rompiendo el escudo (todobaku)

pensamientos

Era la tercera ves en la semana que bakugou se levantaba alterado por un sueño, y por ende el también se despertaba, todavía no comprendía los sueños de bakugou, parecian recuerdos, siempre parecía afligido en su mente, había veces que se preguntaba cómo bakugou podía gritarles a todos teniendo un remolino en la cabeza, cada ves que intentaba hablarlo bakugou lo ignoraba.

Ese día no era distinto a los otros, estaban en el baño lavandose la cara, sus ojos estaban hinchados, mejillas rojas, sudor frío y lágrimas traicioneras.

Cuando regresaron a la cama, bakugou se quedó dormido y aprovecho para meterse en sus recuerdos, tenía miedo de lo que podía encontrar en ese lugar.

Lo primero que vio fueron los recuerdos de la infancia de bakugou, como antes de tener un quirk jugaba con midoriya y se llevaban bien, veía como era el mejor en todo a tan corta edad, pero luego vinieron los recuerdos de cuando estaba en casa, la madre de bakugou diciendo palabras ofencibas a los cuatro vientos, el padre tranquilo que no decía nada, parecían una familia feliz, hasta que vio como le exigían día con día ser el mejor, como lo obligaban a estudiar arduamente hasta que no pudiera más, con tal de ser el menor, a su corta edad ya era sometido a pruebas de intelecto muy desarrolladas. Luego vinieron recuerdos de cuando obtuvo su quirk y como su madre lo entrenaba para ser el número uno, como le gritaba que era débil y que no servía, a sus 4 años de edad, tenía entrenamientos y estudios muy avanzados, vio como se alejo de midoriya, porque su madre a pesar de que quería a midoriya, consideraba que era un estorbo para que llegara a la sima, vio como se maldecia a si mismo a tan temprana edad por dañar a su mejor amigo.

Luego vinieron los años de adolescencia como finjio tener un ego desbordante solo con tal de que nadie se metiera con el, tenía el carácter que su madre quería que tuviera, vio como se reprendía a si mismo por la forma en que trataba a los demás, vio todo lo que le hizo a midoriya, y vio como bakugou lloraba en las noches recordando lo que le hacía a su mejor amigo.

Vio como en su adolescencia defendió desde las sombras a midoriya, como lo defendió de un hombre mayor que quería secuestrarlo y termino llevándose a bakugou, sin que midoriya supiera nada, vio como ese hombre había dañado a bakugou, vio como el hombre lo tomo, como fue golpeado por ese hombre y como apenas bakugou pudo escapar. Al terminar ese recuerdo penso que todo estaría bien, pero se dió cuenta de muchas más cosas.

La mamá de bakugou lo reprendió por no ser fuerte y defenderse de ese hombre, no lo ayudo en ningún momento, y le dijo que era débil, bakugou se puso a entrenar más desde ese día.
Un recuerdo lo sorprendió más que los otros, y era bakugou en una clínica, su madre estaba al lado de bakugou y este no paraba de llorar, escucho lo que dijo el doctor, y lo poco que quedaba de razonamiento se le fue de las manos.

"Bakugou no puedo hacer nada, perdiste a tu hijo"

Se sorprendió demaciado al escuchar eso, acaso bakugou tuvo novia o el estaba embarazado. No esa última idea no podía ser cierta. Verdad?!

Segundos después de ver ese recuerdo se despertó, o bueno bakugou se despertó, estaba más agitado de lo normal, y podía sentirlo molesto, de un momento a otro, todo estaba en blanco, y bakugou, el bakugou antes de la transformación estaba delante de él.

Baku- Bastardo mitad-mitad, que crees que haces

Todo- N-nada bakugou- estaba nervioso, muy nervioso

Baku- no mientas maldito bastardo, se que estuviste en mi mente, que carajos veías

Todo- no ví nada.

Baku- ya deja de mentir maldito imbécil, si llegas a contar algo de lo que viste te mato.

Sabía a lo que se refería, bakugou no era idiota, sabía que vio sus recuerdos, al fin de cuantas compartían mentes, que más podía hacer.

Todo- está bien, no diré nada

Con eso pareció que bakugou se relajaba, al igual que el cuerpo que compartían, sus mentes se volvieron negras y solo pudo recordar hasta hay.

A la mañana siguiente, no sabía que hacer, quería respuestas, pero considerando que bakugou sabía lo que pensaba, no le daria respuestas tan fácil mente, al fin de cuentas no eran tan cercanos.

El día transcurrió normal, solo noto algo inquieta la mente de bakugou.

Ya en los dormitorios bakugou tomo el control del cuerpo en su totalidad, y se dirijio a su antes cuarto, hay estaba el celular del rubio, ¿Como era que no lo había ido a buscar antes?, Dejo de pensar en eso cuando el rubio abrió el chat de su madre, lleno de preguntas por parte de la mayor, noto la aflicción en la mente de bakugou, aunque su cuerpo no lo demostraba, vio que tenía varios contactos registrados, hubo uno que llamo su atención en sobre manera.

Contacto:   *****

Lo tenía registrado con asteriscos, ¿porque? Vio que tenía un mensaje pendiente de ese contacto, bakugou no abrió el chat, sabía que el lo vería, o eso estaba pensando en ese momento el rubio cenizo.

Quería buscar en la mente de bakugou a quien le pertencia ese contacto, parecía importante, después de un rato el rubio le escribió a su madre, le contó la historia de los ir había pasado, no fue sorpresa para el ni para bakugou que su madre empezará a regañarlo por ser débil, por no haberce defendido como se debía, y por meter al bicolor en todo este asunto, por fin después de mucho rato tomo el control de su cuerpo y casi por inercia respondío a los mensajes de la mamá de bakugou, diciéndole una que otra verdad, bakugou intento con uñas y garras recuperar el control pero no podía.

Vio el mensaje que envió su madre y se asusto, eso no era bueno.

*Ya vamos a ver si decís lo mismo cuando sepas todo lo que a hecho mi hijo*

Mitsuki dejo de estar en línea...

Hasta aquí por hoy, bye.