𝚅𝙸𝙸

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𝑻𝒉𝒓𝒆𝒂𝒕

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𝑻𝒉𝒓𝒆𝒂𝒕

Su respiración era rápida y entrecortada, pero eso no le impedía seguir con la pelea.

Sabía que pasase lo que pasase, ella no debía perder.

No había espacio para errores.

Observó a su contraria, Haiiro Mamiko estaba rebosante de energía y poseía una sonrisa relajada, como si estuviera dando un paseo por el parque un viernes al mediodía.

Le molestaba.

Le molestaba mucho la actitud cínica de la mujer.

Suspiró mientras tomaba fuertemente el mango de su segunda daga dorada y corría hacia la mayor con intenciones de atacarla una vez más, empero la mujer tan solo esquivó su ataque y la golpeó con la funda gris de su katana, haciéndola caer.

Odiaba admitirlo, pero había una gran diferencia de habilidades.

No se rindió y volvió a abalanzarse sobre ella, obteniendo el mismo resultado.

Sintió un dolor punzante en su costado a la vez que alguna sustancia cálida recorría su piel.

¿Alguna de las cosas que llevaba en sus bolsillos se había roto? ¿era sangre?

Lo más probable era que ambas.

—Vamos renacuaja, ¿por qué no usas tu quirk?

No debía hacerlo.

Naomi conocía a la perfección las intenciones de la mujer frente a ella, cuál era su objetivo.

Si usaba su quirk, no solo se pondría a sí misma en peligro, sino también a sus compañeros.

Era algo que evitaría a toda costa.

—¿Sabes? A pesar de que no encontré a la chica estoy de buen humor así que... ¿Por qué no ponerle fin a tu sufrimiento? Esto te servirá de lección, debes hacerles caso a tus mayores—rió con malicia mientras pasaba su lengua por su labio superior—. Aunque ahora que lo pienso, lo hiciste bastante bien a pesar de no usar tu peculiaridad. No sería mala idea tenerte de aliada.

Abrió los ojos por la sorpresa y el miedo, ¿aquella mujer era capaz de hacerla ir contra su voluntad?

«—No es posible, ¿cierto?»

No, no lo era.

Al menos este no era el caso.

La adulta, aún sin borrar la sonrisa perversa de su rostro, desapareció de un momento a otro, desconcertando a la pelinegra.

—Buenas noches, estúpida heroína.

Y sintió un golpe en su nuca, haciéndole perder fuerzas.

𝐂𝐨𝐦𝐩𝐚𝐭𝐢𝐛𝐥𝐞𝐬 | Todoroki ShōtoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora