Luz y oscuridad

Capitulo 10

Me desperté. Según yo dormí bien, pero me sentía cansada y muy agotada.

Me levanté para hacer el desayuno, de alguna manera, me sentía liberada.

Hice huevos con tocino, unas tostadas y un café. Le hablé a Sofía, pero ella no respondía, así que tuve que subir, y la vi sentada en la cama

-¿Que tienes?- Pregunte

-Quiero regresar contigo- Creo que ya es mucho lo que la había hecho "sufrir".

-Esta bien- se levanto feliz y me abrazo.

Bajamos y nos dispusimos a desayunar. Nos vestimos, salimos de la casa y nos fuimos a la escuela.

Al llegar a esta, todo estaba muy raro, en el aire se sentía un aire de tristeza e incógnita.

Todos estaban en el patio.

- ¿ Que está pasando?- Le pregunto Sofía al profesor de educación física 

-Solo tomen su lugar- 

Nos fuimos a acomodar cada quien a su grupo.

-Buenos días jovenes - Dijo el Director- El día de hoy, los reunimos aquí para darles una terrible noticia. El día de ayer, aproximadamente a las 3:00 a.m., la señorita Camila fue asesinada- 

¿¡QUEE?!

Todos empezaron a murmurar. 

-Silencio por favor- Dijo el Director -Los oficiales a cargo del caso les harán algunas preguntas. Vuelvan a sus clases. Buen día-

Me percaté que una secretaria y el Director estaban mirándome. Sofía me abrazo, me agarro de la mano y caminamos hacia su salón.

-¿Señorita Nia?- Voltee y era uno de los agentes. 

-Si soy yo. Dígame-

-Nos acompañara a la dirección. Tenemos varias preguntas-

-Si claro- Mire a Sofía. Le di un beso -Te veo al rato-

Llegamos y me sentaron frente a un escritorio.

-Sabemos que la señorita Camila y usted no llevaban buena relación.¿Es verdad?-

-No es su totalidad- Respondí 

-¿Porque?- Eran agentes, yo debía responder todo lo que sabía.

-Bueno, verán. Hace unos días, en su oficina, ella trato de besarme y como no accedí, ella invento y divulgó información falsa, que como claro, ustedes ya sabrán a que información me refiero-

-Si claro- Hizo una pausa- Pero, ¿acaso eso no es motivo de asesinato?-Trato de verse muy profesional, como esos agentes de los programas de televisión. Pero por favor,  esto es México, acá nada es profesional.

-No. Al menos yo no la asesinaría. Debe ser alguien con instintos primitivos- Dije, y después me arrepentí de decirlo.

-¿Donde estaba usted el día de ayer al rededor de las 2 y 3:30 a.m.?- 

-Con mi novia, en su casa- Pude ver un poco de asombro en sus expresión.  

-Bien. Lo confirmaremos con ella. Puede retirarse- Afuera, estaba Sofía, angustiada.

-¿Que paso?¿Todo bien amor?-

-Si-

-¿ Que te preguntaron?-

-Que si la había matado- Se detuvo en seco y me miró

- Pero obviamente no la mataste, ¿verdad?-

-Estaba en tu casa. ¿Cómo voy a matarla ? ¿Con un doble acaso?- Le respondí con ironía. Nos fuimos a su salón y yo me fui al mío.