Después de mi muerte

Recuerdo de Cole.

-iScar! En qué estabas pensando?

-Osh- me dice tocándome la boca y
dándome un beso

-Qué es lo que pretendes?

-Nada.. por que lo preguntas?- poseé
una sonrisa burlona que retaba todo de mi.

-¿Acaso quieres destruirte? Mírate, estás ebria, tomaste todo esto y ni siquiera tomas regularmente. - Se tambaleaba un poco evitando hacerlo porque notaba mi molestia.

-Destruirme?- arquea las cejas y se rie
de manera maniática- no es bastante
obvio que ya lo hice, lo que ves son
residuos que la culpa, que el dolor y el
rechazo dejaron, Brian y Roy se han ido, pronto lo harás tú, asi que no me salgas con tu posición de novio preocupado, apenas y puedes verme. Ni siquiera podemos no pelear, no entiendo que haces aquí.

-¡Rayos, Scarlet!- grito y sacó la botella
de mi mochila, le doy tragos grandes
tan rápido como puedo- antes de
acabarmela me detengo- crees que
eres la única que se siente mal? yo estoy muriendo

-Cuando mueras, yo seré la única
que quedará. Tú no sabrás nada de
dolor, podría hasta ser mejor.- quiere
comenzar a llorar, la ultima vez tardó
mucho tiempo calmarla, tomo el último sorbo de la botella y la beso.

En aquel beso decía todo lo que callaba, la levante y senté en la barra de su cocina, la amaba más que esta vida y la siguiente, la amaba tanto que
la abrazaba con firmeza intentando que no se fuera para atrás, yo estaba
menos ebrio que ella; me besaba como si no nos hubiéramos visto en años, sentí como tomaba mi nuca corn su mano derecha y mi espalda con la mano izquierda intentando aferrarse a mi como quien se aferra a la vida.
Abrazaba su cuerpo contra el mio y en
cada beso le intentaba decir cuanto la
amaba, cuan necesaria era y cuanta
felicidad me puede dar.

De vez en cuando dejábamos de
besarnos y nos mirábamos, parecía
que le costaba verme, mencionó varias
veces que le costaba "enfocar" su vista, la miraba con tanto amor y su
miraba mostraba la pasión que vive
encerrada en ella, en sus ojos se veía
aquel corazón destrozado, aquella
alma moribunda y parecía que yo era
lo único que la mantenía aquí, algo
cuerda.

La cargué entre mis brazos y la puse
en su cama, me recosté junto a ella y vi como poco a poco se quedaba dormida, era el ser más hermoso que existía, la miré tanto, se movia de manera lenta y constante, parecía no resistir su propio peso. Intentó levantarse pero no pudo.
Llegó el momento en el que me abrazó
y
comencé a quedarme dormido.
Recuerdo perfectamente ese sueño
aun cuando estaba un poco tomado.
Estábamos ambos en la misma posición, solo que se sentía diferente, había paz y felicidad lo podía sentir tan fuerte como el dolor que teníamos, pero ese dolor no estaba ya. Intentaba digerir la sensación cuando escuché unas vocecitas, era una niña y un niño, la primera mayor que el segundo, saltando hacia nuestra cama y diciéndonos "mamá, papá, despierten" el sonido de sus voces y su rostro plácido despertando eran lo mejor que me había pasado. Cuando lo estaba soñando me sentía completamente feliz, alegre, me sentía como si estuviera en mi hogar con mi familia y sin dolor, fue como si por un momento tuviera el único miedo de perder eso, hasta que desperté.

Ella se encontraba completamente
envuelta en sudor, su rostro de terror.
-Scarlett!-le digo con dureza para que
despierte.
Su expresión de terror guardado se
muestra en sus grandes ojos cafés, me
ve y comienza a llorar. Me acerco para intentar abrazarlay se aleja como una flor experimentando una nastia.
-Scar, relájate Qué sucede? Qué
Soñaste?
-No, no quiero pensarlo- decía en
susurros cubriéndose el rostro.
-Tranquila, ya pasó.
-No, no ha pasado, va a pasar.
-Solo es un sueño, no te preocupes.
-Soñé que te perdía y no por la
enfermedad, sino que te sacrificabas
por mí- decía con la garganta casi
cerrada.
-Tranquila, fue solo un sueño.
iEs que no entiendes! įEstoy harta de
muertes y abandonos!;Estoy harta de
juegos y decepciones! Qué sucederá
conmigo cuando te vayas? Me quedaré en este mundo, sola, sin un propósito, a la mercer de personas como Alfred o Abraham- habla de sus ex - personas que no les interesa nadie más que si mismos, que pueden decirte lo que sea y esperar lo que sea para conseguir lo que quieren, personas que lastiman y usan a los demás sin consideración, a propósito o no lo hacen y duele, duele confiar en alguien y que solo haya sido una obra de teatro, no saber que fue real en ellos, porque real es el dolor que te dejan, la decepción. Sofié que después de morir quedaba a mercer de personas como ellos y sufria porque
pasaba cada momento tras momento,
recuerdo y sueño, cada vez más
horrible y desesperante. Estoy cansada, desearía poder morir antes de que tú lo hagas.

La abrazo con fuerza y le acarició el
cabello mientras tanto que ella llora.

-No quieres eso, solo estás abrumada,
aquí estoy y eso es lo importante. Aquí
estaré para ti siempre porque te amo.

Ahora siento que mis palabras fueron
palabras vacías porque le fallé, la
ignoré y la perdí. No vengo a ser tan
diferente a Alfred y Abraham.