Capítulo XXVII // Final

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Habían pasado tres semanas desde que Marinette había encontrado el anillo, dos semanas desde que había hablado con Agreste y unos días desde que su contrato con la compañía de diseños había finalizado, la colección estaba lista y ella... ya no debía seguir allí

-Entonces…- dijo Marinette mirando a Adrien, luego de decirle aquello que había dicho tantas veces antes, pero en esta ocasión las palabras fueron más difíciles de pronunciar, no se sintió bien al decirlas, pero no podía no hacerlo

- ¿Te vas?- Adrien miro sus ojos tratando de buscar algún rastro de broma, sabía que el bromista era Plagg pero aún así tenía aquella esperanza de que la chica estuviera mintiendo, pero algo dentro de si sabía que lo que escuchó era verdad. Se había sorprendido cuando al llegar de la empresa vio cómo habían algunas maletas fuera del apartamento de los azabaches...sabía que la chica había hablado con Nathalie acerca del término de su contrato, él le había pedido a su asistente que tratará de convencerla para que permaneciera en la empresa, pero tuvo temor preguntar cuál fue la respuesta de la azabache, pero ahora lo tenía claro

-Si

-¿Hay algo que pueda hacer para que te quedes?- no tenía la intención de decir aquello, pero desde que llegó esa chica puso su mundo de cabeza...literalmente pues…¿quién hubiera imaginado que el verdadero portador del anillo sería él?. Luego de hablar con  su padre acerca de todo lo que había estado ocultando por años, escuchar las razones por las cuales comenzó su búsqueda, el porqué no se detuvo y como la muerte de su madre le había afectado de mala manera, y con con la familia de su madre, lo que quedó claro de ambas conversación fue que nadie quería el anillo, por lo que se lo querían dar a los azabaches, quienes habían llegado a París con ese objetivo, sin embargo ellos decidieron devolvérselo a Tania quien lo había custodiado por años y parecía ser quien no había tenido ninguna consecuencia por ello. Pero algo hizo que Adrien impidiera aquello pidiendo ser él quien lo tuviera. Sabía que su madre lo quería alejar de todo eso pero algo en el anillo le dio seguridad, como si el anillo le transmitiera que si lo aceptaba nada malo le pasaría pese a toda la historia que traía esa joya tras de sí, que la pequeña pieza no le traería mala suerte, al menos no la que afectó a sus antepasados... Aunque supongo que esta es mi mala suerte, pensó el rubio viendo como Plagg sacaba una última maleta... mi Catarina se va

-No es mi estilo permanecer en un solo lugar- Marinette lo saco de sus pensamientos- lo lamento

-Te extrañare- dijo Adrien afectado, extrañaría a la chica y a su compañero fanático del queso

-Yo tambien- respondio con lágrimas en sus ojos- a todos- dijo cuando Alya y Nino llegaban al vestíbulo del edificio

-Debemos irnos Marinette, nuestro vuelo saldrá pronto- Plagg interrumpió el emotivo momento, el ya se había despedido y se encontraba nervioso, siempre lo estaba cuando dejaba una ciudad.

**

-Lamento lo que han pasado por mi culpa, la pérdida de mi esposa fue un golpe bastante duro y quise cumplir sus últimos deseos, todo el asunto se me fue de las manos y casi arruinó la compañía que tanto me costó formar- dijo Gabriel viendo a cada uno de los accionistas

-Al menos le diste tus acciones a Adrien para que manejara la empresa- respondió uno de ellos

-¿Porque comenzaste a arruinar también tus propios diseños?

-Necesitaba alejarme lo más posible de la empresa, debía mantenerla segura

-Si no te hubieras casado con esa chica…

-Fui un tonto, debí investigar más- dijo mirando disimuladamente a Nathalie, quien en ese tiempo había sido un gran apoyo luego de la muerte de su esposa, comenzó a sentir sentimientos más allá de agradecimiento y amistad pero la llegada de esa chica afirmando que tenía las joyas lo cegó completamente ignorando la advertencia de Nathalie quien solo acepto  ver como la reciente relación que comenzaron a tener se acababa para que consiguiera unas joyas que, inmediatamente supo que eran falsas...Emilie le había enseñado bien, excepto como poder hacer entender a Gabriel el error que estaba cometiendo todo por creer a una chica que ya tenía antecedentes de haber dicho mentiras.

Buscadora de oroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora