La calidez de un día frío

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Era un amanecer frío, había caído una nevada durante casi toda la noche, el frío invitaba a no moverse ni un centímetro de la cama, quedarse bajo las cálidas cobijas era lo mejor, así lo pensaba cierta pelijengibre mientras abrazaba a su esposa

Maki: Tenemos que levantarnos, Honoka.

Honoka: Mou No quiero, quiero quedarme así todo el día, disfrutando de tu calor.

Honoka se acurrucó más junto a Maki, esta dio una risita

Maki: ¿Tan pronto te vas a volver irresponsable?.

Honoka: Nunca!.

Honoka se sentó, pero inmediatamente tiritó de frío y se volvió a acurrucar con su esposa

Honoka: ¿No puedo ser perezosa solo por hoy?.

Maki: Bueno, tú puedes quedarte en la cama todo el día, yo tengo que levantarme e ir a la escuela.

Maki le dio un beso en la frente a Honoka y se levantó de la cama

Honoka: Eso es un truco muy sucio, sabes que de ninguna manera te dejaré que vayas sola a la escuela.

Maki dio una risita y fue al baño, Honoka también se levantó y comenzó a alistarse

Honoka: Rayos, sí que hace frío, ¿estará bien que Maki salga así?.

Maki volvió a su habitación, Honoka se le acercó mientras abotonaba su camisa

Honoka: Oye, Maki, ¿no hay problema con que salgas con este frío?.

Maki: No, solo debo abrigarme bien.

Honoka: Pero es muy peligroso, ¿que tal si te resbalas?.

Honoka abrazó a la pelirroja

Honoka: No, no quiero ni imaginarlo.

Maki: Tranquila, Honoka, estaré bien.

Honoka separó el abrazo y miró a Maki

Honoka: Pero...

Maki le dio un tierno beso a su esposa

Maki: Tranquila, Honoka, estaremos bien.

Maki le sonrió a la pelijengibre, esta suspiró derrotada y también sonrió

Honoka: Está bien, pero te voy a estar acosando.

Maki dio una risita

Maki: Eso no es nuevo.

Honoka también dio una risita y se inclinó frente a Maki para darle un beso en el vientre

Honoka: Buenos días, hija.

Maki: Aún no hemos pensado en un nombre para la niña.

Honoka se reincorporó frente a Maki

Honoka: Es cierto...

La pelijengibre puso una mano en su barbilla

Honoka: ¿Qué te parece "Chika"?.

Maki: No suena mal, ¿que tal "Riko"?.

Honoka: También me gusta.

Honoka suspiró

Honoka: Decidámoslo en otro momento, ahora debemos bajar a desayunar y ni siquiera te has cambiado.

Maki: Es cierto.

Maki comenzó a vestirse y Honoka se hizo su peinado de siempre, cuando ambas estuvieron listas, bajaron a desayunar

Kagari: Nozomi-san me invitó a verlas actuar esta noche.

Inesperada LuzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora