terminar una llamada con un amigo que la había invitado a una fiesta y que con dificultad había aceptado después de lo que había pasado, fue hacia la oficina de Damian para entregarle unos documentos.—Rachel....- casi en susurro escucho decir a su jefe, algo inusual en el.
—¿Si señor Wayne?
—¿Tienes planes en estos días?- preguntó.
—¿Sucede algo?
—Necesito que me respondas primero.
—Ah, bueno está semana no, pero el fin si, me invitaron a una reunión- dijo confundida.
—Se puede retirar Rachel, gracias.
—¿Qué?, disculpe, pero no me ha contestado mí pregunta- mencionó confundida.
—Solo era por algunas cosas que teníamos que hacer, vendrá más trabajo, sólo no falte en la semana,- miro su computadora para seguir trabajando dejando más extrañada a Raven.
"Que raro" pensó Rachel mientras salía."Que te pasa por la maldita cabeza Damian, si le hubieras dicho, hubieras quedado como idiota, creo tendré que ir sólo aunque me gane las burlas de Kent, aún no puedo creer que me haya decidido a decirle, sobre todo que me haya tomado tanto tiempo hacerlo, ¿Porqué? ¿Y quién la invitó?"
•
Los días pasaron hasta que llegó fin de semana, Rachel aún seguía pensativa desde aquel día, parecía que Damian la estaba evitando, pero pensó que tal vez solo era su imaginación, no quería admitirlo pero le causaba molestia darle tanta importancia a que el no le hablará.
Se arregló como cualquier día para ir con su amigo Dick quien lo había invitado a un cumpleaños de una amigo. Bajo de su apartamento para ir hacia la dirección. En 30 minutos ya se encontraba en la puerta de aquel lugar donde por dentro se oía bastante ruido.
Tuvo que tocar la puerta varias veces para que por fin una chica rubia le abriera, busco a Dick con la mirada se encontraba sentado con Star, parecían que ya se habían pasado de copas.
—Hola- se acercó a ellos.
—Oh Rachel, pensé que no vendrías, me alegra de verte aquí- escuchó decir a su antiguo líder después fue abrazada por Star.
—¿Y quién se supone que cumple años?
—Ahi viene- contesto Kori.
Fue cuando Rachel volteó la mirada llevándose una sorpresa.
—¿Jon?
—Ay no puedo creerlo, en serio viniste- dijo emocionado.
—¿Ah?- dijo sin entender.
—¿Dónde está él?
—¿Quién?- mencionó, no sabía que pasaba. Vio que Kent miraba a sus lados.
—¿Cómo llegaste aquí?
—Dick me invitó- dijo sin seguir entender.
—Oh.... Entiendo, olvida todo lo que dije, estoy algo borracho- dijo riendo.
¿Quieres un trago?
—No gracias- contesto Rachel.
—Bien, pues siéntete como en tu casa.
—Te lo agradezco.
•
Rachel fue hacia la zona donde se encontraban las bebidas y algunas botanas, esta vez no dejaría que nadie le ofreciera una bebida.
—No puedo creerlo Rachel, tanto tiempo- escucho decir de lejos.
—¡¿Cassie!?- se levantó para abrazarla, hace mucho tiempo ella se había ido con Wonder woman por lo que se emociono al verla.
—Me da gusto verte, pensé que no vendrías.
—Si, todos pensaron eso, pero estoy aquí, me hace muy feliz verte.
—Lo sé- la abrazo de nuevo.
—¿Hace cuanto llegaste?
—Hace unas semanas, me quedaré a vivir un tiempo por aquí y podamos compartir tiempo juntas.
—Si me encantaría- dijo emocionada, pues conocía a Cassie bastante bien, una amiga algo alocada pero que lograba entenderla y la que la obligó en muchas ocasiones a salir.
—Pero cuéntame, ¿Que has hecho?, Dick me dijo que a habido un cambio drástico en tu vida.
—Si demasiado, pues llegué hace unos meses aquí, Dick me consiguió trabajo en empresas Wayne, y pues....ah, ¿Cassie?- dijo al ver cómo cambiaba drásticamente su mirada y volteaba hacia otra dirección embobada, ella volteó para saber que fue lo que había puesto de esa manera a su amiga. Y no fue para menos pues también el rostro de ella había cambiado, sobre todo cuando sus miradas se encontraron sorprendidos.
—Esta guapísimo, ¿Sabes quién es?
—....Ah...pues ni tanto, el es .... Damian Wayne- dijo sin darle mucha importancia, cuando era lo contrario, podía sentir algo de enojo al ver cómo Cassie lo miraba sonriente.
—Saco la belleza de su padre, pero el es mucho más guapo.
Rachel se limito a hablar y vio como todas se acercaban a saludarlo. Por un momento lo había desconocido por su forma de vestir, tan casual y para desgracia de ella también admitía que se veía bastante bien.
Damian fue hacia Kent ignorando a todos a excepción de una persona que se limito a mirarlo desde entonces.
—¡oh amigo me da gusto verte!...¿Y el regalo?- Damian saco un sobre de su chaqueta.
—Genial, espero que sea lo que pienso- dijo emocionado. Lo abrazo.
—No la invitaste, pero está allí- susurro sin que nadie más escuchará.
Antes que pudiera decir algo, lo jalo a dónde se encontraba Rachel y Cassie quien se pasó un mano en su cabello, la demonesa rió ante su acción.
—Hola chicas, Damian te presento a Cassie.
—Mucho gusto Damian- se levantó para darle la mano y darle un beso en la mejilla.
—Oh esa canción me encanta, ¿Te gustaría bailar Damian?- mencionó tomándolo de la mano pero el la quitó al contacto disimuladamente.
—No sé bailar señorita, pero mi amigo Kent le gusta mucho bailar- dijo volteandolo a ver.
—Oh, sí, sí, ven Cassie, déjalo, tiene dos pies izquierdos- dijo riendo tomando a Cassie de la mano quien no se negó y fueron a la pista.
—¿Así que esta era su convivio Rachel?- pregunto sirviéndose un copa de vino.
—No le tengo porque dar explicaciones- contesto secamente sin voltearlo a ver. El lo notó.
—¿Está molesta Rachel? ¿Su amigo la abandono?
—Pues no me esperaba mucho de él, sabiendo que es su hermano.
—Grayson. Por supuesto en nada nos parecemos- dijo volteandolo a ver cómo besaba a Star.
—S...
—¡Raven!- a su lado sintió como unos brazos la rodeaban.
—Gar...- se sorprendió.
—Estas preciosa, Cassie me dijo que habías venido, no sabes el gusto que me da verte- dijo emocionado.
—Gracias, igualmente.
—¿Y tú eres Damian cierto?- dijo chico bestia volteando a ver a Damian
—Aja- dijo tomando su bebida, el chico ignoró su reacción.
—Me encantaría hablar contigo Rachel, ¿Podemos ir a otro lugar?, ¿O acaso estás con él platicando?
—Ah...
—Si lo estaba, hasta que llegaste tú- contestó Damian ganándose una mirada fulminante por parte de Raven.
—Oh, lo siento, yo no quería...
—No te preocupes, están bien, ya casi terminábamos, luego iré contigo- le dijo, el chico sonrió y se alejó para saludar a los demás.
—¿Se puede saber porqué le dijiste eso?
—Porque realmente nos interrumpió.
—No, no lo hizo, así que no vuelva a contestar por mi, que no se supone es el educado Damian Wayne.
—Aqui no tengo porque serlo- dijo alejándose de ella para irse hacia la cocina, pero la demonesa fue tras él, por dejarla con la palabra en la boca.
—Ya me di cuenta que dentro de ese traje, solo hay un patán.
—Rachel recuerde a quien se está dirigiendo.
—¿A quién?, Oh entiendo ,mi jefe.... pues no me importa, aquí no tengo porque serlo- gritó.
—Tal vez su carta de despida si le importe- dijo alzando la voz.
—¡Pues hágalo!, ya me estaba artando de usted- dijo contestando casi con el mismo tono que si no fuera por la música se hubiera escuchado hasta donde estaban todos.
Ambos estaban cegados por el enojo, que habían contenido por los celos que lograron controlar en su momento, pues eso había sido.
Celos que ambos habían sentido y quemó querían admitir.
—La única razón por la que te acepte fue por el idiota Dick y has sido la peor asistente que he tenido- le dijo. Rachel no aguanto el coraje y agarró un vaso de vino que estaba en la mesa y le lanzó el contenido en su camisa y chaqueta. Sonrió y se dispuso a salir. Pero Damian la agarró con fuerza para voltearla quedando frente a el, la mirada de él era bastante aterradora, que por fin en su vida Rachel llegó a sentir miedo por lo que haría, dejándola inmovilizada por su mirada tan penetrante,y era de esperarse quien seriá capaz de lanzarle algo a Damian Wayne.
Nadie.Sus labios apenas se abrieron,por primera vez sentía su cuerpo tenso, vulnerable ante el, pensó que el le gritaría, que la aventaría, pero para sorpresa de ella, el se había acercado tanto que había estrellado sus labios en ella con fuerza, aprisionandola en la pared más cercana
Y esa acción desvaneció su miedo para dejarse llevar por el interior de sus deseos...
Él.
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Mi pequeña demonio. (Damirae)
FanfictionEl todo un experto, ella toda curiosa, sera la unión más intensa de sus vidas, sin esperarse lo que todo generaría.