Lo que nunca ocurrió: La deserción.

Capítulo 12: "Hasta siempre" & "Muere y despierta"

           

FINAL DE LA PRIMERA PARTE 

            No le gustaría verlos marchar... ¿hablará una vez más? ¿Intentará detenerlos?

            Detenerlo.

            No lo cree, no desea hablar otra vez, no con el conocimiento de que serán más palabras en vano. Palabras que no servirán de nada. Sasuke ya tomó su decisión: lo dará todo por su revolución, por lo que desee hacer. Y ella... ya no tiene fuerzas para procurar detenerlo. Sakura quiso creer en un principio en esa mentira. Cuando Sai le preguntó qué pensaba con respecto a la extraña y repentina forma en que Sasuke apareció como aliado en la guerra, ella le mintió con su respuesta y aquella dulce pero falsa sonrisa que su rostro mostró. Pero esa mentira no era para él, esa mentira era para ella misma. La evidencia de un autoengaño.

«Yo deseé creer que Sasuke-kun había vuelto. Lo deseé con tanto fervor que hasta me lo creí. Lo malinterpreté todo»

            El hecho de que la dejase ir aquella vez no significa que de verdad le importaba. Toda la seguridad puede desvanecerse en un segundo cuando te enfrentas a la realidad. En antaño Naruto le prometió que lo traería de vuelta, pero eso... ¿podrá ser posible?

Sakura retiene palabras que siente haber expresado infinidad de veces y no ser escuchada. Quiere hablar y así evitar que Sasuke siga en ese camino. Anhela poder decirle lo que aquella última vez no le dijo. Pero no puede. No puede solo abrir sus labios y que las palabras fluyan como siempre lo han hecho, no desea ser despreciada una vez más.

«De todas formas ¿mis palabras servirán de algo? ¿Necesita él otra declaración de amor? No, por supuesto que no. Eso nunca le ha importado»

            Calla con el corazón saltando de dolor en el pecho, atragantándose de impotencia, sintiendo que fracasó una vez más. Todo ha sido inútil, como si las cosas se repitieran una y otra vez. Sasuke solo habla de su revolución y en su mirar se observa el frenesí de un odio profundo. Y ella sabe que despreciará sus palabras, por eso guarda silencio. Los ve marcharse a esa última batalla que marcará un precedente en el mundo dependiendo de quién gane. Para bien o para mal. La batalla final en que todo quedará determinado. Sakura ve las espaldas de ambos alejarse en el horizonte...

«...una vez más»

            Llegan al valle del fin, con recuerdos llegando a sus mentes de aquella vez en que Sasuke se fue de la aldea.

            El Valle del Fin...

            Cada cual en una de las dos estatuas de los célebres shinobbi que moldean el paisaje de la hermosa cascada, Sasuke en la de Uchiha Madara y Naruto en la de Senju Hashirama. Hablan antes de pelear. El chico Uchiha descarga sus razones, explica sus motivos para justificar lo que pretende llevar a cabo; Naruto procura hacerlo comprender el significado de todo lo que hizo Itachi, no obstante, Sasuke es inflexible. Se enfrascan en una lucha larga y garrafal.

            Naruto y Sasuke continúan en el combate, no obstante, están tan a la par en sus habilidades que llevan la mayor parte del día luchando entre sí y todavía no se ha concretado un ganador. Las horas pasan, al igual que sus fuerzas; poco a poco la lucha se hace molesta.

            Sakura —a lo lejos— ve las luces, escucha las explosiones y se siente frustrada. Ha transcurrido la mayor parte del día y ahora no percibe sino el sutil rumor de su batalla, que seguramente se ha vuelto de a pie. En este momento sus ojos verdes como esmeraldas sin brillo a causa de la decepción miran la escena con estoicismo. No obstante, los pensamientos no la han dejado tranquila.