Siete: ¿Segunda Huida?

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Capítulo dedicado a:
VICKY160706

Si quieres ser mencionado, comenta lo que crees que pase en el siguiente episodio.

¡Recuerden que más de uno pueden intentarlo!
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Tres semanas habían pasado desde que había dejado de trabajar. Ya estaba algo acostumbrado a tener su brazo envuelto y a la sensación de asear con una sola mano, era algo incómodo, pero al menos agradecía que su padre se haya "preocupado" por él y no le permitiera trabajar hasta que pudiera quitarse la faja, es decir que en una semana más, aunque para que sanase por completo... 3 meses a lo mucho ¡Qué coraje!

Despertaba adormecido y cansado. La noche pasada había un mosquito que no le dejaba dormir y seguramente ya tenía una que otra picadura. Eran las 7:08am y notó que su padre ya estaba levantado, (extraño) pero aún así, él debía ocuparse de la comida, pues aunque el mayor se parace temprano, nunca aprovecharía el tiempo para hacer de desayunar; los primeros días que estuvo con su "malestar" no le había estado haciendo de comer, todo era comida preparada que aún estaba en su paquete, pero valla sorpresa se encontró cuando al llegar a la cocina/comedor, efectivamente el desayuno estaba listo.

- Buenos días- Saludó al hombre sentado viendo una revista vieja y no muy educativa. Recibió un 'Hm' como respuesta y se sentó un poquito alejado del mayor (lo máximo que la mesita redonda le permitiera).

Agarrar el cubierto con la mano izquierda y saber manejarlo fue práctica de sólo un día gracias a que era un guitarrista profesional de 16 años, prácticamente tenía dominio sobre sus dos extremidades, hasta podría decirse que con la izquierda tenía incluso más agilidad que con la rutinaria.

Comió con mucho silencio aquel huevo con arroz, y cuando acabó fue a una pequeña alacena, de ahí sacó dos frascos, medicamentos que le recetaron para el dolor y quien sabe qué otra cosa. No se dio cuenta cuando su padre se levantó, por lo que estaba de regreso a la mesa con sólo dos pastillas cuando éste le extendió un vaso con agua; lo miró extrañó, ¿Qué rayos le pasaba a su viejo esa mañana?

- Gracias- No fue descortés y se metió las pastillas a la boca para luego tomar el vaso y seguido beber el contenido. Tal vez el mayor sólo no estaba de mal humor ese día, no debía sospechar... ¿O sí?

Estaba por preguntarle si tenía algo que decirle, pero mientras éste iba a su dormitorio y se ponía un suéter oscuro, le interrumpió.

- Saldré, y si tocan la puerta no abras, manten las luces apagadas- Se guardó sus llaves y un teléfono que el menor no conocía- Yo vuelvo... Tarde- Se acercó a la puerta- Mejor no me esperes.

- Papá...- Salió y cerró sin dirigirle alguna otra palabra; eso... No fue extraño, pero ahora estaba preocupado.

[...]

Las 11pm ¿Por qué tardaba tanto?

Justo había hecho lo que su padre le indicó. No encendió las luces en todo el día y ni siquiera le abrió al tipo que pedía amablemente firmas para evitar la penalización del aborto.

Ahora estaba sentado en su cama, que por suerte, era la que estaba a un lado de la ventana, así que no estaba muy a oscuras gracias a los faroles del exterior y la luna casi llena que se mantenía en el cielo... Suspiró y apoyó su cabeza en la única mano sana que tenía.

¿Qué estará haciendo Bonnie? ¿Lo extrañará? La verdad es que Bon esas últimas semanas había estado pensado en él mucho... Demaciado... ¡Todos los santos días! Como cuando llegaron a la residencia y estuvo encerrado por 14 días, teniendo una constante preocupación y averguenza por la situación en la que recién estaba metido, sobre todo por haber sido televisado. Se imaginaba lo peor, pero eso ya lo había dejado en segundo plano cuando empezó a trabajar, pues estaba tan ocupado que ya no pensaba mucho en el pasado.

Te Perdí... [Bon×Bonnie] [COMPLETADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora