Algo para hablar

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—"Maldita sea, no pude con Aoi y los chicos al cine ni a la feria" —se maldecía por haber provocado una pelea entre él y sus hermanos, aunque no se iba a disculpar con ellos por eso. Ahora se encontraba limpiando la habitación de los hermanos más pequeños, con la ayuda de Nezuko, quien no le dirigía la mirada o una palabra.

La verdad ya faltaba poco para volver a las clases, aunque le daba cierta curiosidad volver, su razón era...bueno, era algo no nunca lo diría directamente, sobre todo a sus hermanos, quienes algunos ya tenía la misma opinión que él, sobre todo Hanako, quien ya sabía de por sí cuál era su razón de volver a la escuela. Solo esperaba a que el director haya siendo inteligente a la hora de tomar esa decisión.

—Oye, Tanji —Nezuko finalmente abrió la boca para hablar con él— ¿quien crees que sea...su remplazo? —al parecer ella sabía muy bien que pasaba por su cabeza.

—No tengo ni idea, y honestamente no tengo ganas de saberlo —sin vacilación, hablo con calma ante su pregunta. Ya tenía mucho con limpiar la habitación de los pequeños, y no quería distraerse para poder limpiar.

—"¿En serio? Vaya que no sabes mentir" —Nezuko solo seguía barriendo el suelo con simpleza, no quería hacerlo brusco para no causar otra pelea innecesaria para empeorar el castigo que ya tenía.

—"Solo espero que honor su trabajo" —Tanjirō seguía pensando en eso. Pero eso ya con estar trabajando se iba olvidando, algo que necesitaba para concentrarse.

[...]

Hanako se encontraban preocupada, sus hermanos ya no estaría con ella en la escuela, cosa que la ponía algo nerviosa. Pero tampoco podía hacer mucho, ahora estaría con los mayores, algo que no le gustaba en lo mas mínimo, pero era mejor que nada.

—"Shige, Roku, ¿ustedes estarán bien? —estaba hundida en sus pensamientos. Estaba limpiando los utensilios de la cocina al lado de Takeo, quien mantenía su mirada en los platos que limpiaba. Ella ignroba su presencia por completo, sencillamente no le dio importancia.

—Hana, tus manos estan temblando —Takeo sin siquiera verla, le informo a la menor, quien miro sus manos, y vio que lo dicho era verdad. Estaba templando demasiado, seguro era por lo nerviosa que estaba en ese momento.—...ellos dos estarán bien, ya sabes que Roku sabe cómo dar una muy buena impresión —Hanako lo miro con sopresa, no se esperaba que le dijera eso.

—Supongo que tienes razón —Hanako dejo caer un suspiro pesado por calmarse, no debía preocuparse, sabía bien que esos dos estarían muy bien. Ya no tenía nueve años, así que espero que no se llevará mal con alguien.

[...]

—¡Pelea pelea! —un grupo de niños estaban rodeando en círculos a otros dos niños, pero un era un chico y la otra era una chica. Todos estaban en el parque cerca de la escuela para ver una lucha que se desarrollo en la institución.

—Así que...¿cómo empezó esto? —entre todos los chicos, había uno que miraba a otro, ambos tenían cierto parecido a los luchadores que estaban en el centro del circulo. Uno era Rokuta, quien venía a su hermano lucha contra la chica que conoció ese día, Teruko. Cosa que el no sabía el porqué de eso. A su lado, estaba otro chico que tenía al menos un año mayor que él— ¿Cuál es tu nombre? Ya se que eres Taiko, Teruko me lo dijo. —Rokuta lo miro con curiosidad.

—Soy Shoichi —se presento, el tenía el pelo negro con algunas partes verdes, era puntiagudo como Takeo, pero era para arriba. Tenía los ojos ámbar como su hermana— y como empezó, pues, resumiendo, es porque cuando íbamos por aquí a camino, yo tropecé con tu hermano, el me empezó a gritar por hacerlo caer, escucho que ambos dijeron que nos llevaríamos bien, cosa que él dijo que no pasaría. Luego Teruko empezó a discutir con él, para luego ella decir que le iba a patear el trasero enfrente de todos los alumnos. Tu hermano acepto, y ahora estamos aquí, viendo la pelea —Shoichi explico de manera resumida todo lo que pasó hasta ese momento. Rokuta entendió todo, dándole una mirada de desaprobación a su hermano. Aunque no le diría nada, luego su hermana lo haría, además de ser su culpa pelear el primer día de clases.

—¿No deberíamos detenerlos? —Rokuta fijo su mirada en la lucha que su hermano mantenía con su...bueno, compañera, ya que no podía llamarla amiga después de todo.

—Dejalos, además Teruko aunque no lo parezca es bastante fuerte —sonrió con confianza, ya estaba seguro de que ella ganaría la pelea con algunos cuantos golpes.

Los luchadores comenzaron a pelear de una vez por todas, quien aserto el primer golpe fue Teruko, quien se lo dio en la mejilla derecha, para no perder una oportunidad, lanzó otro golpe hacia mandíbula, haciendo que Shigeru pierda un de equilibrio, pero ambos sintieron algo raro cuando Teruko lo golpeó.

Por alguna razón, Teruko sentía que sus golpes no hacia tanto impacto en ellos, pero sus nudillos se encontraba un poco lastimados, Shigeru por su parte, no sintió mucho dolor, tenía la sensación de que algo la estaba protegido de los golpes, pero no sabía que era. Pero tuvo que reaccionar rápido, ya que Teruko siguió lanzando golpes de manera rápida y sucesiva, movió su cabeza para que aquellos ataques no lo alcanzarán. Cosa que se le dificultaba bastante, ya que los golpes no solo eran fuertes, también era veloces, por lo que tenía que ser rápido.

Al rato, pudo encontrar una abertura en la defensa de la niña, estaba justo en su costilla derecho, así que le dio una patada, cosa que hizo que esta fuera hacia atrás por el dolor. Shigeru por venganza, tomo Teruko de su ropa para darle un fuerte cabezazo.

—"¡Uso la cabeza de acero! Eso esta prohibido por nuestra familia" —Rokuta tembló por completo, todos los hijos varones heredaron la cabeza dura de su madre, mientras las chicas tenían heredaron de su padre unas piernas muy duras, cosa que sabía por Hanako, de una manera muy fea.

Todos los niños que estaban ahí vieron asombrados como Teruko fue cayendo al suelo aturdida por el dolor, Shigeru sonrío triunfante, para después caer al suelo al igual que ella.

—...¿Eso fue todo? —Rokuta se encontraba un poco decepcionado, si bien para él fue una buena pelea, él tenía las opiniones de todo, fue muy corta y solo fueron algunos cuantos golpes, nada fuera de lo normal.

—Ahh, pensé que ella iba a ganar, pero el otro ganó por tener frente dura —Shoichi fue hacia su hermana, quien estaba desmayada, tenía un poco de sangre saliendo de su cabeza. Y en ese momento, no dio cuenta que hizo una tremenda estupidez— ¡Papá y mamá me van a matar! —tomo a su hermana y se largo de ahí, tenía que irse rápido y pensar una buena mentira para ver a sus padres. No quería ser regañado como su hermano mayor por hacer lo mismo, solo que Teruko en esa ocasión no sangraba por la cabeza.

Todos los niños al rato se fueron a sus respectivos hogares, Rokuta fue a ver a su hermano quien aún estaba inconsciente.

—"Ay Shige, te dije que te calmes cuando conociste a esos dos" —mientras ponía a su hermano en su espalda para llevárselo, pensó en una excusa para no empeorar su castigo, tal vez diría que se cayó por unas escaleras en camino a volver a su casa. Sí, eso funcionaría, o eso esperaba él.

Nombre: Kamado Rokuta
Edad: 10
Altura: 1.51
Nacionalidad: Japonesa
Fecha de cumpleaños: uno de enero

(Y listo, hasta aquí el cap, espero que lo disfruten, chou)

(1289 palabras)

Una familia fuera de lo normalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora