❝𝐴𝑣𝑎𝑡𝑎𝑟 [𝑂𝑛𝑒 𝑠𝘩𝑜𝑡𝑠]❞

[𝑇𝑜𝑝𝘩] 𝑈𝑛 𝑝𝑜𝑐𝑜 𝑑𝑒 𝑡𝑖𝑒𝑟𝑟𝑎

→ 𝐹𝑟𝑖𝑒𝑛𝑑𝑠𝘩𝑖𝑝

Estaba caminando de vuelta a casa luego de un día de escuela agotador, he escuchado que los colegios en la nación del fuego son las mas estrictos y no me sorprende, todos los días acabo destruida. 

Iba llegando a mi casa cuando veo a un grupo de chicos corriendo llevándose mi ropa, corrí detrás de ellos pero eran más rápidos que yo, la chica más baja que escapaba de mi movió su cuerpo haciendo que me cayera, ¿acaso es una maestra de la tierra?.

—¡Toph! no puedes hacer eso—. Un chico alto la retó pero la chica no parecía importarle, yo me paré y seguí corriendo. —Chicos ya basta, me siento horrible haciendo esto—. Habló... ¿Kuzon?.

—¿Kuzon?—. Lo llamé confundida. —Oh, hola T/N—. Se llevó una mano a su nuca nervioso, algo andaba mal. —¿Se conocen?—. Habló Toph, la chica de la tierra. —Si, es mi nueva compañera—. Respondió el castaño casi sudando. 

—Ten, no quisimos causar daños—. Una chica de ojos azules se acecó devolviendo mis prendas, yo las acepte confundida. —¿Por qué querían mi ropa?—. Pregunté, el grupo de cuatro intercambió miradas y comenzaron a hablar al unísono. 

—No los entiendo—. Dije abrumada. —¿Es porque ella es una maestra de la tierra?—. Señalé a Toph, los cuatro amigos se quedaron helados mirándome con los ojos abiertos. 

—¿Yo? ¿Maestra?, solo fue un poco de tierra—. Río nerviosa la chica, yo miré sus pies descalzos y junté las piezas sueltas, al parecer por la apariencia de sus ojos Toph es ciega, y si fuera maestra de la tierra eso le ayudaría a ver con sus pies. 

—Si, no sería extraño que usaras tus pies para ver—. Toph abrió su boca y se acercó a mi. —Todo esto nunca pasó—. Me apuntó con su dedo e intentó salir corriendo pero otro chico la frenó. 

—Kuzon, no sé que esta pasando aquí, pero pueden confiar en mi, si es que ella es maestra de la tierra su secreto está a salvo—. Dije intentando transmitirles confianza, no tengo muchos amigos aquí en la nación del fuego ya que mi abuela es de la tribu del agua norte y eso les hace creer a los demás que no soy alguien "puro" o eso es lo que me dicen.

—Está diciendo la verdad—. Toph suspiró, todos se volvieron a mirar y asintieron. —Acompáñanos—. Los seguí hasta una pequeña cueva en donde había un animal gigante. 

—El es Appa, mi bisonte volador—. Dijo Kuzon señalando a la bola gigante de pelos. —Pensé que se habían extinguido—. Me sorprendí, siempre he sido amante de leer y estudiar, estoy segura de haber visto que estos animales habían sido asesinados por la nación del fuego.

—Appa es el último—. Sonrió acariciando al animal. —Ven, siéntate con nosotros—. Toph me llamó invitándome a una pequeña fogata que habían encendido.

Me contaron todo, desde que Kuzon en verdad se llama Aang y es el avatar hasta que atravesaron un túnel secreto con una pegadiza canción. Yo reía con sus historias y escuchaba con atención, todos fueron muy amables conmigo, en especial Toph con quien me llevé mejor que el resto. 

—Ahora que sabes debes guardar el secreto, si no, te aplastaré en mil pedazos—. Me amenazó Toph en broma, lo decía en serio pero tenía una sonrisa en su rostro. —Lo haré, de todas formas mi vida era tan aburrida que yo misma me habría aplastado en mil pedazos—. Reí y Toph me golpeó en el brazo.

—Me agrada esta chica—. Habló mientras yo me acariciaba la zona donde me había golpeado amistosa.

—¿Y que hay de ti, T/N?—. Preguntó Katara curiosa. —Bueno, mi vida es más bien aburida, no tengo muchos amigos, los de la nación del fuego se creen superior al resto y me miran en menos por tener una abuela de la tribu del agua norte—. Los ojos de los hermanos se abrieron. —Nunca me importó de todas formas, me hizo ser más independiente y fuerte—. Terminé de hablar y Toph gritó. —Esa es mi chica, la gente apesta—. Dijo con tono cómplice y me sonreí. 

—Oye, nosotros no apestamos—. Sokka se ofendió. —De hecho eres tú la que se rehúsa a bañarse—. Katara acusó a la pelinegra. —Es solo un poco de tierra, funciona de capa de protección—. Toph respondió orgullosa.

Continuamos hablando hasta que se hizo tarde. —Debo ir a mi casa—. Anuncie parándome y despidiéndome de los chicos. —Yo te acompañaré, quiero dar un paseo—. Habló Toph animada y salimos juntas de la cueva. 

—Trataré de convencer al resto de que puedas unirte a nosotros, eres muy inteligente, estoy segura que serás de ayuda—. Dijo la pelinegra. —Gracias Toph, sería genial poder ayudarlos, odio vivir aquí—. Reímos juntas. 

—Aparte, si bien Katara me agrada es una mandona, sería bueno tener una amiga más en el equipo—. Habló emocionada. —Yo tampoco tuve muchos amigos antes, mis padres me sobre protegían por ser ciega, según ellos eso me hacía débil, nunca se dieron el tiempo de conocerme—. Bufó, ella me entendía, se nota que este es el inicio de una gran amistad.

—La verdad cuando te vi correr no pensé que te alcanzaría, y me dio un poco de miedo cuando me hiciste caer, lo último que pensaría de ti es que eres débil—. Dije sincera y al parecer Toph lo sintió porque se sonrojó un poco y me dio las gracias.

𝘿𝙊𝙎 𝙎𝙀𝙈𝘼𝙉𝘼𝙎 𝙈𝘼́𝙎 𝙏𝘼𝙍𝘿𝙀

—Corre—. Toph me jaló de la muñeca y comenzamos a correr hasta escondernos detrás de una roca. Estábamos en la playa y habíamos planeado una broma para Katara quien últimamente no anda del mejor humor. 

Toph podía ver con sus pies, pero yo tuve que ponerme de puntitas para ver como la broma se desarrollaba. Cuando Katara salió por la puerta principal Toph movió la roca que sostenía un hilo amarrado a un balde con arena, ya que si lo llenábamos con agua ella podría controlarla.La arena cayó sobre la chica quien gritó enojada, nosotras comenzamos a reír mientras Katara se acercaba enfadada. 

—Muy chistoso T/N,Toph—. Se sacudió el pelo dejando caer la arena. —Debieron pensar mejor su escondite—. Me di cuenta de lo que planeaba, la roca estaba ceca del mar y ella podría mojarnos con agua control, rápidamente le avisé a Toph en un susurró y ella nos enterró bajo tierra justo en el momento del ataque, mi amiga hizo un tunel por debajo y salimos a la superficie una vez ya estabamos lejos de la costa. 

Katara estaba enojada pero sonrió al ver el paisaje, Sokka y Aang jugaban a hacer castillos de arena, Momo y Appa comían frutos juntos y Toph y yo habíamos encontrado un lugar donde somos nosotras mismas y nos quieren por eso.