[☁️] El Chico de Mis Sueños - MingJoong

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Hongjoong sintió su alma dejar su cuerpo al escuchar el cómo llamaban a la puerta de su departamento.

Juntó sus palmas y susurró—Hola dios, soy yo de nuevo. No quiero morir tan joven, todavía no conozco a Ateez, no puedo morir sin haberlos conocido; ayúdame porfa, amén—Lloriqueó y se acercó a la puerta, parándose de puntitas para ver por el hoyo de la puerta a Mingi, quien miraba su celular—Estoy comenzando a arrepentirme, ¿y si mejor repruebo? Total, puedo pasar con un seis–Se dijo a si mismo, hasta que se sobresaltó por otro golpe en la puerta y finalmente tomó valor y la abrió—Hola...—Dijo con una sonrisa nerviosa.

Mingi quitó su vista del aparato y la subió al escuchar la voz del contrario—Ya era hora—Bloqueó su teléfono y lo metió en su bolsillo, prestándole atención al mas bajito.

Hongjoong por un momento se quedó quieto en su lugar al ver al pelirrojo, quien llevaba puesto una camisa a cuadros rojos y negros, jeans de un azul deslavado y unos converse color mostaza; no iba a mentir que aquel chico de verdad era guapo, pero solo eso.

—¿Vas a dejarme pasar o te vas a quedar ahí parado como idiota?—Se cruzó de brazos, sacando al otro de su ensoñación, dejándolo pasar. ¿No podía estar ni un minuto sin que no lo insultara?

—¿Quieres algo de toma?—Preguntó el castaño una vez que cerro lo puerta.

—No estoy aquí por tu hospitalidad, solo quiero terminar ese trabajo ya—Dijo sin mirarlo, ya que se encontraba examinando el lugar un poco.

—No es hospitalidad, estoy tratando de ser educado y amable—Hizo un puchero enojado aunque el contrario no lo veía.

—Pues no lo necesito—Le dio una rápida mirada y se quitó su mochila, dejándola recargada en el sofá de la sala del departamento sentándose en el mismo, acto seguido sacó su laptop de la misma.

Hongjoong aunque no conocía nada a ese chico y le había irritado, y quería que se fuera de su casa lo más pronto posible, ¿cómo se podía ser tan maleducado?.

—¿Porqué tienes un carácter tan duro?—Preguntó sentándose en el mismo sofá pero a una distancia considerable.

—Que te importa—Dijo serio sin despegar la vista del dispositivo mientras seguía tecleando quien sabe que.

El más bajito suspiró frustrado—Escucha Mingi; ya te pedí perdón por el accidente de la bebida—

—Lo se—Dijo sin ninguna expresión, ignorándolo nuevamente.

—¿Entonces porqué parece que aún estas enojado conmigo?—

—Haces muchas preguntas, Minion—Respondió simplemente.

—Intento ser amable, pero no estás ayudando—Dijo con su ceño levemente fruncido

Mingi simplemente lo miró serio, ya que ya le había dicho su respuesta ante esa misma afirmación.