Capítulo 26

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Viernes,
26 de Junio.

Narrador omnisciente

Duki ya siquiera sabía cuanta gente había en su casa. Estaba seguro de que había gente que ni conocía. Pero era, dentro de todo, normal.

Había recibido ya varios regalos de algunos compañeros de clase y también de sus ex-compañeros de clase, quienes también habían sido invitados.

Claro que los dos grupos no se mezclaban, probablemente por incomodidad. Sus ex compañeros no se sentían muy cómodos cerca de gente tan "cheta". Pero tampoco le importaba demasiado.

―Feliz cumple. ―saludó un chico de unos 18 años, cuando Duki fue a abrir la puerta. Estaba con ropa holgada pero muy a la moda.

―Tiaguito, no te veo hace bocha. ―saludó Lombardo, abrazando al contrario con una sonrisa en cara.

―Sos vos el gil que no se aparece por ningún lado. ―soltó el de cabello bicolor, con una sonrisa divertida.

Y entonces, Duki notó que venía abrazando a otro chico por el cuello. Parecía bastante menor, llegaba hasta el hombro de Pacheco.

―Ah, el es Lauti. O Zaina. ―lo presentó el tatuado.

―Un gusto. Feliz cumpleaños. ―saludó el menor con una sonrisa.

―Un gusto pero... ¿Qué edad tenes? ―cuestionó. Se lo veía muy pequeño como para estar en una fiesta así.

El menor pareció contener un bufido.

―Tengo 16. Sé que parezco de 7, pero... 

―Ta' bien, perdón, perdón. ―respondió el tatuado con una pequeña risa, dejándolos pasar.

Duki los guió hacia el grupo de sus ex compañeros, curioso por la cercanía de ambos chicos, pero sin decir nada al respecto. Tal vez eran familia.

Se quedó charlando con el grupo, que era bastante amplio, pero eran, al fin y al cabo, sus ex compañeros: MKS, Neo, Brasita... Ellos y Tiago solían ser su grupo de amigos en el colegio, aunque tenían también varios amigos externos al colegio.

Estuvo charlando con estos hasta que vio a su "algo" a unos metros, yendo hacia la cocina.

Se excuso con el grupo y fue con Paulo a la cocina.

―¿Bebé? ―cuestionó, al verlo con una expresión extraña en el rostro.

El nombrado alzó la mirada, y le dio una pequeña sonrisa algo forzada, dejando que el contrario se acercara y le mimara la mejilla.

―¿Qué sucede? ―cuestionó el tatuado, al notarlo extraño.

―¿Crees que es buen momento para hablar con Lit? ―preguntó Londra, haciendo una pequeña mueca.

Lombardo se sorprendió al saber que estaba Lit en su casa, después de todo, no creyó que iría, ni lo había visto llegar.

―Mmh... ―pensó unos momentos antes de responderle― Creo que tenes que hacerlo cuando te parezca. No hay un buen momento para una charla así. Además, si lo pospones todo el rato no lo vas a terminar haciendo, como ayer. ―le recordó, mimando suavemente su mejilla.

Paulo suspiró, acurrucándose contra la palma ajena.

―Me va a odiar, ¿No?

Duki hizo una mueca, sin estar seguro de la respuesta. Lit era complicado. Más en este tipo de temas. No podía estar seguro de cómo se lo iba a tomar. También dependía de cómo tratara el tema Paulo.

The kids are coming [(T)rap] (CANCELADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora