Príncipe del engaño (#1 PM)

CAPITULO 15

CAPITULO EDITADO

Mijaíl

Tuvimos que salir de la casa, porque no he sabido de mi padre y mi hermano lo cual me parece raro. Llamo a los dos, pero no contestan, me pongo nervioso porque no quiero que les pase o perderlos a ambos.

— Vayan al coche, iré a buscar a mi padre y mi hermano —ordeno a ambos hombres quienes afirman con la cabeza, me doy vuelta, ignoro a todos los que me llaman, pero siento que alguien viene atrás de mí.

¿Porque sigo confiando en mi tío y Christian? Ellos fueron la causa de este gran problema. Me doy la vuelta para ver a mi mujer con un rostro preocupado y suspiro.

— Mijaíl ¿Dónde vas? — me llama una hermosa, dulce voz de la dueña de mi corazón. Ella es mía y siempre lo será de eso no hay duda.

— No vayas quédate conmigo. No quiero que te hagan daño. — súplica con desesperación lo cual hace que me aproxime a ella con rapidez y toque su mejilla.

— Iré por mi hermano y mi padre cariño. Ellos son mi familia — digo y asiente con la cabeza.

— Cuídate, sino llegas en cinco o diez minutos iré a buscarte — dice sin más y yéndose hasta el auto. Esa mujer es muy directa, me encanta su carácter incluso me desafía, a quien quiero negar, todo de ella me encanta.

Entro a la casa comienzo a revisar todo y me encuentro con mi hermano quien está inconsciente en suelo igual que mi papá, escucho los pasos de alguien, está detrás de mí.

Tiene que ser una maldita broma. Pensé que él había muerto ¿Por qué se cambió el nombre? Es absurdo. Por lo visto, mi trabajo no fue bien echo, ahora me arrepiento de haber confirmado eso.

— Mijaíl Romanov, nos encontramos — dice Yannick con burla mientras me apunta la cabeza y ruedo los ojos con cansancio.

— No estoy para tus juegos ¿De acuerdo? Solo quiero ir a mi casa para bañarme y descansar también estar con mi mujer — contesto irritado y enojado.

— Ni yo para los tuyos. Nos divertiremos un poco — contraataca con un tono de burla. Siento un golpe fuerte en mi cabeza que me deja inconsciente.

Espero que Nicole no venga aquí porque le daré unas buenas nalgadas.

Ella tiene que estar a salvo.

Nicole

Minutos más tarde...

No vuelve, estoy desesperada ¿Porque no vuelve?

— Tenemos que irnos — dice Christian y el tío de Mijaíl, pero niego.

— Tenemos que esperarlo, el volverá — aseguro, pero los dos suspiran.

— El dio la orden de irnos — dice Christian insistiendo, pero niego y me encamino para la casa.

— Tengo que salvar a mi hombre — suelto sin pensar. Los dos hombres suspiran irritados, pellizcan el puente de sus narices.

— Estarás cerca de nosotros, espero que Mijaíl no nos mate después de esto — dice el tío y el otro asiente.

— Ten, es un arma — habla Christian y abro mis ojos horrorizada.

¿Por qué me da esto?

— ¿Que haré con esto? — pregunto asustada.

— Defenderte — dice obvio y asiento.

— No sé disparar — excuso, entrego de nuevo el arma de fuego y rueda los ojos.

— Solo, apunta, y aprieta el gatillo — explica.

Minutos más tarde...

Entramos a la casa, cuando revisamos la casa de la planta baja notamos que no hay nadie lo que quiere decir que están arriba.

¿Porque me metí en esto?

Solo vine a trabajar en Italia hace unos meses y me pasa esto.

— Mujer, mueve de una vez — dice cansado el hombre y el otro bufo.

— No me apuren — gruño enojada e irritada por la actitud de ellos.

Subimos con cuidado las escaleras y escuchamos gritos, nos miramos entre los tres, vamos hasta la habitación, el tío de Mijaíl patea la puerta y vemos a la familia Romanov con muchas heridas, me quedo asombrada porque Mijaíl sigue inconsciente y con muchas heridas.

¿Eso hicieron solo en diez minutos? Que rápidos son.

— ¿La princesa viene a rescatar a su amado? — pregunta con burla, el sujeto que me secuestro.

— Así es — afirmo enojada.

¿Qué me está pasando? No me puede gustar un hombre como Mijaíl, no le conozco suficiente y tampoco conozco su vida.

Solo espero que ese hombre valga la pena salvarlo.