victory; julian casablancas

VI. 'cause you're lie ~

— Genial Rick, entonces...

— Todo está listo, Jules, solo tu te encargas del resto.

— Seguro, en cuanto tenga novedades pasaré por la oficina.

Sin más lo despedí y corté dejando el celular a un costado del teclado. Volví a enfocar la vista sobre la pantalla y abrí WhatsApp Web.
Rick me había pasado el contacto tal y como se lo había pedido, y se creyó la excusa. Cliquee sobre su contacto para que me dirija a su casillero de mensajes. Por obvias razones no me tenía agendado pero la mayor prueba de que el número era correcto era que su contacto aparecía con última conexión y foto de perfil: ella con un vaso con algún trago y una remera de corte V.

Todo estaba servido en bandeja. En mi bandeja.

Nuevamente agarre el celular y agende el número definitivamente. Una vez hecho eso, me dirigí a la agenda de contactos y apreté el suyo para comunicarme. Solo espero que el roaming no esté tan caro como recordaba, especialmente porque estabamos en el mismo continente ("-¡America no es solo Canadá y Estados Unidos!")

Tardó unos segundos en marcar. Me preguntaba si no estaré llamando en mal momento; que este durmiendo, trabajando o algo por el estilo. La segunda incógnita sería su reacción.

— ¿Hola?— dijo una voz detrás del audífono. Era voz en español era bastante gruesa, claramente de hombre. Y Victoria no era hombre, era mujer.

Mire por unos segundos el contacto de WhatsApp y confirme que era ella.

Quizás era su padre o algún amigo, pero ¿Por qué no hablaba ella?

— Hola...— arrastre las letras tratando de tener una buena pronunciación en español— ¿Dónde está Victoria?

Al segundo de decir eso me di cuenta que lo que había preguntado era una estupidez gigante.

— ¿Quién habla? — pregunto en inglés.

Sabía inglés, ¡Bien! Una me tenía que salir.
Trataría de hablar lo más claro posible para una conversación fluida.

— Soy Julian, soy un productor interesado en Victoria...

Maldición, no recordaba su apellido y la agende sin ella.

— Ah, habla su marido, ¿Cómo dijo que se llama?

Oh, ¿Escuché mal o dijo "marido"?

— Habla Julian Fernando, soy un importante productor de Estados Unidos. Lo que importa es que quería hablar con ella.

Había notado un leve nerviosismo en mi voz y trate de esconderlo. Me pare de mi silla y empecé a caminar en círculos.

— Así que Julian Fernando, ajá. ¿Así que productor? —repitió exactamente mis palabras. ¿Era imbécil o se hacía? Me estaba irritando.

— Si, ¿Podría hablar con ella?— pregunte improvisadamente. No escuché respuesta y por temor a que no me creyera, volví a insistir. — ¿Señor?

— Lo siento, ¿Puede llamar más tarde? Estoy seguro que ella lo atenderá, está ocupada.

Escuche murmullos y voces elevadas. ¿Estarán juntos en este momento? ¡Peor! ¿Y si trabajan juntos? El me reconocería fácilmente, todo el mundo sabe quién soy.

Gracias a cualquier entidad no dije mi apellido. No me creía tan inteligente pero eso podría salvar mi culo.

— ¡Si, no hay problema! —me apresure a responder— aguardo el llamado.

Que hayamos acordado que ella me llamaría era un acuerdo importante dada las circunstancias. Corte sin esperar nada.

Dejé otra vez el celular de lado mientras me aseguraba que el ringtone tuviese sonido.

Marido, marido, marido. Trate de recordar en la mayor medida posible momentos íntimos dónde me hubiera dado indicio de matrimonio o por lo menos un anillo que lo confirmara.
¡Imposible! Más de una vez durmió con un sus manos en mi pecho y jamás note uno.

La respuesta era simple y nos mintió a los dos o el tipo que atendió era una farsa y quizás quería jugarme alguna broma.
Para ser sincero, esperaba que la segunda y que no esté bajo ningún compromiso. Porque mi oferta no era justamente laboral.

Me volví a colocar los gigantes audífonos y seguí haciendo mi trabajo en la computadora mientras cada tanto ojeaba el celular, como si eso haría que me llamara.

Después de algo más que una hora, volvió a sonar mi dispositivo y era ella. O por lo menos su número.

— ¿Si?— atendí con temor.

— ¿Habla Julian?

¡Si, al fin!

— ¡Si! hola...—de repente no sabía qué decirle. Meses esperando hablarle o un mínimo contacto para terminar en nada—. Esto es raro.

Meses queriendo hablar con ella y lo primero que le digo es eso.

— Si, lo sé. Querías hablar conmigo por trabajo.

— Si, me atendió tu marido.

— Si— admitió— que eres productor. ¿Que quieres? No eres un productor.

¡Admitió que tenía marido! ¡Lo admitió!

Me sorprendió el tono utilizado en sus palabras pero entendía su paranoia.
Pero, ey, ella sola se metió en esto.

—Ey, ey, ey — interveni ya que estaba empezando a enojarme— lo admito: lo de la propuesta era mentira pero que tengo un sello es verdad.

—Entonces...

—¿Querías que le dijera que te llamaba para que vengas a verme? Puedo cambiar la mentira.

Escuché un suspiro del otro lado.

Iba a reaccionar pero el pitido del celular me indicó que había cortado. Y también me indicó que fui un estúpido por milésima vez en mi vida.

[...]
el anterior puse capítulo 6 y era el capítulo 5 jsksksks como se nota que soy manca

✨ cap dedicado a ughweed porque es piolisima ✨
fin de espacio publicitario