You're NOT sorry

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Alli

Anne quería llevarme de compras hoy, ya que Ashton y yo todavía no hemos comprado una cuna para Maddiline. Así que, ahora estábamos en la tienda de bebés.

— puedes elegir la que quieras, Ashton la pagará.— ella se rió y levantó la tarjeta de crédito de Ashton.
— nos matará si gastamos demasiado dinero. — ella se encogió de hombros.
— bueno, pasará gastando mucho dinero durante los próximos 18 años. — me reí y caminé por la tienda mirando todas las cunas.
— todas son tan grandes, — suspire.
— es una ventaja, puedes usarla hasta que sea una niñita, después le conseguiremos una cama de niña grande. — Anne-Marie dice.

Estaba muy feliz de tener a Lauren y Anne para pasar el tiempo, Ashton estaba ocupado buscando otro trabajo, por lo que no estuvo muy presente en las últimas semanas. Penny estaba con sus abuelos así que estuve bastante sola.

— oh, esta es linda. — señalé una cuna blanca decorada con pequeños patitos y flores.
— es hermosa, ¿esa es la que comprarás? — Anne preguntó y me encogí de hombros.
— es bastante cara..— mordí mi labio inferior y suspiré antes de darme cuenta de que Anne estaba haciendo que el trabajador la llevara para empacarla y montarla a la camioneta, mientras que ella deslizaba su propia tarjeta.
— Anne, no puedes, te devolveré el dinero. — ella sonrió y sacudió su cabeza.
— claro que no, es un regalo, solo cuida bien a mis nietas y ese será el mejor pago. — sonreí y salimos de la tienda.

+

Decidimos ir al centro comercial para comprar algunas cosas personalizadas para Maddeiline, luego fuimos al patio de comidas para comer pizza. Obtuve algunas miradas extrañas de algunos adolescentes pero me dio igual, pedimos la pizza de carnes y deje escapar un pequeño grito ahogado.
— creo que deberíamos volver a casa. — dijo nerviosa mirando detrás de mí. la miré confundida, pero justo entonces me volteé y vi lo que ella estaba viendo.

Oh.

Es Ashton.

Y esta con otra chica.

Tomados de la mano.

Ella también estaba embarazada.

Caminé hacia ellos con el ceño fruncido, estaba tan enojada.
— ¿qué demonios? — dije y sus ojos se abrieron de par en par cuando me vio, saltó a decir, — Alli Dios mío, qué haces aquí, ¿por qué estás aquí? — el no soltó su mano.
— ¿por qué tú estás aquí de la mano con ella? — mi voz se quebró.
— lo siento bebé. — dijo y yo sacudí la cabeza.
— no, Ashton, no lo sientes.

Professor Irwin  ➳ [español]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora