Presiento •Romione•

8

- 𝑹𝒆𝒔𝒊𝒈𝒏𝒂𝒄𝒊𝒐́𝒏 -

Verla con Viktor Krum era el peor suplicio para el chico, después de una semana viéndolos juntos, era innegable que Hermione ni siquiera se veía feliz, no le lanzaba al chico sonrisas socarronas ni bromeaba con él; tampoco se mostraba realmente interesada en lo que Viktor le decía, solo asentía y, mientras Ron la veía, se preguntaba si realmente Hermione se veía infeliz con él o simplemente eran figuraciones suyas.

La cafetería de la escuela estaba tan abarrotada como siempre a la hora del almuerzo e igual, el pelirrojo no podía evitar buscar la mirada de Hermione, notaba como la chica evitaba observar a la mesa donde Ron y Harry estaban sentados; este último daba la espalda a la mesa donde la castaña y Krum estaban sentados.

- No entiendo qué le ve - Murmuró con enfado a Harry quien se encogió de hombros; estaba distraído viendo a Ginny Weasley.

- Bueno no se - Comentó distraído - Supongo que es popular y será agradable - Añadió y justo en ese momento Ginny se dio la vuelta y salió de la cafetería en compañía de Luna Lovegood - Su pelo es lindo - Dijo con una sonrisa cuando el sedoso cabello pelirrojo de Ginny ondeó en su espalda y desapareció de la vista del chico.

- ¿Su pelo? - Preguntó Ron y levantó la vista con confusión - No creo que sea eso - Se respondió a sí mismo, dio un último vistazo a la mesa y notó la mirada ceñuda de Viktor, había sido descubierto viendo en dirección a la mesa. Bajó la mirada y se limitó a comer.

- Si, yo tampoco - Respondió apartando la vista de la puerta por donde la hermana de su amigo había salido.

- Harry, no tengo idea de que te pasa - Comentó el pelirrojo y su amigo soltó una risa con atisbo de nerviosismo.

- Chicas - Respondió él y se encogió de hombros, Ron asintió, dándole la razón; aunque supuso que ya no se trataba de Cho Chang, el antiguo interés amoroso de su amigo, pues la chica estaba sentada en la misma mesa que Hermione.

...

La biblioteca era uno de los pocos lugares donde Ron no quería estar realmente, no iba porque le interesara leer, solía ir porque era un lugar tranquilo para dibujar y mas que nada porque sabía que Hermione pasaba el rato ahí, ¿tendría algún sentido seguir yendo en busca de ella? 

Caminaba entre las estanterías con despreocupación, solo prestaba atención a los libros con las pastas más llamativas, algunos eran libros que había visto a Hermione leer, e igual los pasaba de largo; entonces, escuchó un respingo y levantó la vista, vio las ondulaciones de la no muy larga pero alborotada cabellera castaña de Hermione, esta se había dado la vuelta con rapidez y se disponía a ir a otro pasillo.

- No tienes que evitarme para siempre - Murmuró Ron tratando de sonar tranquilo y desinteresado.

- No te estoy evitando - Respondió ella sin darse la vuelta y el chico soltó una leve risa amarga.

- Entonces no hagas que lo parezca - Dijo, después de unos segundos de silencio - No necesitas soltar respingos y darte la vuelta cada que me veas cerca, no estoy ni siquiera molesto - Añadió encogiéndose de hombros.

- ¿Por qué estarías molesto? - Preguntó la castaña y Ron suspiró.

- Tu sabes bien lo que me causa verte con Krum - Susurró para sí mismo, aunque lo suficientemente fuerte.

- Ron...- Balbuceó la chica.

- Hermione, tu sabias  - Repitió - Ni siquiera te ves feliz con él y no entiendo cual es la gracia de estar con alguien que no te hace feliz - Dijo con resentimiento en la voz.

- ¿Tu que sabes sobre lo que me hace feliz o no? - Preguntó ella poniéndose a la defensiva, por un momento se olvidó de que estaban en la biblioteca y levantó la voz.

- Francamente, me baso en lo que veo - Respondió y Hermione frunció el entrecejo.

- Que conveniente - Murmuró con sarcasmo - No necesito que cuides de mi o que te metas en mis relaciones Ronald - Le espetó, algunos alumnos pasaban y los observaban con curiosidad, pues ver a dos adolescentes gritándose en la biblioteca, no era exactamente algo común.

- El fin de semana - Susurró - En la madriguera, dijiste algo sobre lastimarnos si estábamos juntos - Explicó, trataba de buscar la mirada de Hermione.

- Y aún mantengo mi posición - Le cortó ella con un leve gesto de culpabilidad.

- Si claro, no quiero que cambies tu opinión - Respondió él aunque esa respuesta no había sido lo que esperaba - Quiero que sepas que me haces mas daño estando con él - Dijo y sacó un cuaderno de su mochila con pesadumbre.

- Ron...Escucha lo siento, yo no...

- Ten - Murmuró Ron interrumpiendo - Me dijiste que te lo diera cuando lo terminara y aquí está - Arrancó el boceto del rostro de Hermione y esta se mordió el labio nerviosa.

- Gracias - Susurró tomandolo y una sonrisa tímida se dibujó en su rostro, la culpabilidad la estaba matando - Es hermoso - Comentó con sinceridad.

- Hermione - Suspiró con pesadumbre, con un movimiento delicado de la mano le levantó el mentón, haciéndola verlo a los ojos - Si me dices que me quieres, se que podriamos ser felices - Le dijo en un intento de hacer que Hermione lo pensara por una vez más.

Observó fijamente a sus ojos y ella le mantuvo la mirada, sus ojos brillaban, en el interior de ambos se sentía un borboteo cosquilloso; Hermione se fijó en los ojos profundamente azules de Ron, en las pecas que salpicaban su rostro como si estuvieran perfectamente colocadas y se reprimió, mentalmente, a sí misma por las ganas que sentía de besarlo.

 Mientras, Ron se centraba en los ojos miel de Hermione y en cómo tenía el cabello despeinado e igual parecía que así debía estar acomodado; sabía que de cierto modo había admitido no querer hacerla cambiar de opinión pero sabía perfectamente que solo eso necesitaba para sentirse mejor, un si de ella.

 - Si me dices que no... - Tomó aire y cerró los ojos, meditando unos segundos lo que diría - Si me dices que no, yo no volveré a insistir y me alejaré si eso quieres - Finalizó. Hermione sintió un vacío en el estómago, pensó en la idea de Ron lejos, no se le ocurría alguien a quien quisiera mas cerca pero, no podía hacerlo.

- Te quiero pero no puedo corresponder - Respondió y Ron asintió resignado - No te alejes por favor - Murmuró - Sé que no estoy en posición de pedirlo pero, por favor Ron, no te alejes - Pidió, su corazón latía con fuerza y se sentía hecha un manojo de nerviosismo, lo conocía de poco tiempo y aun así, él era importante para ella.

- No creo que a Krum le guste que yo esté cerca y a mi me gustaría evitarme problemas - Respondió y se dio la vuelta - Nos vemos después Hermione - No esperó una respuesta, simplemente volvió a colgarse la mochila al hombro y salió de la biblioteca. 

Hermione no recordaba haberse sentido peor en ningún otro momento. Se había sentido culpable cuando, en la fiesta de Luna Lovegood, había besado a Viktor Krum después de bailar con Ron; se había sentido triste, cuando había preguntado al pelirrojo si recordaba alguna cosa sobre aquella fiesta y él había dicho que solo su baile juntos, pues eso significaba que no recordaba el beso que habían compartido y que era algo que solo ella sabía; y aun así, lo que más le dolía haber visto ese gesto de resignación en el rostro del chico, aquella mirada triste donde se resignaba a que Hermione no aceptaría sus sentimientos. 

Hola! Espero les haya gustado el capitulo;) Gracias por leerme! 

Pueden votar y comentar si gustan, me ayudarian mucho.

Besos, Ann