Capítulo 4

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C e n a   I n d i s c r e t a.

El día esperado, sus padres, ellas, un día, una cena, Michiru se había levantado mas temprano de lo usual y decidió darse una ducha para estar lista. Salió para ver como Shirou se levantaba apenas.

—¡Hola! -saludo Michiru- ¿como amaneciste?

—Bien. ¿Por qué estas levantada tan temprano? Se supone que nos iríamos a las once.

—L-Lo sé, solo que estoy muy emocionada. Fue casi un año que me fui de casa...

Subió de brinco a la cama hacia Shirou, dándole un beso, y se sentó sonriente. Shirou noto que usaba el collar que les regalo Nazuna sobre la camisa y su chaqueta negra que le había regalado en su cumpleaños.

—¡Estoy muy feliz!

—Se nota demasiado -dijo Shirou mirando como en la cola de ella se agitaba de un lado a otro.

—Ah vaya -sujeto su cola- debería calmarme un poco.

—Puedes ir con tu amiga, y venir cuando...

—¡Mi-Chi-Ru! -grito Nazuna entrando a la habitación- ay que bien que no esten ocupados.

—¡Nazuna!

—Lo siento, lo siento, estoy muy emocionada. ¿Y tu?

—¡Tambien yo!

—Yo me voy.

Dijo Shirou quitándose las sábanas saliendo de la habitación.

—¿Qué le pasa? -preguntó Nazuna.

—Creo que esta cansado, no le deje dormir mucho -dijo apenada- ¡oh mira, llevare el álbum de fotos!.

—¿Eh? ¡Yo no llevo nada!

—Llevas tu precencia -Michiru río al decir eso.

—Incluso llevas novio -inflo las mejillas- yo no llevo a nadie. ¿Debería decirle a Alan?

Preguntó emocionada, pero Michiru cambió su rostro, aun no le había dicho nada, quería decirle, sabía que le rompería el corazón, asi que le tomo de la mano, Nazuna le miró raramente.

—¿Michiru? ¿Qué pasa?

—Nazuna, tengo que decirte algo...

—Ey niñas -Pingua toco la puerta- ¿tienen hambre? Hice panes rellenos.

—¿Panes rellenos? -preguntó Nazuna y miro a Michiru- vamos Michiru, tengo hambre.

—Ah...bien..

Michiru decidió contarle cuando tuviera tiempo, asi que mientras desayunaban ella y Nazuna, Shirou empezaría a alistarse, Michiru no dijo nada de Alan, pues quería decírselo a solas y tratar de tranquilizarla si le afectara la noticia.

Un buen desayuno de su amigo beastman volador, cuando estaba recojiendo sus platos decidió preguntar un poco.

—¿Irán a ver a sus padres entonces?

—Si -respondió Nazuna- estamos muy emocionadas.

—Si, llevare mi álbum y a Shirou -dijo Michiru orgullosa.

—¿Ya soy un premio? -menciono Shirou arreglado, tenía su chaqueta negra.

—Eres mi tesoro -dijo sin pensar- d-digo novio, bueno...ah.

Nazuna se río con una sonrisa de Pingua a su lado, Shirou solo se ruborizo un poco y se acomodo su cabello.

—Deberíamos irnos, ya le avise a la alcaldesa  que no estaríamos hoy.

T U  A R O M A   2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora