Lunes,
9 de MarzoPov. Mauro M.
—¿Pero qué pasó entre ellos? —pregunté a mamá, tratando de entender porque esta cena era tan importante.
Habían vuelto mi tío y mi tía junto con mi primo a la ciudad. No conocía a ninguno de los tres, en realidad, ya que mi padre y mi tío se pelearon cuando apenas tenía 2 años. Mis tíos entonces se fueron a, según tengo entendido, Córdoba. Jamás me había interesado mucho saber de esa parte de mi familia, además que cada vez que saltaba el nombre de mi tío, mi padre se enojaba, por ende el nombre "Gabriel" estaba prohibido en la casa.
Pero, hace unos meses, se habían arreglado, y aparentemente en el fin de semana habían vuelto a la ciudad.
Era extraño. Demasiado. ¿Por qué razón habrían estado peleados por más de 10 años? ¿Y por qué lo arreglarían recién ahora?
Mi madre suspiró y miró alrededor, como buscando que no hubiera nadie cerca.
—Gabriel creía que Laura lo engañaba con tu padre —explicó—. Discutieron, y luego de esa discusión, Gabriel decidió vender la casa de tu abuela, donde vivía con Laura y tu primo, siquiera lo consultó, y tu padre se enojó.
—¿Todo por una casa? —pregunté, haciendo una mueca. Teníamos dinero para comprar 10 casas más si queríamos.
—No es solo una casa —respondió mamá—. Es donde los dos crecieron, y tu papá no tuvo posibilidad ni de buscar algunas cosas preciadas que tenía allá; los dueños nuevos tampoco le vendieron nada, menos se lo entregaron. —terminó de explicar.
—Hm... —susurré a forma de asentimiento.
Aun así, me resultaba raro que de repente se hubieran arreglado; pero si eso significaba que ya no había un Innombrable en la casa, entonces mejor.
—Dale, termina de arreglarte. Seguro te vas a llevar bien con tu primo, tiene tu misma edad. —alentó mi mamá.
Enarqué una ceja, como diciendo "¿En serio?". Ella no parecía muy consciente de que dos adolescentes forzados a llevarse bien, raramente van a llevarse bien.
Aun así, subí a mi cuarto y me terminé de arreglar. Me puse unos chupines color beige, unas zapatillas converse negras, una camiseta blanca y una chaqueta de vestir negra, que no me molesté en prender. Detestaba tener que usar ese tipo de ropa, pero era mejor que una camisa.
Esperaba acostumbrarme a las camisas, porque en la carrera de abogado que mi padre prácticamente me obligaba a seguir, tendría que usar camisas 24/7.
Me terminé de arreglar un poco frente al espejo, especialmente mi cabello.
Entonces, sonó el timbre.
Bajé, a sabiendas de que no iban a abrir la puerta hasta que estuviéramos los tres juntos, esperando a los invitados como una familia perfecta.
Cuando llegué, ya estaban mis padres ahí. Me sonrieron, y entonces mi padre fue a abrir la puerta. Mi mamá pasó uno de sus brazos por mi espalda, apoyando su mano en mi hombro, probablemente al tanto de mis ganas de huir.
Escuché a mi padre saludar a los invitados, y luego los dejó pasar.
Sentí que se me iba a caer la mandíbula al piso.
Por la puerta, había ingresado Spallatti, que se mostró tan sorprendido como yo al verme ahí.
Pero no tenía mi mismo apellido, no podía ser mi primo, ¿O si?
ESTÁS LEYENDO
The kids are coming [(T)rap] (CANCELADA)
Fanfiction.∞.∞.∞. » El inicio de un nuevo año escolar llega, acompañado de miles de problemas y estudiantes nuevos « .∞.∞.∞. [ADVERTENCIA: Contenido MUY sensible, leer bajo su propia responsabilidad y con discreción] .∞.∞.∞. Parejas principales: Litcko y True...