We have the guts to follow the sign

156 30 10
                                    


Glam estaba guardando su guitarra mientras repasaba mental de su presupuesto mensual para ver si podía apartar lo suficiente para un nuevo par de pantalones. El último mes había dado un buen estirón y ya no tenía ningún par que no mostrara una buena porción de sus tobillos. Ches decía que le daba personalidad a sus atuendos, Glam simplemente se sentía ridículo.

—Hey Glam, —la voz del bajista lo sacó de sus pensamientos.— Tocas el violín, ¿verdad?

—¿Sí? —intentó afirmar pero la confusión de hacia dónde iba esta conversación hizo que sonara más como una pregunta.

—Genial, —Lordi se acercó para sentarse en una silla cercana para ver de frente a Glam.— Verás, uno de mis camaradas es parte de un cuarteto de cuerdas que se dedica a tocar en bodas y fiestas elegantes. —La mueca que hizo al mencionar eso último le indicó a Glam que su compañero tenía cierto desdén por esa clase de eventos, y él había sido obligado a asistir a tantos que no podía evitar simpatizar con el sentimiento.

—La cosa es que tienen un gran evento en un par de semanas, —continuó haciendo un gesto desinteresado con la mano,— y uno de sus violinistas renunció hace un par de días después de hacer una enorme escena. El idiota era una gran diva, así que todos estaban bastante aliviados cuando se fue, pero necesitan cubrir el puesto. Entonces le dije "hey, conozco a este chico y si toca el violín la mitad de bien de lo que toca la guitarra tienes a tu nuevo violinista". —El pelirrojo le dedicó una sonrisa divertida antes de continuar,— entonces si te interesa podrías ir y mostrarles lo que sabes hacer. Dicen que la paga es buena y si hay química podrían ofrecerte el puesto de manera permanente.

Glam estaba sin palabras. No podía creer lo afortunado que era. En los últimos meses su relación con los otros dos integrantes de la banda había mejorado, incluso estaba tentado a llamarlos sus amigos. Aún le era difícil sostener conversaciones casuales con ellos por temor a decir o hacer algo equivocado, pero Glam los apreciaba inmensamente por su paciencia y aceptación.

No sabía si Lordi era consciente de lo mucho que significaba este gesto. Para el rubio esto indicaba que su talento era apreciado y tomado en cuenta, que de alguna manera estaba presente en los pensamientos de otras personas y éstas estaban dispuestas a dar la cara por él. Glam no podía evitar sentirse halagado.

—Aunque si estás ocupado no hay problema, —Lordi pareció tomar su silencio como un rechazo.— Es solo que sé que tú y Ches están buscando un departamento y pensé que el dinero te caería bien.

—No, no, no, —la cara del otro indicaba que no entendía qué era lo que Glam estaba negando.— Lo siento, me tomaste por sorpresa, —sonrió apenado, respiró profundamente para poner en orden sus pensamientos.— Me encantaría hacer la prueba. Muchas gracias por pensar en mí.

—No es nada viejo, entre amigos debemos cuidarnos las espaldas. —el mayor se puso de pie y colocó una mano sobre el hombro de Glam.— Mañana te paso lo detalles, —y después de voltear hacia abajo agregó,— y un par de pantalones formales, no creo que esa gente apretada aprecie tus tobillos tanto como nosotros. —finalizó guiñandole un ojo.

---------

Glam había temido que todas sus habilidades se hubiesen esfumado después de meses de ni siquiera voltear a ver su violín, sin embargo los chicos del cuarteto de cuerdas parecían estar satisfechos con sus habilidades y lo habían aceptado sin objeción. Si todo iba de acuerdo al plan después de su primer evento tendría suficiente dinero para el depósito del departamento y un colchón.

Sintiéndose más ligero comenzó a trepar por la ventana de la habitación de Ches, iba a usar la puerta pero el ruido de la televisión le indicó que esa no era un opción. Cuando finalmente logró entrar se encontró con una habitación vacía, extrañado dejó su mochila en la silla volteó a ver el reloj para asegurarse de la hora. 6.30 Ches debería estar aquí desde hace horas. Glam empujó su naciente preocupación y se puso a estudiar las partituras que le habían entregado, iban a tener un ensayo en un par de días y quería estar preparado.

When we had run out of all fearsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora