Capítulo 8: ¿Puedo besar, aquí también?

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Al día siguiente, desperté llenó de calidez y con mis brazos alrededor de alguien, mi corazón pálpito muy extasiado al tenerla entre mis brazos refugiándose. Mi nariz viajo a su cabello y un suave aroma a dulce llegó a mí, definitivamente moría de amor por ella, mi celular sonó y observe que era Tae; lo apagué desinteresado, sabía que, debíamos haber ido a la universidad, pero estar con ella era mil veces mejor que todo eso.

Se removió en mis brazos y abrió sus pequeños ojos acaramelados, sonrió despacio y dijo.- Buenos... Días.- Su rostro de ruborizó, pasé mi mano en su piel y mientras repartía besos en ella, se movió riéndose. Yo me uní a ella.

-. Buenos días.- Detuve mis besos y a la abracé mientras su rostro topaba en mi pecho.

-. Deberíamos ir a la universidad...- Susurro.

-. Deberíamos.- Le respondí sonríendole.- Pero es mejor estar aquí, junto a ti, princesa.- Se sonrojo a mas no poder y escondió su rostro en mi pecho.

-. Hija, ¿Ya despertaste? ¿Iras a la universidad?- Lisa se sentó rápidamente observando hacia algún lado. Me dio demasiado miedo, sabía que su padre, yo no le caía muy bien que digamos.

-. ¿Eh? Este, no papá, me quedaré hoy...¿Puedo?- Le respondió demasiado calmada, a mi, de seguro me sacaban a puros escobazos. Recordé entonces un pequeño detalle, pero ya no diría nada mas. Si su madre es mi madrastra, y ella creé que esta muerta, por su bien; no debe saber que esta viva.

-. Claro hija, iré al trabajo. Tu desayuno esta donde siempre.- Ella respondió con un: okey. Y se quedó callada. La observe interesado, parecía muy concentrada en algo.

Entonces habló.

-. ¡Listo! Ya se fue, estaba esperando a que cerrara la puerta.- Me asombre nuevamente. Definitivamente mi mujer era tan inteligente, Dios de verdad que no podía con su hermosura y dulzura.

La tire hacia atrás y repartí besos en todo su rostro.- ¿Puedo darte un beso aquí? Oh, y aquí también, y en este lado... ¡También en esta mejilla tan bella!- Entonces sus labios aparecieron a mi vista.- Y...- Trague duro, ella respiraba tranquilamente y sonreía con felicidad.- Y puedo, ¿Aquí también?- Señale sus labios, tocando con mi dedo índice ellos.

Dejo su sonrisa y veía hacia la ventana, puesto que yo estaba encima de ella.

-. Puedes...- Habló, con su voz tan angelical.

Y yo me perdí, en esos labios que ahora eran míos.

La noche de ayer no pude besarla como debía, pero ahora le demostraría todos mis sentimientos en él. Moviendo con tranquilidad sus labios, mordiendo su labio una que otra vez y sintiendo su reacción. Entregando mis emociones en cada movimiento que hacíamos; sus labios tan adictos. Si, era totalmente loco como ya me había enamorado de ella, no conté el tiempo y solo la bese hasta que mi vida pudiera rendirsela a ella; sentía como con nerviosismos intentaba seguirme y como mantenía sus ojos cerrados fuertemente y sus mejillas eran muestra de su fragilidad. Entonces colocó su mano en mi cuello, y me perdí. La bese con más intensidad y mi mente se nublo en su tacto. Mi corazón estaba tan rápido que sentía que se unía al de ella. Entonces hizo un pequeño sonido que me dejo quieto y me aleje; bajándome de la cama y chocando con su mesita.

Estaba muy acelerado, la observe y me derretí, estaba con su mirada muy brillosa y su cabello alborotado por mi. Tenia sus mejillas carmesí y sus labios tan hinchados que, quería besarlos nuevamente; pero me recompuse.

-. Yo... Iré a mi casa a bañarme y regreso, te parece?- Mire hacia otro lado, y escuché como bajo de la cama y se acerco a mi. Sin saber que, claramente estaba muy afectado.

❄DESDE MI VENTANA❄(LISKOOK)L.K PAUSADA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora