mi angel

capitulo 1

Historia dedicada a lupita97uchiha

Era una noche como cualquier otra en la villa de hoja la pelirosa miraba por la ventana de su cuarto la luna como lo llevaba haciendo desde que ellos se marcharon, dejándola sola porque la consideraban débil, para estar con ellos, para formar parte de su grupo, ella lloró por mucho tiempo al saber que ellos la abandonaron, pero un día comprendió que eso no era así, ella no era débil, de hecho era fuerte y lo demostraría a todos y cada uno de los que se pusieran en su camino ella ya no era más esa molestia a la que todos debían proteger, ahora sería ella la que protegiera a los que le importaban aún por ello debiera morir lo haría con gusto.

Sabéis que no debéis venir aquí, es peligroso- dijo sin mirar a los que recién habían llegado no le hacía falta sabía quiénes eran.

El quiere saber como va la mision-dijo tranquilo el más bajo.

Para eso dudo que os envíe hasta aquí yo le lleve el informe de la situación hace unos días-dijo sonriendo de lado-pero eso vosotros no lo sabíais ya que estabais de misión- dijo tranquila.

Te dije que la mocosa no lo creería- dijo el más alto.

Pasabamos por aqui de vuelta de la misión y decidimos pasar la noche aquí-dijo el más bajito.

Ella lo miró sonriendo, pese a lo poco que habían pasado juntos los conocía bastante y les habia cojido cariño a todos y cada uno de ellos.

Tenéis un baño al final del pasillo y la puerta de al lado del armario es otro-dijo tranquila- podéis daros un baño, voy a preparar dos habitaciones, luego preparo algo para cenar-dijo dulce- estáis en vuestra casa- dijo saliendo.

La pelirosa preparó dos habitaciones y luego bajó a preparar algo de cenar mientras estaba cocinando entró uno de los jóvenes en la cocina ella lo miró y sonrió él llevaba solo una camiseta y un pantalón, su pelo aún algo mojado ya que vio algunas gotas al caer por su sedoso y liso pelo negro suelto cayendo sobre sus hombros, el solo se puso a su lado y ambos acabaron de hacer la cena, el otro joven puso la mesa y los tres se sentaron en la mesa.

que tal les fue la misión-pregunto mirándolos.

sin problemas como siempre era algo simple cojer cierta información y matar a los guardianes de ella ya sabes lo común-dijo el de pelo azul.

a veces extraño lo común- dijo comiendo.

ellos no tardaran en volver- dijo el pelinegro mirandola.

que hagan lo que quieran si vuelven que lo hagan después de 5 años ya no me importa-dijo seria.
pero el pelinegro sabía que tras esas palabras aun le dolía el abandono más de lo que estaba dispuesta a admitir, los tres hablaban tranquilamente de todo un poco cosas triviales y sin mucho sentido así como de entrenamientos y jutsus, después de una agradable cena cada uno fue a su dormitorio a descansar la pelirosa como tantas otras noche no podía dormir ya era común para ella ese hecho ya no recordaba la última vez que había dormido toda la noche sin necesidad de pastillas ella salió al balcón y de ahí subió al tejado de su casa para quedarse mirando las estrellas como cada noche hasta el amanecer.

sigues sin poder dormir bien-dijo alguien a su lado ella no se giró.

supongo que ya me es común el hecho-dijo tranquila con el no tenia que fingir, el conocia su pesar igual que ella conocía el de él- y qué hay de ti-dijo sin mirarlo.

me gusta ver las estrellas- dijo con calma.

la echas de menos- dijo mirando las estrellas- la villa me refiero, por eso has venido,a la sardina la puedes engañar diciendo que venía de paso-dijo sonriéndole como solo lo hacia con ellos.

pero a ti no puedo- dijo sonriendo- si la echo de menos pero fue mi decisión lo que me alejo de ella…-dijo con nostalgia.

y de él- finalizó ella- sacrificaste todo lo que te era importante por su seguridad, porque tuviera una vida como la que tu no tuviste, pero finalmente el se marcho ya buscar lo que aquí hubiera encontrado…-dijo con tristeza.

sí supongo que todo fue mi culpa, que él se fuera y con él ellos, tu sufrimiento fue mi culpa, pero tú aquí estás, eres más fuerte de lo que crees cerezo, no dejes que nadie te haga creer lo contrario- dijo tranquilo.

no fue tu culpa, nada lo fue, él...ellos tomaron esa decisión, ellos son los culpables de mi sufrimiento, tú...vosotros fuisteis mi salvación, mi apoyo cuando nadie creía en mí, gracias a vosotros me hice fuerte y pude sobrellevar su traición-dijo sincera- tu único pecado es amar demasiado a tu hermano itachi-dijo dejando caer su cabeza en el hombro de este.

ambos continuaron hablando hasta que el sol asomaba por la montaña de los kages, ya eran muchas las noches que ambos habían compartido hablando o simplemente contemplando el firmamento ante ellos.
Con los primeros rayos de sol ellos entraron en la casa y el pelinegro y el peliazul no tardaron en irse, los días continuaron pasando ya hacía tres semanas de aquel dia y ella fue llamada a primera hora de la mañana al despacho de la hokage ella no tardó en llegar y tras un pase de la que fue su maestra entro y allí frente a la hokage vio a tres hombres dos de su edad uno mayor a los otros dos.

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Nos leemos en el proximo capitulo gracias por vuestros comentarios y votos me encanta leerlos